El 5 de junio, día mundial del medio ambiente, las comuni- dades de Huasmín, Sorochu- co, Celendín, Oxamarca se congrega- ron en las inmediaciones de la laguna Azul, para celebrar esta fecha. Para las comunidades celendinas el 5 de junio no sólo significa el cuidado y la protección de la casa grande, nuestro planeta, nuestra mama pacha, sino también de una de las especies biológicas amenazadas por este modelo neoliberal, por esta sociedad de consumo: el hombre.
Goyo preso
El 27 de junio, la jueza Mercedes Caballero dictó prisión preventiva por 14 meses contra el presidente regional de Cajamarca, Gregorio
Santos. Le acusan de presuntos actos de corrupción. “Goyo” Santos fue internado en la cárcel de Piedras Gordas sin que se le haya probado ninguna culpa, la jueza dictó esa sentencia argumentando que es para evitar que Santos escape del país mientras dure su proceso. “Goyo” acusó al gobierno y a la minera Yana- cocha de cualquier cosa que pudiera pasarle y reiteró su oposición al proyecto minero Conga.
El lunes 23, Santos había inscrito su candidatura a la presidencia regional de Cajamarca por su partido MAS, recibiendo el respaldo de otras orga- nizaciones de izquierda por ser el único candidato opuesto al cuestio- nado proyecto minero Conga. Sin embargo, según el procedimiento
electoral, Santos aún podrá partici- par en las elecciones del 5 de octu- bre. En caso de que resulte electo no podría jurar ni asumir el cargo por estar en prisión, en su lugar lo haría su candidato a la vicepresidencia.
Este hecho es una clara muestra de la persecución política por su respaldo y participación en la lucha del pueblo cajamarquino contra el Proyecto Conga. Existen muchos políticos que son procesados por casos de corrup- ción, pero no se los mete en prisión “para evitar que se escapen” (de ser así la cárcel estaría repleta de autori- dades). Esto ha generado duras críticas y la figura de “Goyo” se ha visto fortalecida antes que disminui- da, quizás no calcularon bien esto al aplicarle ese “castigo”, quizás pesó
más una rabieta de Roque Benavi- des, dueño de mina Yanacocha, la empresa enfrentada a Cajamarca y a quien Goyo Santos le resultaba muy molesto.