Internacional

Tensión en localidad griega afectada por la minería

La tensión social por la explotación de una mina a cielo abierto en la pequeña localidad de Ierissos, en el norte del país, llegó esta madrugada a su punto álgido cuando, tras la detención de dos vecinos, fue asaltada la comisaría de policía.

Sobre las 03:00, hora local, grupos de uniformados derribaron las puertas y allanaron dos viviendas del pueblo en busca de sendos sospechosos de haber participado el pasado día 20 de febrero en un ataque a las instalaciones de la minera canadiense Eldorado Gold Corp.

Un grupo de ciudadanos se dirigió entonces hacia la estación el departamento de policía local para exigir su liberación, lo que generó momentos de tensión y daños menores en las instalaciones.

Los vecinos acusaron a los agentes de entrada ilegal en los domicilios y de hacer uso de una violencia extrema para proceder a los arrestos, en presencia de los familiares.

La policía aseguró contar con una orden judicial y justificó el uso de la fuerza ante la negativa de los residentes a dejarlos entrar, sin embargo el abogado defensor de las dos personas detenidas aseguró que estaba programada una reunión entre estos y el fiscal, por lo que el arresto no tenía ninguna razón.

A su vez, el ministro de Orden Público, Nikos Dendias, explicó en el canal televisivo Mega que la operación se llevó a cabo de madrugada con el fin de evitar conflictos con otros ciudadanos en Ierissos y mostró su sorpresa ante la respuesta de la población local.

Desde hace más de 20 años los vecinos de la región de Calcídica se encuentran movilizados contra las compañías mineras que pretenden destruir bosques y montañas en busca de oro, pues causarán daños ecológicos incalculables, contaminarán tierras y acuíferos y acabarán con la agricultura y el turismo en la zona.

El pasado 20 de febrero se produjo un importante ataque incendiario contra la maquinaria pesada de la explotación minera, días después la policía provocó graves disturbios frente a la escuela de la localidad al tratar de dispersar a los manifestantes con gases lacrimógenos, pero dejando a numerosos niños afectados y uno de ellos con una lesión en la cabeza.