Moradores de Choqueca, Allahua, Quehuira, Pumamarca y Fuerabamba bloquean principal vía de acceso a la minera
Los comuneros que desde el lunes acatan un paro en la provincia de Cotabambas, Apurímac, tras la muerte de Quintino Cereceda Huisa en un enfrentamiento con la PNP en los alrededores de la mina Las Bambas, anunciaron que no enterrarán el cuerpo de la víctima hasta la llegada del primer ministro, Fernando Zavala.
Asimismo, solicitan la presencia del titular de Energía y Minas, Gonzalo Tamayo, y los directivos de la empresa MMG Las Bambas, a cargo de las operaciones mineras en la zona.
El paro que acatan ciudadanos de Choqueca, Allahua, Quehuira, Pumamarca y Fuerabamba tiene como principal reclamo que la vía que une a la comunidad de Quehuira con la mina, en terrenos que pertenecen a las comunidades, debe pasar por un proceso de consulta previa antes de ser utilizada para el transporte de minerales.
El cadáver de Cereceda Huisa se encuentra desde ayer en un ataúd. A su alrededor se han ubicado banderas tanto de la comunidad de Choqueca, su lugar de nacimiento, como del Perú. Cabe mencionar que los miembros de su comunidad han anunciado sus intenciones de embalsamarlo.
Cerca de 200 personas se han apostado en la entrada de la principal vía a la minera, en la comunidad de Quehuira, donde esta mañana se realizó una ceremonia. No se permite el acceso de ningún vehículo.
La vía que une Tambobamba y Chalhuahuacho se encuentra bloqueada. El Comercio pudo comprobar que en este último sector se han agrupado decenas de policías de la Dirección de Operaciones Especiales