Paraguay sigue enfrentando las consecuencias del Golpe de Estado que sacó del poder a Fernando Lugo. Sin respuesta del entonces gobierno golpista de Federico Franco, la población se manifiesta mañana (23) nuevamente. Esta vez el motivo es la instalación de la multinacional canadiense Río Tinto Alcán que, según los movimientos organizados, pretende pagar un precio muy inferior al que está establecido en el mercado internacional por la energía producida por las usinas de Itaipú y Yacyretá.