Con la victoria de Enrique Iglesias los pobladores del municipio temen que se abra las puertas a JDC Minerals.
La empresa JDC Minerals podría regresar a Zautla para explotar la mina La Lupe, al cambiar las autoridades municipales en febrero del próximo año, a pesar del rechazo de la población hacia este proyecto, plantearon representantes de la comunidad.
Si bien el actual presidente municipal, Víctor Manuel Iglesias Parra, también se opone a la explotación de esta mina, abierta en la comunidad de Tlamanca, la postura del ayuntamiento podría cambiar con la entrada del edil electo, Enrique Iglesias, lamentó Marco Antonio Alejo Calderón, habitante de Zautla.
Recordó que durante el proceso electoral tuvieron una reunión con todos los candidatos a la presidencia municipal y éstos firmaron una carta donde se comprometieron a no dar permisos a la minera china para la explotación de La Lupe.
Sin embargo, con la victoria de Iglesias, quien compitió como abanderado de la coalición Puebla Unida, los pobladores del municipio temen que se abra las puertas a JDC Minerals.
“Es el temor que se tiene porque, al final de cuentas, el gobernador metió mucho las manos y pues al final de cuentas él está a favor de estos intereses”, denunció Alejo Calderón.
Recordó que en noviembre del año pasado los habitantes de Zautla, acompañados por representantes de organizaciones de la Sierra Norte de Puebla que rechazan los proyectos mineros, realizaron una manifestación en la zona de La Lupe, y se le ordenó a los representantes de la transnacional china que abandonaran el lugar.
Si bien los trabajadores dejaron el municipio en esa fecha, la empresa inició las gestiones para obtener el Manifiesto de Impacto Ambiental por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
Fue a mediados de junio de este año cuando la dependencia federal aprobó los permisos ambientales para este proyecto, por lo que sólo falta que el ayuntamiento de Zautla entregue la licencia de uso de suelo, puntualizó Alejo Calderón.
Con la autorización del MIA a la empresa china, la federación desconoció el acuerdo al que llegaron los habitantes del pueblo en contra de la explotación minera y se dio el primer paso para reabrir la mina, lamentó el poblador.