En el segundo semestre, la norteamericana White Mountain Titanium Corporation presentará el EIA del proyecto Cerro Blanco, que busca producir concentrado de titanio de alta pureza, el primero de este tipo en Chile. Si todo marcha como se espera -antes la iniciativa se detuvo por la crisis de 2009-, su construcción partirá a comienzos de 2013 y dos años después entraría en régimen. Ésta es la hoja de ruta que dibuja su presidente, Michael Kurtanjek.
Utilizado en innumerables aplicaciones médicas, aeroespaciales o de joyería, el titanio es un mineral cada vez más demandado en el mundo, aunque muy poco explorado en Chile. Eso hasta ahora, porque la minera norteamericana White Mountain Titanium Corporation está desarrollando un proyecto que podría desembocar en que el país cuente con el primer yacimiento de este tipo en producción en América Latina: Cerro Blanco, iniciativa ubicada en la Región de Atacama y que fue adquirido en 2004 a la estadounidense Phelps Dodge Corporation (hoy Freeport- McMoRan). Hasta esa fecha, se habían invertido US$ 8 millones en perforaciones y pruebas metalúrgicas, pero esta última empresa se deshizo de él porque quería concentrarse en la explotación cuprífera.
Desde entonces, y siguiendo su intención de aprovechar las oportunidades que ofrece el mercado del titanio, la firma invirtió cerca de US$ 30 millones para llegar a la etapa de factibilidad que espera tener avanzada en estos días. El presidente de la firma, Michael Kurtanjek, cuenta que la iniciativa ha superado vallas geológicas, geoquímicas, varios estudios magnéticos, pruebas metalúrgicas piloto, e incluso ya en esta etapa tienen negociaciones con potenciales clientes en distintos lugares del mundo.
También han avanzado en el financiamiento: “Hay varias opciones que están siendo consideradas. Podemos financiar el costo de capital a través de una combinación de deuda y private equity, o se podría llevar a cabo un joint venture con otras empresas del sector titanio”, sostiene. Contar con un yacimiento en esta parte del planeta, dice Kurtanjek, es particularmente atractivo, porque de la producción de titanio (en todas sus formas, rutilo e ilmenita) por 6,7 millones de toneladas que existen hoy, la mayoría está en apenas cinco países: Australia, Canadá, Sudáfrica, India y Ucrania. Agrega que según estudios, el mineral extraído sería de alta purificación, que es muy demandado en industrias como la de las pinturas.
Hoy White Mountain Titanium Corporation trabaja en la elaboración del Estudio de Impacto Ambiental (EIA), que presentaría el segundo semestre. Su objetivo es iniciar la construcción del yacimiento en 2013.
-¿Se les ha hecho muy difícil sacar adelante el proyecto?
-El desarrollo de Cerro Blanco ha sido relativamente sencillo. Técnicamente, el proyecto de explotación minera y el de procesamiento serán similares a muchos otros. Chile es un país minero, donde se entiende bien a la industria. Lo que ha cambiado en los últimos años es el plazo para iniciar la producción. Todos los procesos de aprobación y permisos están tomando mucho más tiempo que antes, y los costos en el país van en aumento. Pese a estos factores, el proyecto sigue siendo atractivo.
Al igual que con cualquier estudio de este tipo, es difícil prever el proceso de evaluación, pero en el caso de Cerro Blanco el proceso minero y el tratamiento es relativamente simple, no hay uso de ácido como en la industria del cobre o cianuros como en el caso del oro. En consecuencia, la compañía tiene la intención de realzar la naturaleza benigna de las operaciones, ya que es poco probable que se origine cualquier problema de toxicidad o contaminación del agua subterránea. Por eso, creemos que Cerro Blanco será el primer proyecto de titanio en Chile.
-¿Para cuándo estiman el inicio de la construcción y posterior producción?
-El proceso de construcción comenzará tan pronto como todos los permisos necesarios se hayan obtenido y el EIA haya tenido la aprobación oficial. La compañía está viendo el inicio de este proceso en 2013, y el período de construcción sería de menos de dos años.
-A principios de 2009, la firma esperaba iniciar la producción en 2011, ¿qué ocurrió con esos plazos?
-A raíz de la crisis financiera de 2008/2009 muchos proyectos mineros en el mundo sufrieron retrasos y Cerro Blanco no fue la excepción. Desde entonces, el sector del titanio se ha estabilizado, los precios del concentrado de rutilo se han más que triplicado y las perspectivas para el proyecto son sólidas.
-En ese entonces se hablaba de una inversión en torno a los US$ 180 millones, ¿a cuánto asciende esa cifra actualmente?
-Los costos finales operativos y de capital estarán disponibles a fines de este año, pero se espera que sean más altos, no sólo porque los precios de la energía son más altos, sino que también porque han aumentado los valores de la mano de obra y también influye el valor de la depreciación del dólar.
-A propósito de energía, ¿es efectivo que ya tienen firmados acuerdos con una generadora?
-Tenemos acuerdos avanzados con las generadoras de la tercera región, algunas de ellas como Guacolda, MPX y Endesa, todas están en procesos de inversión, para colocar en marcha o expandir su propia planta para suministrar energía. Este proceso de acuerdos está ligado fuertemente a las etapas de aprobación de nuestros permisos ambientales y sectoriales, llegado ese minuto, se materializarán los contratos definitivos.
-¿Cuánta energía utilizarán?
-En una primera etapa tenemos contemplado iniciar en 21 MW, para terminar a máxima capacidad en 36 MW. Sin embargo estamos estudiando la forma de estabilizar el costo marginal de la energía en nuestro periodo de puesta en marcha. Estamos muy preocupados por el escenario energético para los años 2014 al 2016, existe una fuerte demanda de energía en la región de Atacama, y si no se inyecta la energía suficiente a la matriz, el costo de la energía podría quedar fuera de control, es una de nuestras principales preocupaciones.
El proyecto estará ubicado en las cercanías de Freirina.
-Se ha mencionado que usarán agua desalinizada… ¿ya está decidido?
-El agua es una preocupación importante para todas las operaciones mineras en Chile. El trabajo de una planta piloto que se llevó a cabo en Canadá mostró que un producto de calidad comercial puede ser producido a partir de una planta de flotación que utiliza tanto agua industrial como agua de mar. Desde el punto de vista operativo y de mantenimiento, es preferible el agua industrial, pero la compañía está considerando varias opciones, que incluyen una planta de desalinización, pero esa información estará disponible con más detalles en los próximos meses.
-¿La producción de Cerro Blanco será netamente para exportación?
-El concentrado de rutilo se exporta principalmente, hay una sólida base de clientes en América del Norte, Europa y Asia. La demanda en Chile es muy pequeña.
Vínculos con la comunidad
-¿Cómo ha sido la relación de la compañía con las comunidades aledañas?
-La empresa se ha reunido con las pocas personas que viven en las cercanías del proyecto (ubicado a 28 kilómetros de Huasco), ha tenido buenas relaciones con ellos durante muchos años y es consciente de que varias personas tendrán que ser reubicadas, y ellos están de acuerdo. Durante los últimos meses, hemos mantenido conversaciones con los habitantes de Huasco y Freirina y no he visto ningún tipo de hostilidad hacia el proyecto. Esta parte de la región tiene bastante desarrollo minero y cada vez he percibido más apoyo para esta inversión, debido a los puestos de trabajo que ofrecerá durante un período considerable. En torno a 300 personas en la etapa de plena producción y una cifra considerablemente mayor en su construcción.
-¿White Mountain tiene más proyectos en carpeta en Chile?
-Actualmente, estamos enfocados en las oportunidades del titanio en Chile, pero la compañía tiene otras tres divisiones: metales, minerales y energía. En la medida que las oportunidades surjan, éstas serán desarrolladas junto con el titanio en el país, e incluso en otras partes de Sudamérica.
Contexto mundial
-¿Existe diferencia entre la explotación de titanio que realizarán en Chile y la que se efectúa en otros países?
-La mayoría de la materia prima de titanio utilizada para producir pinturas y pigmentos se basa en la recuperación de ilmenita (un mineral pesado derivado de arenas). Para que la ilmenita esté en buenas condiciones se deben eliminar las moléculas de hierro que contiene, ya sea química o metalúrgicamente, creando así rutilo sintético. Los costos asociados a la eliminación del hierro son altos debido a los elevados valores de la energía. En el caso de Cerro Blanco, el rutilo se produce como un mineral puro (TiO2), no hay un proceso de purificación adicional requerido una vez que el mineral se recuperó de la planta de procesamiento convencional.
-¿Hay suficiente titanio en el mundo para abastecer la demanda?
-La demanda mundial de materias primas minerales de TiO2 (rutilo e ilmenita, principalmente) es de unos 6,7 millones de toneladas por año. Durante la última década ha habido poca capacidad nueva que entre en funcionamiento, y actualmente estamos en un déficit de suministro. El rutilo es la materia prima preferida debido a su pureza, y Cerro Blanco es uno de los tres nuevos proyectos que está previsto que entren en funcionamiento en los próximos tres años.
-¿Cómo se comporta actualmente la demanda por este mineral?
-La demanda sigue siendo fuerte, y los precios se han más que triplicado en los últimos años. Por lo tanto, la compañía está avanzando lo más rápido posible para aprovechar esta oportunidad y establecer a Cerro Blanco como el proyecto de titanio de más alto grado en América del Sur.
El proceso de producción
El proyecto Cerro Blanco producirá concentrado de titanio, que es obtenido a través de la minería convencional y de flotación y el que alcanza una pureza de 96,5%. El proceso es similar al de la minería del cobre, en que algunas minas producen concentrado y otras cátodos. Este producto se venderá a empresas en el exterior que lo utilizarán en la fabricación de pinturas y pigmentos, en la nueva generación de aviones comerciales o para aplicaciones de soldadura y químicos. El presidente de la firma, Michael Kurtanjek, cuenta que el interés en la iniciativa se debe a la elevada pureza de su mineral, a la disminución de los niveles perjudiciales de calcio y magnesio, y los bajos niveles de radiación. Todo eso explica el hecho de que ya hayan firmado un contrato off-take y se espera que sigan otros con varios clientes. El proyecto de la norteamericana White Mountain Titanium Corporation en suelo chileno será explotado a través de un yacimiento a cielo abierto convencional.
Aclaración del editor:
En la edición en papel, el recuadro que acompaña a esta entrevista señala erróneamente que la empresa White Mountain Titanium Corporation es canadiense, lo que no es correcto, pues como se sostiene en el cuerpo principal del artículo la firma es de origen estadounidense.