16 Febrero 2011
Panamá.- La máxima dirigencia de la etnia Ngöbe-Buglé anunció la suspensión de las masivas protestas y cierres de carreteras para exigir la derogación de un nuevo código minero tras los conatos de violencia del martes.
«Las protestas quedan suspendidas hasta segunda orden», informó a Notimex el cacique general de la comarca Ngöbe, Rogelio Moreno, al señalar que la decisión se adoptó debido a que en las acciones del martes hubo «infiltrados» quienes pretendían el caos.
El momento más álgido de las protestas generalizadas ocurrió cuando manifestantes en San Félix, 380 kilómetros al oeste de la capital panameña, agredieron al viceministro de Trabajo, Luis Ernesto Carles, cuando intentaba entablar un diálogo con los indígenas.
Moreno ofreció sus disculpas a Carles y al gobierno y afirmó que dentro del ánimo de los indígenas está descartada la violencia por lo cual se decidió detener las protestas y esperar a eventuales negociaciones.
«Podemos lograr la derogación del código minero pero sin violencia, yo no puedo permitir la violencia como cacique», indicó el dirigente indígena al identificar como miembros de partidos políticos a los instigadores del martes.
Aunque Moreno anunció el cese de las manifestaciones, desde temprano, un centenar de indígenas cerró la carretera Panamericana, en el sector de Pacora, a unos 50 kilómetros al oeste de la capital panameña en rechazo al código minero.
El líder indígena indicó que se comunicaría con los organizadores de la protesta en Pacora para informarles de la decisión de la dirigencia Ngöbe de suspender las manifestaciones en las calles.
Moreno reiteró la demanda de derogación del código minero promulgado el pasado viernes por el presidente Ricardo Martinelli para permitir las inversiones incluso de gobiernos extranjeros en la industria de la minería en Panamá.
En un intento por frenar las protestas, el gobierno ofreció el domingo que durante el resto de la administración de Martinelli, hasta el 30 de junio de 2014, no se impulsará ni explotará Cerro Colorado, ubicado dentro de la comarca Ngöbe en el occidente de Panamá.
Por Cerro Colorado, la segunda reserva mundial de cobre con un estimado de 12 millones de toneladas de ese metal, ha mostrado interés el gobierno de Corea del Sur.
De hecho, Martinelli llamó el lunes a su colega surcoreano Lee Myung-Bak para informarle sobre la aprobación del código.
El mandatario surcoreano sugirió al presidente panameño el año pasado modificar la ley minera para posibilitar la inversión de gobiernos extranjeros.
Moreno consideró «un paso importante» que el gobierno haya externado su compromiso de no explotar Cerro Colorado aunque dijo que para ello las autoridades deberían plasmarlo en un decreto ejecutivo.
El viceministro de Comercio, Ricardo Quijano, reiteró el miércoles la negativa del gobierno a derogar la ley minera y advirtió que «hay grupos que quieren sembrar el caos pero no lo vamos a permitir».