Durante el gobierno de Salvador Allende, se promulgó la ley Nª 17.450, en de julio de 1971, por la que se nacionalizaron las compañías mineras, Anaconda y Kennecott, que dieron origen a la compañía minera de propiedad del estado chileno.
Chile, con el 35% de la producción mundial del cobre, es el primer productor mundial del metal. El país tiene, además, un 30% de las reservas mundiales de cobre.
El cobre es un recurso no renovable, de allí la importancia de aprovechar su desarrollo para generar otras fuentes de riqueza que sobrevivan al agotamiento del recurso minero. La minería tiene además importantes externalidades negativas, como contaminación y agotamientos de las aguas, un asunto vital en zonas desérticas con escasez permanente de agua.
La minera estatal CODELCO ha cumplido un papel central en el crecimiento de la economía, y en el desarrollo de Chile. El principal aporte de la empresa ha sido como fuente de divisas provenientes de la exportación, y su contribución a los ingresos del estado. En los últimos treinta años el aporte de la empresa minera al fisco chileno como porcentaje de la recaudación tributaria total, en promedio ha sido del 13.5%. «El principal aporte directo del cobre al desarrollo ha sido como fuente de divisas provenientes de la exportación junto a su aporte a los ingresos del Estado.”
En la edición del Diario Financiero del 2 de enero de 2012, apareció una entrevista al director y socio de LarrainVial AGF, queda claro que los empresarios de la bolsa ven un gran negocio en la privatización aunque sea parcial de CODELCO, la mayor empresa productora de cobre del mundo.
«Para este año, el director de inversiones y socio de LarrainVial AGF, José Manuel Silva, estima que restarían pocas grandes aperturas que hacer y asegura que «la única gran apertura en bolsa que queda en Chile es la de Codelco, que es obvio que hay que hacerla”.
«Tal apertura, señala, no significaría que el Estado deje de controlar la compañía minera, «porque el Estado podría vender, por ejemplo, el 15% o 20% con algo de aumentos de capital y les generaría un gran atractivo a la bolsa chilena al poner una gran cuprífera en el mercado, que hoy están siendo bien demandadas a nivel mundial”.
La privatización de CODELCO es la tarea pendiente para los grandes empresarios y los políticos neoliberales a su servicio, la tarea que la dictadura no fue capaz de llevar adelante. Finalmente, el gran empresariado está consiguiendo lo que han ido preparando poco a poco, con la táctica del salchichón – trozo a trozo – para vencer las resistencias a la privatización de la mayor y más rentable empresa del estado chileno. El camino ha sido pavimentado con los joint ventures, en la explotación de El Abra, cuya propiead tiene una relación de 51% y 49% entre Freeport-MaMoran Cooper & Gold y CODELCO, de otros proyectos en asociación con la japonesa Mitsui, y con las reformas al gobierno corporativo de la minera que prepararon el camino para la salida a la bolsa. Además ya vendieron Edelnor, y la mina Inca de Oro.
Los medios de comunicación informaron hoy que Codelco se prepara para entrar a la bolsa en Londres y Santiago, mediante la creación de una sociedad: «Coldelco International”,en otras palabras inversores privados entrarán a compartir negocios de CODELCO, se trata de un nuevo salto en el camino de la privatización por partes, sin necesidad de discutir y votar una ley en el Congreso Nacional para la cual no hay ni opinión pública dispuesta, ni los votos dispuestos a pagar los costos políticos.
Los medios de comunicación informaron la noticia: «Por estos días en Codelco se encuentran afinando los últimos detalles de la propuesta que podría marcar un hito tanto en la historia de estatal, como de la bolsa local. Esto porque a pocas semanas de que sea presentada al directorio de la cuprera la iniciativa para crear Codelco International, ya se han delineado algunos de los planes que se tienen para esta sociedad: funcionará como plataforma de inversiones para negocios en el plano internacional, y se le sumarían las actividades no relacionadas a yacimientos ‘tradicionales’ y aquellas en las que la entidad no es controladora, como por ejemplo, Anglo American Sur (AAS) y El Abra, entre otras.
Además, la idea es que se transe en Londres y Santiago, aumentando así la exposición de la minería en la bolsa local. No se descarta que se incorpore un socio antes de su eventual apertura”(1).
Codelco actualmente produce solamente un tercio de la producción de cobre que se extrae en el país. Esto es el resultado del proceso de privatización por la vía del ingreso de otras grandes empresas multinacionales a la explotación de yacimientos. Estas inversiones en la extracción de minerales que han provocado la enajenación del grueso de la explotación cuprifera se realizaron en los sucesivos gobiernos de la Concertación(2). Las multinacionales que hasta la implementación de un modesto Impuesto Específico a la Minería, royalty, casi no pagaron impuestos, mientras CODELCO cargaba con la mochila del 10% reservado de las ventas para las Fuerzas Armadas.
En palabras de Marcela Ramos, en Reportajes de investigación de Ciper, el Royalty en realidad encubre un verdadero regalo del estado chileno a las multinacionales privadas.
«Una empresa exitosa, según los expertos, obtiene utilidades antes de impuestos que bordean el 20%. En Chile, las mineras han obtenido utilidades en los últimos años que se empinan por sobre el 50%. En 2010, sumaron US$14.300 millones y en el primer trimestre de 2011 ya registran un alza de 64,7%. En ese cuadro se plantea que el royalty para las empresas del rubro no sólo les garantiza invariabilidad: es un regalo y puede ser cuantificado. Las empresas del rubro no hicieron sus estudios de inversión con un alto precio del cobre, una ganancia millonaria que cada día se escapa frente a nuestros ojos”(3).
Vistas así las cosas, CODELCO, es un plato demasiado apetitoso para los grandes capitalistas del mundo que buscan desesperadamente nichos rentables en los cuales invertir y especular en bolsa.
Notas:
[1] Estrategia. 12 de noviembre de 2012.
[2] Paradojas de la historia, el mismo Partido Socialista que impulsó la nacionalización del cobre bajo el gobierno de Salvador Allende, fue fundamental en los gobiernos que deseosos de recibir inversión extranjera, permitieron la enajenación de la principal fuente de divisas del país.
[3] Ciper. 20 de julio de 2011. «Royalty: Los millones de dólares que Chile regala a las empresas mineras”.