Miércoles 22 de Diciembre
La procuraduría colombiana pidió hoy al Gobierno del presidente Juan Manuel Santos que no permita la puesta en marcha de un proyecto a cielo abierto de la minera canadiense Greystar Resources Ltd. en el páramo nororiental de Santurbán.
El proyecto es inviable por estar situado en un área de páramo, notificó el procurador general, Alejandro Ordóñez, a la ministra de Ambiente, Vivienda y Desarrollo Territorial, Beatriz Uribe.
Ordóñez advirtió en un mensaje escrito a la ministra que las áreas de páramo «deben ser excluidas de la minería», como lo ordenan las normas legales.
La multinacional canadiense sólo tiene pendiente la entrega de la licencia ambiental por parte del Ejecutivo para poner en marcha el Proyecto Minero de Angostura, que comprende un territorio montañoso de California y Vetas, localidades del departamento de Santander.
Los yacimientos están en cerca de 1.000 de un total de 30.000 hectáreas cuyos derechos han sido adquiridos por la minera desde 1995.
Sus estudios le permitieron calcular que allí hay «recursos de 11,5 millones de onzas de oro medidas e indicadas y 3,5 millones de onzas de oro inferidas, 61 millones de onzas de plata medidas e indicadas y 18 millones de onzas de plata inferidas».
El proyecto es alistado desde Bucaramanga, la capital de Santander y centro de un área metropolitana cuyo acueducto se alimenta de las fuentes de agua que nacen en Santurbán, lo que dio origen a un movimiento ambientalista de rechazo a la eventual explotación.
Es el Comité de Defensa del Agua y el Páramo de Santurbán, que ha recogido opiniones como la del experto Germán Augusto Figueroa, antiguo gerente del Acueducto Metropolitano de Bucaramanga y para quien «el proyecto representa una amenaza real para las fuentes de abastecimiento de la ciudad».
Según él, Angostura tendrá «efectos negativos sobre la cantidad y la calidad del agua de las quebradas y complejos lagunares que surten la cuenca del río Vetas, afluente del río Suratá, responsable entre el 17 por ciento y el 50 por ciento del abastecimiento del agua potable para más de un millón de habitantes de Bucaramanga, Floridablanca y Girón, sobre todo en periodos secos».
El Concejo de Girón también se unió a esta campaña y rechazó la iniciativa minera con argumentos como el de una norma legal que establece que «en la utilización de los recursos hídricos, el consumo humano tendrá prioridad sobre cualquier otro uso».
En su mensaje a la ministra de Ambiente, el procurador le pidió «estudiar la posibilidad de no otorgar la licencia ambiental al Proyecto Minero de Angosturas».