Frente a los “proyectos de muerte” impulsados por trasnacionales y cobijados por los gobiernos federal y estatal para apoderarse de los recursos mineros, petroleros, del agua, la biodiversidad y el territorio, urge organizarse para frenarlos, exhortaron representantes de la Unión de Cooperativas Tosepan Titataniske (UCTT) de la Sierra Norte de Puebla, los investigadores Armando Bartra y Víctor Toledo, así como el videoasta Jesús Ramírez Cuevas.
Durante la presentación –la noche del miércoles– del video Sierra Norte por la vida, resistencia contra los megaproyectos de muerte en la Sierra Norte de Puebla, que documenta la movilización de miles de habitantes de comunidades de esa área que han logrado frenar el ingreso de empresas mineras e hidroeléctricas, y que ahora sufren “una oleada de represión” oficial, María Luisa Albores González y don Epifanio García López –asesora y socio fundador de la UCTT, respectivamente– subrayaron que se requiere que la información sobre el desastre ambiental que esos proyectos representan rebase la región y circule por todo el país y el mundo.
Hay que difundir lo que esos proyectos representan para despertar la conciencia ciudadana sobre la necesidad de evitar la depredación, no sólo en los pueblos indígenas inmediatamente amenazados, sino de todo el país, así como para evitar que continúe la represión, que tiene ya en la cárcel en Puebla a dirigentes sociales y defensores de derechos humanos, como Juan Carlos Flores, Enedina Rosas y otros, añadió Albores González.
Detalló que en las sierras Norte y Nororiental de Puebla hay dos proyectos para la construcción de presas, nueve concesiones para hidroeléctricas y 118 minas, con más de 140 mil hectáreas concesionadas, además de un gasoducto del Proyecto Integral Morelos (PIM).
El citado video, producido por la Tosepan –que tiene 22 mil socios en 290 comunidades en 22 municipios indígenas nahuas y totonacas– y la Cooperativa Monopie, fue dirigido por Ramírez Cuevas. Recoge las explicaciones de personas de diversas comunidades serranas de por qué su negativa a las minas, en su mayoría de empresas canadienses, pero también de Frisco, una de las empresas de Carlos Slim, y de una compañía china que fue expulsada de Zautla.
En medio del verdor del paisaje serrano, hombres y mujeres, jóvenes y mayores, comentan que estas minas contaminarán con cianuro sus ríos y manantiales, que las represas los privarán del agua con la que riegan sus cultivos de café, pimienta, maíz, calabaza, chile, frutales diversos que son su sustento y vida, para producir una riqueza que saldrá de México, donde sólo quedarán desertificación y miseria.
El video, anunció Ramírez, se subirá a You Tube para que cualquier persona pueda bajarlo y difundirlo.
Albores González indicó que se ha hecho toda una campaña de información para que la gente no venda su tierra a empresas como la canadiense Almaden, pero el Gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, quien, dijo, trata de hacer ver que sólo unos cuantos se oponen a esos proyectos, hizo aprobar en marzo una Ley de Expropiación “por mandato del gobernador, sin derecho a audiencia”, además de que Puebla “fue el tercer estado en aprobar una ley de privatización del agua”.
Otro tipo de autodefensa Bartra y Toledo –ambos colaboradores de La Jornada– encomiaron la organización de la Tosepan, que en más de tres décadas de trabajo, con democracia participativa, ha podido enfrentar no sólo los problemas productivos, sino abordar cuestiones de salud, de educación, de defensa del territorio, la cultura y la identidad.
Toledo señaló a su vez que la creación de la Tosepan representó hace 37 años el surgimiento de otro tipo de “autodefensa”, cuya experiencia demuestra que con la sabiduría indígena que combina el conocimiento de los mayores y los jóvenes, y con organización y democracia participativa, “podemos regenerar este país”. La buena noticia es que hay otras 20 o 25 experiencias como la de Tosepan y se tienen detectadas unas mil más “que nos dicen que se puede construir otro país”, afirmó.