Escribe el biólogo Gabriel Russo para brindar información sobre el proceso que se utiliza en la megaminiería de oro y plata a cielo abierto, y los efectos del cianuro y el mercurio en el medio ambiente, las plantas, los animales, las personas…
¿Qué es la Minería a cielo abierto y para qué se utilizan el cianuro y el mercurio?
En los pasados días, debido a la derogación de la ley que prohíbe la utilización de cianuro y mercurio en la minería se han suscitado un sinfín de opiniones y especulaciones sobre este asunto. En todas las opiniones hay una coincidencia: no queremos la utilización del cianuro (aunque el mercurio también está dentro de esta ley y es igualmente peligroso). Lo que también surgió como reclamo de gran cantidad de lectores es querer saber, entender o incrementar sus conocimientos de cómo se utiliza el cianuro y el mercurio y qué riesgos conlleva esto para la salud. Debido a que he trabajado en el área de metales y biorremediación (recuperación de ambientes naturales o alterados utilizando organismos vivos), me parece importante aportar un poco de mi conocimiento.
¿Qué es la minería a cielo abierto?
Existen 2 tipos de minería: la minería subterránea y la minería a cielo abierto. La diferencia entre ambas radica en que la minería a cielo abierto se caracteriza por una fuerte modificación del relieve. Existe un sinfín de fotografías de este fenómeno, en el cual se ven inmensas canteras de tipo circular y excavadas en “plateas”. La minería subterránea, al contrario, se caracteriza por uno o varios puntos de ingreso a galerías subterráneas. Sus ingresos también son más que conocidos.
La segunda diferencia entre estas minerías es de dónde proviene el material de interés para hacer este proceso. En las minas subterráneas el material de interés suele estar incluido en las rocas y se lo encuentra como “vetas” en el caso de metales o como reservorios en el caso de líquidos como el petróleo. En la minería a cielo abierto el mineral de interés está incluido en las rocas de la región y diseminado en toda la superficie. No existe un lugar de mayor acumulación, por lo que el objetivo serán las rocas. Y es en este punto donde está la trampa de todo este asunto. En una veta el mineral está en “alta concentración” y requiere poco esfuerzo para separarlo. Pero en las rocas y piedras esto es muy distinto. El proceso de extracción es más laborioso y, en muchas ocasiones, más costoso.
¿Para qué se utilizan el cianuro (CN) y el mercurio (Hg) en la minería?
Estos dos compuestos se utilizan para poder “arrancar” los metales preciosos de la roca en la que están incluídos. Solo se utiliza este proceso si la concentración del metal es baja. Con ambos métodos (tanto el cianuro como el mercurio) se extrae comúnmente oro y plata. Ahora les explicaré como trabajan ambos procesos: El cianuro se utiliza como cianuro de sodio (NaCN). Al separarse del sodio en presencia de agua el cianuro puede formar sales con otros minerales. En el caso del oro, el cianuro reacciona rápidamente formando cianuro de oro. Si hubiese plata el cianuro también reacciona formando cianuro de plata. La técnica de cianuro depende del contacto del compuesto con el mineral, por lo que se debe moler previamente la roca a ser tratada. El tratamiento con cianuro requiere tiempo, por lo que las empresas mineras arman túmulos fuera de las minas y agregan la solución de cianuro. Estos túmulos deberían estar aislados del suelo con geomembranas, las cuales varían en su calidad pero su fin es prevenir que el agua con cianuro pase a la tierra.
La mayor parte del cianuro se une al oro o el metal de interés, pero una parte queda unida a otros minerales que no son de interés, los cuales son desechados en el mismo túmulo. Para separar el oro del cianuro se utiliza ácido fuerte como sulfúrico o nítrico. Este último genera gases corrosivos y tóxicos como el óxido nítrico (NO) y óxido nitroso (N2O), causantes de lluvias ácidas. En el caso del mercurio el método es más sencillo. El mercurio se amalgama (se une metálicamente) con el oro naturalmente, formando un “oro blanco”. Para que el oro se amalgame con el mercurio el contacto debe ser íntimo, por lo que las rocas se muelen previamente. Una vez unido al mercurio, el oro blanco se separa por tamizado. Finalmente el oro blanco se calienta y el mercurio se vaporiza. Si el contenedor de mercurio no es cerrado el gas mercurio es liberado al aire. Por cada kg de oro se liberan 2 kg de mercurio. Por último es importante destacar que otro factor fundamental es el agua. No es necesario que el agua que se utiliza sea potable, pero sí que se encuentre con la menor cantidad posible de iones.
Las grandes mineras suelen realizar un proceso de deionización, el cual también se produce naturalmente en la congelación del agua.
¿Qué riesgos ambientales y de salud posee?
A estas alturas los riesgos ambientales parecen bastante claros. El cianuro puede ingresar a la tierra y luego percollarse hasta las napas de agua. Esto implicaría una contaminación. En la naturaleza existe una gran variedad de microorganismos capaces de separar el cianuro de otros minerales, haciendo que este compuesto quede disponible. Una vez que el cianuro llega a las plantas comienza el lento proceso de la biomagnificación. Esto quiere decir que un animal herbívoro que come gran cantidad de plantas con baja dosis de cianuro acumulará el mismo. El que coma ese animal, comerá también lo que él ha acumulado. El gas de mercurio es muy particular.
En primer instancia es un inhibidor neuronal, por lo tal neurotóxico. Para lograr este efecto la exposición debe ser muy elevada y solamente una persona que trabaje con esto puede sufrir las consecuencias (si no está propiamente equipado con las medidas de seguridad necesarias). Una vez en la atmósfera el mercurio tenderá a depositarse. Caerá con la lluvia, lo cual implica que se dispersará ampliamente desde su punto de emisión. Las concentraciones elevadas tanto de mercurio como de cianuro en el agua son tóxicas para la salud del ambiente.
El mercurio posee una segunda opción cuando ingresa a los cuerpos de agua. Algunos microorganismos son capaces de metilar el mercurio y transformarlo en metilmercurio. El metilmercurio es famoso por haber matado a más de 1700 personas en la bahía de Minamata (Japón). Los microorganismos responsables de metilar el mercurio se encuentran presentes en los cuerpos de agua de la región.
Por último, pero no menos importante, es la utilización de agua. Las cantidades necesarias de agua para aplicar el procedimiento de recuperación con cianuro son elevadas. Pero aunque no lo fueran, el agua residual debe ser tratada, de lo contrario poseerá cianuro en concentraciones tóxicas para su consumo o utilización.
A todo esto solo queda analizar un aspecto. De utilizarse alguna de estas técnicas, los controles deberían ser más que estrictos (lo que implica un gran gasto para la industria). Sería interesante analizar cuáles son las normativas vigentes, quiénes son los entes reguladores y cómo planean proceder.
Lic. Gabriel Russo
. Biólogo