Asturias, España.- La jornada festiva organizada por Hunosa con motivo de sus 50 años de vida reunió a 1.200 participantes, la mayoría familias que disfrutaron de una jornada de camaradería.
«Profundamente asturiana». Hunosa ha recuperado un antiguo eslogan de la empresa para recalcar su vinculación con el territorio ahora que acaba de cumplir cincuenta años de vida. Cientos de camisetas con ese lema se vieron ayer en Turón. La celebración del «Día de la familia minera» fue un éxito, con una participación incluso algo mayor de la prevista. Se esperaban mil personas y acudieron 1.200. La carrera de trail y, sobre todo, la marcha popular entre La Veguina y el pozo Santa Bárbara llenaron el valle de camisetas grises y bolsas verdes, la equipación «oficial» del evento. «Da gusto poder participar en una marcha minera todos unidos y con el mismo uniforme, pensé que eso ya no se llevaba», apuntó con sorna al inicio de la actividad el mierense José Manuel García, haciendo alusión a las diferentes camisetas que portaron los sindicatos durante las marcha a Madrid de 2012.
Unos corriendo, otros en bicicleta, en patines y la gran mayoría andando, con muchos padres tirando de carricoches. Sin prisa y charlando, cuando era posible, entre las sombras de los castañedos de Turón. La jornada festiva organizada ayer por Hunosa en colaboración con Valle de Turón Trail Running resultó multitudinaria. A las doce de la mañana el alcalde de Mieres, Aníbal Vázquez, y la presidente de Hunosa, María Teresa Mallada, cortaron la cita en el parque de La Veguina y cientos de personas se pusieron en marcha en dirección al pozo Santa Bárbara. Había que ir y volver por la senda verde, en total, unos cinco kilómetros.
El ambiente fue ciertamente familiar. El minero jubilado Secundino Alonso acudió acompañado de sus dos nietas pequeñas, Ainara y Yaira Rodríguez: «Cuando me retiré en el pozo Figaredo dije que no volvía a pasar por el cruce de Turón y ahora resulta que mi hija vive en el valle y tengo que venir cada dos por tres», señalaba con buen humor al inicio del trayecto, llevando de la mano a una de las pequeñas. La jornada le resultó entrañable: «Es una pena que ahora no hagamos más fuerza todos juntos para defender el territorio. Antes había más solidaridad», apuntó este lenense.
La jornada tuvo dos epicentros. Uno fue el parque de La Veguina, lugar de salida y llegada de los participantes. El otro fue el pozo Santa Bárbara, hasta donde llegaba la marcha y donde se colocó el punto de avituallamiento. Los interesados pudieron hacer una visita guiada por la vieja mina, declarada en 2009 Bien de Interés Cultural (BIC). La experta encargada de atender a los visites explicó detalladamente la historia de la explotación, que hace dos años fue parcialmente restaurada. La actuación se centró en los dos castilletes, la sala de compresores y el pozo de ventilación. La inversión alcanzó los 662.483 euros. Muchos de los presentes no necesitaban de indicaciones para familiarizarse con el lugar: «Mi padre trabajó aquí hasta que se jubiló. Recuerdo que subía todos los días en bicicleta desde Mieres hasta el inicio de la Veguina, donde los cogían en tren para acercarlos hasta aquí», explicó Aladino Gil, al pie del castillete principal del emblemático pozo turonés, clausurado en el año 1995.
Fuente:http://www.lne.es/cuencas/2017/05/29/turon-vuelve-marchar-mineria/2112195.html