23. Agosto 2010
“El proceso de salinización de las aguas de río y suelos, fundamentalmente en la cuenca de Desaguadero, se debe a la actividad humana asociadas a la actividad minera”, aseguró la coordinadora Departamental de la Liga de Defensa del Medio Ambiente (Lidema) en Oruro, Norma Mollo.
El río que desemboca directamente en el lago Poopó, presenta según la institución medioambientalista, problemas naturales en el aspecto climático por alta “evapotranspiración y baja precipitación pluvial, con falta de humedad, sumándose la escasez de lluvia y el carácter de la cuenca, que no tiene salida”.
La organización, ligada al Centro de Ecología de Pueblos Andinos (CEPA), mencionó que estos problemas están relacionados a la actividad de la Empresa Minera Inti Raymi S.A. (Emirsa). Sin embargo, estas denuncias deberán esperar el resultado que emita la auditoría ambiental por la Empresa PCA, que determinará el estado de la zona y si existió contaminación ligada a la actividad minera.
Emirsa, desarrolló sus operaciones mineras desde 1982 para extraer oro y plata de los yacimientos de “Kori Kollo”, cerro de Llallagua, en la región de Chuquiña, provincia Saucarí, menciona Lidema.
Asimismo, desde 2005 Emirsa inició otra operación minera en la cuenca del Desaguadero con el proyecto “Kori Chaka”, ubicado a 1.5 kilómetros al oeste de la ciudad de Oruro.
Los comunarios aledaños a la zona, denunciaron malformaciones en las crías de sus ganados, según ellos, por la actividad minera, no obstante, en varias explicaciones se aludió el problema a la existencia de la planta el kellu kellu, nociva a la alimentación los animales y problemas genéticos.
En el caso de Kori Chaka, Mollo recordó actividades mineras recientes, las que no deben estar cercanas al radio urbano, además de estar cerca al río Desaguadero. Finalmente la activista apuntó que “existen varias minas que descargan sus aguas directamente al lago Uru Uru, contaminando el agua y llenando el lago con sedimentos”.