06 de Mayo 2011
Un derrumbe, en una mina de Jalisco, dejó tres mineros atrapados a una profundidad de 5 metros. Hasta el cierre de esta edición se reportaba un trabajador muerto.
Las brigadas de rescate refuerzan la estructura del pozo carbonífero siniestrado el martes pasado, a fin de continuar la búsqueda durante la noche y madrugada, cuando esperan encontrar a las ocho personas que continúan atrapadas en el interior.
El secretario federal del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, informó que las condiciones en la mina ubicada en esta localidad permiten avanzar con rapidez hacia donde se presume permanecen ocho víctimas.
Subrayó que el túnel entre los pozos uno y tres mide unos 40 metros y que no ha sido necesario sacar de las instalaciones el material que se remueve, lo que facilita el trabajo de los expertos.
Piden acudan dueños
“Que venga el dueño el viernes a las tres de la tarde y que nos entregue la paga de nuestra gente, ellos están trabajando y debe responder”, gritaba Yesenia Robledo, hermana de Rogelio.
La mujer comentó que su hermano, a quien considera como “el mejor minero de la región”, laboraba desde hace 15 años en los pozos. Yesenia expresaba a Javier Lozano, que “los hijos de los mineros van a pedir de comer viernes y sábado, pero no estarán sus padres para llevar el dinero a casa”.
Operativo de salud
El gobernador de Coahuila, Jorge Torres, indicó que mantiene el operativo que permitirá resguardar a las personas y evitar la aparición de enfermedades infecciosas. Refirió que en el sitio se vigiló la calidad del agua; el control de vectores, vacunación, y la atención médica y psicológica.
8 personas continúan desaparecidas por el siniesto en el pocito de la mina.
6 cuerpos han sido recobrados; se cree que todos han muerto.
80 pesos la tonelada de carbón pagaba la empresa Binsa.