Codelco destinará US$ 5.400 millones para dar continuidad a la explotación de su segundo mayor proyecto.
Los mayores costos de la mano de obra y de los insumos, junto a ajustes de diseño, hicieron que Codelco incrementará en US$ 1.000 millones la inversión en su segundo mayor proyecto estructural: Radomiro Tomic Sulfuros.
La iniciativa, ubicada en la Región de Antofagasta, involucraba recursos por US$ 4.400 millones, según el último plan de inversiones de la estatal, divulgado en marzo. Sin embargo, la empresa informó ayer que el proyecto fue ingresado al Sistema de Evaluación Ambiental y que le destinará US$ 5.400 millones.
Esta última cifra sólo es superada por la contemplada para Andina 244, por US$ 6.772 millones.
“El alza del costo respecto de lo estimado en la ingeniería de prefactibilidad se explica por el ajuste en el diseño de algunas instalaciones relevantes, como el sistema de desalación e impulsión de agua de mar, y el de depositación de relaves”, explicó el gerente del proyecto, José Miguel Ortiz.
Agregó que otros de los factores que lo encarecieron tuvieron que ver con el aumento, en más de 30%, de los costos de mano de obra directa de construcción, respecto de lo estimado en la prefactibilidad, y por el incremento en el costo de otros insumos como hormigones, mano de obra especializada y “algunos equipos relevantes”.
Respecto a los US$ 88 millones que se planeaban invertir este año en Radomiro Tomic, Ortiz especificó que esa cifra se mantendrá. Sin embargo, no descartó que el monto total pueda variar en el futuro.
“Dado que se trata de un proyecto complejo, cuya construcción toma varios años, los montos pueden experimentar cambios (alzas o rebajas) dependiendo de las condiciones de mercado”, dijo.
A través del proyecto Radomiro Tomic Sulfuros, Codelco busca dar continuidad al rajo abierto de esa división, cuya producción de óxidos decaerá a partir del 2018.
“Radomiro Tomic es actualmente unas de las divisiones más productivas de Codelco. Sin embargo, los óxidos que explota comenzarán a agotarse a partir de 2018, lo que ha motivado la búsqueda de nuevas fuentes del mineral”, señaló el vicepresidente de Administración y Finanzas y presidente Ejecutivo (S) de la estatal, Iván Arriagada.
Se espera que la iniciativa aporte US$ 2.500 millones al Estado en sus primeros cinco años de vida útil y que alcance una producción anual de 350 mil toneladas de cobre fino.
El proyecto considera la construcción de una planta desaladora, que requerirá US$ 1.500 millones de inversión.