Foto: CooperAcción
19/07/2020
Como parte de las estrategias de fortalecimiento de la economía comunal en tiempos de COVID-19 y de autonomía económica para el empoderamiento de las mujeres del Sur Andino, el pasado lunes la Asociación de Mujeres Emprendedoras Pachamama junto a CooperAcción inauguraron el primer invernadero en la comunidad campesina de Siwincha (distrito de Chamaca, provincia de Chumbivilcas, Cusco).
La pandemia ha afectado la economía de la agricultura familiar que actualmente tiene amenazada la continuidad de su labor para asegurar la alimentación de las familias y el abastecimiento de mercados. Así mismo, debido a las heladas y los cambios en el clima en las regiones del Sur Andino, los cultivos se ven amenazados y se requiere de estrategias y acciones que ayuden a reducir estos daños. Este contexto está acentuando los impactos en la vida de las mujeres rurales, debido a su sobrecarga en responsabilidades del cuidado de la familia y también por el trabajo que implica el cuidado y la defensa de sus territorios. Recordemos que, pese al confinamiento y el estado de emergencia, las mujeres no han dejado de plantear, articular, organizar y trabajar alternativas para la vida.
Este proyecto de invernadero, liderado por mujeres campesinas y de pueblos originarios, se ha venido organizando con el fin de fortalecer sus conocimientos de trabajo con la tierra y de generar una economía básica que beneficia, principalmente, a sus familias y con ello a sus comunidades. Este grupo de mujeres horticultoras hará uso del invernadero para focalizarse en la producción de fresas por un espacio de dos años, las cuales podrían ser altamente valorizadas en el mercado y generar ingresos semanales.
Es importante resaltar la presencia de actores locales en la ceremonia de inauguración como funcionarios de la Municipalidad de Chamaca y el equipo pastoral de la localidad, los cuales legitiman y reconocen el valor de la organización sobre todo en tiempos de pandemia. Las mujeres reconocieron este paso como una oportunidad para fortalecer su economía comunal, generar ingresos para sus familias y a la vez continuar con su autoreconocimiento como mujeres líderes, defensoras del ambiente y la soberanía alimentaria, innovadoras y emprendedoras.