Fuentes de agua en medio del proyecto y concesiones de más encontró la Contraloría en el Panantza-San Carlos. El proyecto minero Panantza-San Carlos, ubicado en Morona Santiago, también presentó una serie de irregularidades, según una auditoría de la Contraloría General, realizada de enero de 2005 a abril de 2011.
Una de ellas es el exceso de concesiones. Según el Mandato Minero 6, cuando se haya otorgado a una persona natural o jurídica más de tres concesiones, las sobrantes deben extinguirse sin compensación económica alguna. Al 16 de marzo de 2010, Explorcobres S.A., encargada de Panantza-San Carlos, tenía 13 áreas mineras a su haber.
Ante la notificación de este particular al entonces Ministerio de Minas y Petróleos, la respuesta fue que en la Ley Minera vigente a ese año no había restricciones, más que en el artículo 39, pero no aplicaba, pues la zona aún no estaba en explotación.
Aunque algunas de las concesiones fueron suspendidas por fuerza mayor, ninguna fue extinguida, como dispone la normativa, por lo que la Contraloría recomendó, con implícito carácter vinculante, que se proceda con los actos administrativos correspondientes para cumplir con la norma.
Fuentes de agua atravesando el proyecto
Además de que en el área de influencia de las concesiones de Explorcobres se ubica la población de la nacionalidad Shuar, se ubican 414 fuentes y yacimientos de agua, situación que también motiva la extinción de las concesiones sin compensaciones, según el Mandato.
Igual que pasó con el proyecto Mirador, el Ministerio de Minas y Petróleos respondió que no se podía aplicar el Mandato porque no existía una afectación demostrada, pese a que la normativa pretende evitar daños a los recursos hídricos.
Otra justificación fue que, luego de la emisión del Mandato, no se dieron directrices para la aplicación de su articulado, pero se revirtieron concesiones al Estado, sobre la base de los memorandos, emitidos por las autoridades de Minas y Petróleos.
Observaciones a la auditoría ambiental
El 19 de enero de 2011, la Dirección Nacional de Prevención de Contaminación Ambiental informó a Explorcobres que para la calificación de la auditoría ambiental de cumplimiento del proyecto se determinó que faltaban de cubrir varios aspectos, como detallar los mecanismos de tratamiento de aguas negras y grises, adjuntar el registro del número de muestras y calidad del agua, incluir el listado de flora y de fauna existentes, entre otros. Pese a la falta de documentos, el 18 de febrero se aprobó la auditoría. Este caso muestra una nueva inobservancia a la Ley Minera, pues no se verificó que se cumplan los programas de manejo ambiental.