Según datos de la Cepal, solo en Brasil se superan los niveles nacionales. Altos flujos de inversión extranjera directa y rentabilidad de la minería influyen en esta tendencia.
Pese a que en tamaño la economía chilena es inferior a la de Perú, Colombia, México o Argentina, las empresas extranjeras que invierten en nuestro país registran desde hace varios años uno de los mayores volúmenes de utilidades en América Latina.
El año pasado, por ejemplo, las ganancias de las firmas foráneas que operan en el mercado nacional llegaron a US$ 16.409 millones, según datos del Banco Central. Dicho nivel -junto con los exhibidos entre 2008 y 2011- son destacados por el último informe de Inversión Extranjera Directa (IED) de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) como los segundos mayores de la región después de Brasil.
La tendencia tiene un extenso registro histórico, pues si se comparan las utilidades de las compañías extranjeras en Chile entre los años 2004 y 2007, se aprecia que los niveles locales incluso superaron a los de la mayor economía latinoamericana.
Miguel Pérez, oficial de asuntos económicos de la división de desarrollo productivo y empresarial de la Cepal, explica que las importantes ganancias de las empresas foráneas se deben a dos aspectos: los altos flujos de inversión extranjera directa que ha recibido Chile en los últimos años -que en 2012 alcanzaron el récord de US$ 30.323 millones- y la alta rentabilidad de las operaciones en el mercado local, alentado principalmente por el dinamismo del sector minero.
«La rentabilidad media de la IED en Chile en los últimos cinco años (según datos entre 2007 y 2011) es de aproximadamente 15%. Junto a Bolivia, Colombia y Perú (donde se llega al 25%) superan de forma importante el promedio regional de 7%, ya que las inversiones están más ligadas a los sectores de recursos naturales e hidrocarburos, con ganancias mucho mayores respecto a otras industrias», detalla Pérez.
El experto señala que una de las razones de ver niveles de utilidades mayores a los de México se debe además a que las empresas en ese país han ingresado más hacia la industria de manufacturas de bienes para la exportación, «una actividad que registra tasas de crecimiento muy modestas en la última década».
Impacto local
Observando los datos del Banco Central se desprende que de los US$ 16.409 millones generados en ganancias en Chile durante 2012, las empresas extranjeras destinaron el 64,48% a la reinversión de utilidades.
El vicepresidente ejecutivo (s) del Comité de Inversiones Extranjeras, Carlos Dettleff, destaca que ese comportamiento ha sido beneficioso para la economía chilena. Sin embargo, afirma que existen otras externalidades positivas.
«Hay que destacar que cerca de un 15% del mayor número de ocupados en la economía chilena a partir del año 2010 -cerca de 119.600 nuevos puestos de trabajo- fue gracias al aumento observado en los flujos de IED», apunta el funcionario.
Otro dato relevante, afirma, es que las empresas con participación extranjera pagan en promedio remuneraciones 130% más altas que los salarios promedio de las empresas sin participación extranjera de un mismo tamaño y sector productivo.
La autoridad agrega también que solo en 2012, la IED ingresada a Chile fue equivalente al 11,3% del PIB del país.
Dettleff dice que la tendencia de las altas utilidades de las firmas foráneas en Chile se mantendrá «en la medida en que la economía nacional siga gozando de buena salud y se mantenga un entorno claro y estable para los inversionistas extranjeros».