Durante el gobierno de Salvador Allende, se promulgó la ley Nª 17.450, en de julio de 1971, por la que se nacionalizaron las compañías mineras, Anaconda y Kennecott, que dieron origen a la compañía minera de propiedad del estado chileno.
Chile, con el 35% de la producción mundial del cobre, es el primer productor mundial del metal. El país tiene, además, un 30% de las reservas mundiales de cobre.
El cobre es un recurso no renovable, de allí la importancia de aprovechar su desarrollo para generar otras fuentes de riqueza que sobrevivan al agotamiento del recurso minero. La minería tiene además importantes externalidades negativas, como contaminación y agotamientos de las aguas, un asunto vital en zonas desérticas con escasez permanente de agua.
La minera estatal CODELCO ha cumplido un papel central en el crecimiento de la economía, y en el desarrollo de Chile. El principal aporte de la empresa ha sido como fuente de divisas provenientes de la exportación, y su contribución a los ingresos del estado. En los últimos treinta años el aporte de la empresa minera al fisco chileno como porcentaje de la recaudación tributaria total, en promedio ha sido del 13.5%. «El principal aporte directo del cobre al desarrollo ha sido como fuente de divisas provenientes de la exportación junto a su aporte a los ingresos del Estado.”