La reanudación de la búsqueda de uranio y otros minerales en la zona del Bajo Santa Rosa, entre Valcheta y Lamarque, provocó críticas de legisladores de la oposición y aclaraciones de las autoridades del Ejecutivo provincial.
Entre 2010 y 2013 la Minera Cielo Azul (integrante del Grosso Group Management) desarrolló actividades de prospección en esa área y encontró yacimientos de uranio, vanadio, litio e iridio. La exploración se realizó entre los departamentos rionegrinos de Avellaneda y Valcheta, de muy baja densidad poblacional.
Estos minerales son empleados en la producción de energía nuclear y en materiales para uso medicinal y de la industria electrónica. como conductores de electricidad.
El emprendimiento surgió con el convenio firmado en 2009 por el gobierno rionegrino –en tiempos del radical Miguel Saiz– y la empresa canadiense para desarrollar iniciativas conjuntas para investigar el subsuelo.
El interés está puesto en el denominado Bajo Santa Rosa, en la zona norte del departamento Valcheta, y en inmediaciones de la salina de El Gualicho.
El secretario de Minería de Río Negro, Juan Pablo Espínola, confirmó que desde el año pasado Cielo Azul explora en una extensión de unos 20 kilómetros, mediante perforaciones de unos 10 centímetros de diámetro y entre 40 y 50 metros de profundidad.
Se calculan las inversiones por unos 500 mil dólares. Espínola sostuvo que la firma tiene sus derechos mineros correspondientes y realizaron el estudio de impacto ambiental.
Las tareas se llevan a cabo en tierras fiscales, en lotes privados y también en espacios del Estado pero con ocupantes. Destacó que la utilización de maquinaria de oruga provoca menores daños en la superficie y negó que los trabajos se realicen en el Área Natural Protegida, Bajo Santa Rosa.
Por su parte, el legislador del Frente para la Victoria, Mario Sabbatella, exigió explicaciones al Poder Ejecutivo, a la Secretaria de Ambiente y a la secretaría de Energía, por el movimiento de maquinarias pesadas y de gran porte relacionadas a la búsqueda de uranio, en el los bajos Santa Rosa y Trapalcó.
Se hizo eco del malestar de vecinos de Lamarque quienes han denunciado “actitudes sospechosas, presencia de equipos pesados de minería y de gran porte, que estarían realizando tareas de minería no declarada, vinculadas a la existencia de uranio”.
Sabbatella resaltó que “el área en cuestión se caracteriza por su enorme potencial paleontológico, comprendiendo también el salitral de Santa Rosa y las salinas de Trapalcó”.
En ese lugar se hallan expuestas rocas y sedimentos del cretácico con restos de dinosaurios y otros vertebrados y restos de reptiles marinos.
Entre los restos se destacan los huevos fósiles, considerados entre los más importantes de Sudamérica”.