OGX comunicó al comienzo del mes que suspendía el pago de unos US$45 millones en intereses referentes a títulos emitidos en el exterior que vencían en estos días.
La estrategia Eike Batista de venta de activos y participaciones en proyectos y de transferencia de capital de varias de sus empresas redujo los temores de una posible quiebra de la petrolera OGX, compañía bandera de su conglomerado, aseguran los analistas.
“Estos recientes movimientos no son nuevos y las negociaciones estaban en curso, lo que pasó fue que surgieron paralelamente otras noticias negativas que agitaron todavía más el mercado y pusieron en alerta los títulos de las empresas” de Batista, señaló el consultor independiente de mercado Rafael Maraba.
OGX comunicó al comienzo del mes que suspendía el pago de unos US$45 millones en intereses referentes a títulos emitidos en el exterior que vencían en estos días. La noticia fue recibida en el mercado de Sao Paulo como un primer paso hacia una posible declaración de quiebra de la compañía.
A pesar de alejar por el momento la posibilidad de una quiebra, el fantasma de la recuperación judicial sigue rondando al grupo, “pues las deudas con los acreedores son altas y Eike (Batista) todavía negocia esas deudas en Estados Unidos”, cercanas a los US$3.600 millones, apuntó el analista.