Ecuador

Minas y petróleo, los sectores más atractivos para la inversión

La inversión extranjera directa (IED) de América Latina y el Caribe en 2012 alcanzó los 173.361 millones de dólares, 6,7% más que en 2011, según lo detalla el informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).

De esa manera, el año anterior la región captó flujos equivalentes al 3% del Producto Interno Bruto (PIB) de América Latina y el Caribe, incidencia levemente mayor a la de 2011. En este contexto se destaca Chile, que en 2012 recibió montos de IED equivalentes al 11,3% de su PIB.

La región, según el informe, registra un sostenido crecimiento de la IED por los altos precios de las materias primas y la elevada rentabilidad de las inversiones asociadas a la explotación de recursos naturales. Para este año, la Cepal proyecta que las entradas de IED se ubicarán en un rango que oscila entre una caída de 3% y un aumento de 7%.

En el informe se resalta que la IED se va orientando cada vez más hacia la explotación de recursos naturales, especialmente en América del Sur. El peso de la manufactura es bastante limitado, con excepción de Brasil y México. Brasil sigue siendo el principal receptor de IED, pese al leve descenso de 2% registrado en 2012, cuando recibió 65.272 millones de dólares y representó el 41% de los flujos regionales.

En 2012, los aumentos más importantes se concentraron en Perú con 12.240 millones de dólares y Chile con 30.323 millones, ubicándose este último en el segundo destino más importante de IED. Otros países que mostraron incrementos respecto a 2011 fueron Argentina (27%), Paraguay (27%), Bolivia (23%), Colombia (18%) y Uruguay (8%). En Centroamérica, se destacan El Salvador (34%), Guatemala (18%), Costa Rica (5%), Honduras (4%) y Panamá (10%), que sigue siendo el principal receptor de esta subregión.

México experimentó una caída importante respecto a 2011, que se explica en buena medida por la salida a bolsa del 25% de la filial del banco Santander de España por 4.100 millones de dólares. Otros países que mostraron disminuciones en 2012 fueron Ecuador, Venezuela y Nicaragua. El origen de la inversión para América Latina y el Caribe proviene de los Estados Unidos y de los países de la Unión Europea, destacándose también Canadá y Japón.

No obstante, el año pasado creció de manera significativa la proporción de IED procedente de los propios países de la región (14% del total).

En su informe, la Cepal también realiza una primera aproximación a los efectos de la IED en los mercados de trabajo, basándose en los empleos directos anunciados por los inversionistas para proyectos de ampliación de la capacidad productiva. Las actividades de comercio y de construcción son las que crean más empleo (siete puestos por cada millón de dólares de inversión), seguidas por la industria manufacturera y los servicios (tres puestos).

Las actividades mineras (incluido el sector petrolero) crean un puesto de trabajo por cada dos millones de dólares. Otro sector que muestra considerables flujos de IED es el agrícola, que juega un papel estratégico frente a los desafíos demográficos y climáticos que enfrenta la región.

“Resulta cada vez más necesario aprovechar las ventajas que presenta la región como destino de la IED para mejorar la matriz productiva de los países. Esto es posible, tanto a través de un mayor esfuerzo para canalizar una parte de la renta de las transnacionales hacia la creación de fondos destinados a políticas de desarrollo productivo, como por medio de iniciativas que permitan orientar la IED hacia sectores considerados prioritarios por los países de la región”, concluye el informe de la Cepal.

La caída de la IED en el Ecuador
En 2012 el país no pasó por un buen momento en lo referente a la inversión extranjera, pues alcanzó los 587 millones de dólares, es decir, 52 millones menos que en 2011, según datos del Banco Central del Ecuador (BCE).

Sin embargo, la Cepal en su informe indica que el país recibió entre el primer y tercer trimestre de 2012, “364 millones de dólares, compuestos en un 40% por aportes de capital, un 54% por reinversión de utilidades y un 6% por préstamos entre compañías”. Tales datos reflejan una caída respecto a 2011, pero que revelan una trayectoria de montos de inversión que fluctúan año a año sin mostrar una tendencia definida.

De acuerdo a la información del BCE, los sectores con más inversión en 2012 fueron: explotación de minas y canteras (38,4%), industria manufacturera (23,8%), comercio (14%). Mientras que en los de menor inversión fueron: transporte, almacenamiento y comunicación (0,4%), servicios comunales, sociales y personas (0,3%), entre otros (Gráfico 2).

No obstante, la IED desde 2002, año en el que empieza a recuperarse después de la crisis de 1999, registra ciclos de crecimiento de inversiones. Cabe destacar que en la última década, el año récord de IED fue 2008, en el cual se obtuvo un monto de 1’057.422 de dólares.

Para algunos analistas, esta reducción en la inversión se entiende porque en el país existen reglamentaciones más fuertes para el trabajo, se exije un empleo estable y de calidad, que cumpla con la afiliación a la seguridad social y con el sistema tributario nacional, además de que se respeten los mandatos y garantías de la Constitución.

“El sistema de tributación es el que ha provocado que, especialmente las empresas petroleras y mineras, restrinjan sus inversiones en el país”, destaca la catedrática universitaria Marina Mera. Advierte que “el pago del Impuesto a la Salida de Divisas (ISD) del 5% ha desestimulado a las empresas a invertir en el país, por lo que prefieren hacerlo en países vecinos”. De ahí su conclusión del porqué Colombia y Perú registran un incremento en la IED.

Sin embargo, Mera destaca “que las medidas adoptadas por el Régimen no son malas, pues van en beneficio del país, ya que se cuenta con obras de infraestructura que en un futuro cercano atraerán la inversión extranjera de manera acelerada”.

Por su parte, analistas resaltan que la contracción de la inversión de 155 mil millones de dólares en la explotación de minas y canteras, obedece al cambio en la renegociación de los contratos que se emplea en el país desde 2010. En todo caso, señalan que se espera que mejore la inversión en este sector cuando se firmen los nuevos contratos de explotación minera, que le traerían al país una alta tasa de IED.

Para Mera, esta inversión vendrá de China, porque ese país es el que más créditos a otorgado al Régimen para que invierta en las grandes obras de infraestructura y en sectores estratégicos. Por lo que advierte que “la IED irá a donde haya mayor rentabilidad y eso lo da el sector petrolero”.

No obstante, en los primeros cuatro meses de 2013, la IED del país registró 126’170.941 de dólares, mientras que los recursos que inyectaron las empresas domiciliadas en el país fueron de 391’356.515.

En marzo pasado, el Gobierno anunció la puesta en marcha del Proyecto de Promoción y Atracción de Inversiones a cargo del Ministerio de Comercio Exterior e Integración Económica, cuyo objetivo es incrementar de manera significativa los flujos de IED que recibe el país para sectores priorizados, como son: turismo, metalmecánica, energía y servicios, entre otros. Este programa forma parte de un paquete de políticas orientadas a modificar la matriz productiva del país. El proyecto, durará cuatro años y costará 18,5 millones de dólares.