Panamá

Unión de los Pueblos Originarios Transfronterizos (UPOT).

Declaratoria de Sieykin
Nosotros, los Pueblos Originarios (mal llamados “indígenas”) Bribri, Cabécar, Këköldi, Ngäbe, Bribri de Panamá, y Naso, representados por nuestras autoridades, organizaciones y Asociaciones descritas a continuación.

La Asociación de Desarrollo ADITIBRI, la Asociación de Desarrollo ADITICA, Asociación de Desarrollo Këköldi, el Congreso General  Ngäbe y Buglé, la Dirigencia y el Rey Naso Valentín Santana, la Fundación Naso entre otros organizaciones listadas al final del presente documento, celebramos un encuentro como Pueblos originarios para analizar y sacar algunas conclusiones sobre las amenazas que enfrentan nuestros territorios transfronterizos, las cuales impactan directa y negativamente nuestra convivencia tradicional, cultural, producción tradicional y nuestra cosmovisión misma armonica con nuestro entorno natural.

Una de las principales amenazas que estamos enfrentando son los megaproyectos, principalmente las represas hidroeléctricas, la minería los REDD-Cambio Climatico (captura de carbonos y sus «bondades $$$») proyectos petroleros y la imposicion transgenica en nuestra alimentación. Estas amenazas, que llegan a nuestros territorios en nombre del “desarrollo” contaminan y destruyen nuestros ríos, nuestra flora, fauna y conocimientos ancestrales de nuestros Pueblos, generando un daño ambiental, social y cultural irreversible, incluyendo la violación de nuestros Derechos Humanos justiciables de nuestros Pueblos Originarios.

Los megaproyectos están provocando el desplazamiento forzado de nuestras tierras donde históricamente hemos convivido en una relación armónica, espiritual y productiva con la naturaleza, la Madre Tierra, los  cerros, montañas y sitios sagrados. Algunos de estos megaproyectos como las represas hidroeléctricas y agro-combustibles de manera perversa se están promoviendo como opciones para mitigar  las emisiones amparándose y recibiendo bonos a traves del Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) lo cual evidentemente NO es cierto.

Mientras el cambio climático ha sido provocado por los países industrializados, es en nuestros Pueblos Originarios donde estamos viviendo los efectos negativos, tales como inundaciones, cambios en los ciclos productivos, levantamiento de las mareas en áreas marino-costeras, pérdida de cultivos, inseguridad alimentaria, enfermedades extrañas cambio en el clima, entre muchos otros efectos negativos.

Con respecto a las iniciativas del mega proyecto del Banco Mundial Reducción de Emisiones por Degradación y Deforestación de bosques (REDD) guardamos serias reservas y recelos debido principalmente a las siguientes razones: A) la desinformación sobre los efectos negativos así como aspectos técnicos y científicos sobre este proyecto; B) la ausencia de un proceso de consulta que garantice el consentimiento libre, previo e informado de acuerdo con la Declaración Universal de las Naciones Unidas sobre los Derechos de nuestros Pueblos Originarios (“indígenas”); C) REDD vulnera nuestros Derechos territoriales, incluyendo la tenencia legal de nuestros bosque, arboles, suelo y subsuelo; D) no garantiza el pleno acceso y equidad en la distribución de beneficios; E) no reconoce nuestros conocimientos y estructura de gobernabilidad de nuestros territorios ancestrales, nuestros procesos y nuestras prácticas.  

Otra de las amenazas que identificamos claramente es la imposición del Estado a través de la creación de “áreas protegidas” en nuestros Territorios Originarios, en este caso el Parque Internacional La Amistad (PILA) y su zona de amortiguamiento, con la excusa del “progreso”, el desarrollo, la cooperación, la paz y la conservación de la biodiversidad. Sin embargo, ambos Estados (Panama y Costa Rica) lejos de proteger estas áreas, lo que han impulsado es la constitución de una estrategia de entrada hacia nuestros territorios para luego concesionar nuestros recursos a empresas nacionales y transnacionales.

La creación y gestión gubernamental del PILA nos ha privado y nos sigue privando a nuestros Pueblos Originarios de nuestra subsistencia y convivencia armónica con la naturaleza y la Madre Tierra, así como el uso de los recursos naturales en nuestro propio territorio.  Con esto nos han impuesto de manera inconsulta un sistema de normas y una entidad pública externa para administrar nuestro territorio, desconociendo nuestra institucionalidad incluyendo nuestras formas propias de organización y gestión de nuestros territorios. Provocando con ello el desplazamiento de nuestras comunidades lejos de nuestros territorios en los que hemos vivido ancestralmente. Este desplazamiento produce la muerte de nuestros recursos, de la Madre tierra, la naturaleza, incluso la muerte de nuestros Pueblos originarios. En nombre de la conservación han violado nuestros Derechos y han saqueado nuestros recursos.

Al mismo tiempo la iniciativa por parte de ambos Gobiernos en desarrollar un proyecto Binacional sobre la Cuenca del Río Sixaola se ha elaborado y se inicia su implementacion sin el consentimiento libre, previo e informado de nuestros pueblos originarios transfronterizos. Por lo tanto este proyecto plantea un sistema excluyente, diseñado desde afuera y no participativo al estarse ejecutando sin la participación de nuestras poblaciones originarias que viven sobre la cuenca del Río Sixaola.

Todas las amenazas mencionadas anteriormente destruyen nuestra Madre Tierra, nuestra identidad como pueblos originarios, al alterar nuestra convivencia con la naturaleza e incluso al intentar eliminarnos no solo como individuos, sino como Pueblos y territorios transfronterizos. Como referencia podemos mencionar los acontecimientos vividos en julio pasado (2010) en Changuinola, Bocas del Toro en donde producto de la imposición de una Ley inconsulta por parte del gobierno panameño (la Ley Chorizo) la policía nacional asesino a dos (2) compañeros claramente identificados, los hermanos Antonio Smith y Virgilio Castillo y cientos de heridos y lisiados de por vida. Otra de las pruebas evidente es el reconocimiento por parte del gobierno panameño a un supuesto “líder” del Pueblo Naso (Tito Santana) que el Pueblo expulso de su cargo y del territorio pero que hoy día continua respaldado por el gobierno panameño y de esta manera le hace mucho daño al Pueblo Naso. Finalmente esta los recientes hechos ocurridos en la Comarca Ngäbe Bugle en donde el gobierno panameño impuso unas elecciones fraudulentas para “elegir una autoridad” de su conveniencia polítiquera como máximo representante del Pueblo Ngäbe Bugle y de la Comarca violentando de esta manera nuestras estructuras de gobernanza tradicional de nuestros Pueblos y nuestras autoridades.

Por lo tanto, por la defensa de nuestros territorios ancestrales transfronterizos y de nuestra autodeterminación, nos oponemos y rechazamos rotundamente la elaboración y desarrollo de estos megaproyectos, porque violentan nuestros Derechos tanto consuetudinarios como los reconocidos en diversos instrumentos jurídicos nacionales e internacionales, especialmente los relacionados con nuestra historia, nuestra cultura, nuestros territorios y los recursos naturales de la Madre tierra. Por esta razón la Unión de Pueblos Originaros Transfronterizos UPOT, Bocas del Toro, Panama–Talamanca, Costa Rica, nos declaramos vigilantes y permanentemente en alerta por la defensa y por el cumplimiento de nuestra Declaratoria por la Madre Tierra.

Dado en la comunidad de Sieykin, Territorio Ancestral Naso, Provincia de Bocas del Toro, Republica de Panamá, a los veintinueve días del mes de octubre del dos mil diez.

Site: www.tjerdi.wordpress.com

«Esta tierra es vuestra, cuando la transformáis en dinero, perdéis la posibilidad de sobrevivir. La tierra es la vida». Chico Méndes.