La transnacional minera canadiense Gold Reserve anunció en los pasados días la firma de un acuerdo con el gobierno de Venezuela para conformar una empresa mixta aurífera en la zona denominada Arco Minero del Orinoco, según reseña la agencia Reuters.
La firma dijo además que, como parte de la negociación, el gobierno del Presidente Nicolás Maduro se comprometió a pagarles 759 millones de dólares como indemnización por la nacionalización de sus operaciones hecha por el Presidente Hugo Chávez en 2009.
Venezuela adelantó en febrero que habían alcanzado un acuerdo para buscar solución a la disputa tras la nacionalización iniciada por Chávez en 2009, pero quedaba la duda sobre si el monto del arbitraje sería cancelado.
La empresa minera, cuyas acciones se cotizan en la bolsa de Toronto dijo a través de un comunicado que el pago procedente de Venezuela se realizará en dos partes, la primera de 600 millones de dólares para el 31 de octubre de 2016, o antes; y el restante antes de fin de año.
“El pago será realizado con el financiamiento que obtendrá Venezuela para este fin”, dijo la firma a través de un comunicado.
Adicionalmente Venezuela acordó adquirir “data minera” de la empresa por unos 240 millones.
La empresa mixta será un 55 por ciento propiedad del Estado venezolano y el resto de una subsidiaria de la canadiense. La asociación desarrollará el proyecto de las ingentes minas de oro Brisas Las Cristinas, con unas 30 millones de onzas estimadas de reservas.
Según el comunicado, las ganancias se repartirán en un 55% para Venezuela y 45% para Gold Reserve, en el caso de ventas hasta 1600 dólares por onza, y 70% para Venezuela y 30% para Gold Reserve, en el caso de ventas por más de 1600 dólares por onza.
Nelson Merentes, presidente del Banco Central de Venezuela, organismo estrechamente involucrado en el proyecto, dijo a Reuters en febrero que estaban los socios buscando levantar unos 2.000 millones de dólares en financiamiento para la explotación. Gold Reserve dijo el lunes que aún no se ha logrado capitalizar el proyecto.
“Venezuela y la compañía trabajarán juntas para completar el financiamiento contemplado en unos 2.100 millones de dólares de capital anticipado para el proyecto Brisas Cristinas”, afirmó.
El gobierno venezolano concretó la firma de una serie contratos por el orden de los 4.500 millones de dólares, para fortalecer el “Motor Minero”, que contempla la explotación de 111.800 kilómetros cuadrados, a través de la creación de convenios mixtos con el sector privado nacional y extranjero.
“La nueva política de desarrollo minero es profundamente soberana, ecologista y con una visión de desarrollo integral”, dijo al tiempo que agradeció a los inversionistas nacionales e internacionales que se han sumado al plan de desarrollo del Arco Minero, por continuar creyendo y apostando al país.
El Arco Minero del Orinoco ha venido siendo objetado por numerosos venezolanos ambientalistas y conocedores del área que podría verse afectada; así mismo denuncian que el referido proyecto minero va en contra de la orientación original del comandante Hugo Chávez y contra los derechos ambientales, indígenas y soberanos; cuando en el escenario lo que se muestra es la intención pro-capitalista, no “antiimperialista” y de “transición al socialismo”.
1.386 millones de dólares para Crystallex
En abril de este año, un tribunal arbitral falló a favor de Crystallex, la otra empresa canadiense que operaba en Las Cristinas, afectada por la nacionalización ordenada por Chávez. El fallo ordena a Venezuela a indemnizar a Crystallex con 1.386 millones. Crystallex se declaró en bancarrota este año y espera el pago de Venezuela para reembolsar a sus acreedores.