Toma la Montaña retoma su programa de actividades tras la marcha minera. Los enfrentamientos verbales con un sector que se manifestó a favor de la minería -en la que participaba la alcaldesa y varios funcionarios- no pasó a mayores por la intervención policial. Casi 90 tiendas de campaña formaban el campamento en la mañana de ayer por el que se movían más de 200 personas que rechazan la minería de carbón denunciando sus daños y la red de corrupción.
Sosas de Laciana, España – 29/08/2011. Tras la tensión vivida en la tarde del sábado, la normalidad volvió ayer al campamento de ‘indignados’ de Sosas de Laciana. La calma que se respiraba ayer contrasta con el gran despliegue del Grupo Rural de Seguridad (GRS) de la Guardia Civil, que sólo un día antes tomó el pueblo ante la llegada de los mineros. En las últimas horas, la presencia policial se ha reducido a dos parejas de agentes de la Guardia Civil desplegados a la entrada de la localidad, mientras que una cuadrilla de agentes medioambientales de la Junta se mantiene destacada como medida preventiva.
La noche del sábado fue tranquila, según explican los acampados, sin que ningún incidente alterara la normalidad del campamento. Por la mañana, varios grupos de integrantes de la protesta realizaron excursiones al monte y visitas a los alrededores de minas cercanas, algunos acompañados por vecinos de la zona. Además de la población local, mineros de otras cuencas estuvieron presentes en las asambleas de la tarde para compartir sus experiencias y debatir sus puntos de vista.
Además, los presentes continuaron con el programa de actos previsto, que ayer incluía varios talleres sobre ecología, programas de radio y asambleas para organizar acciones que la protesta lleve a cabo a parir de ahora. Para hoy está prevista una marcha a un robledal cercano a Sosas, que podría estar amenazado por proyectos futuros de una empresa minera, según los ‘indignados’, y talleres sobre cambio climático, interpretación de la flora local y una exposición de conflictos similares en Asturias y Galicia.
Por otra parte, la asamblea de Toma la Montaña decidirá esta tarde si sus integrantes comienzan una campaña de reuniones informativas en las localidades cercanas, para buscar apoyos locales de cara al fin de semana, cuando se espera que la acampada reciba la mayor parte de los visitantes. A este respecto, integrantes de la marcha minera del sábado ya advirtieron que no tolerarían su presencia en otras localidades.
Casi 90 tiendas de campaña formaban el campamento en la mañana de ayer por el que se movían más de 200 personas. No obstante, según la organización, en la tarde de ayer abandonaron la acampada varias personas llegadas para el encuentro de la Red de Apoyo Mutuo de Asturias y Cercanía (Ramas), a las que podrían reemplazar una caravana de manifestantes procedentes de Madrid.
Las redes sociales han sido otro de los puntos de debate sobre la acampada. En su página de Facebook y en Twitter se podían leer ayer numerosos comentarios a favor y en contra de su presencia en Laciana.
Mineros e ‘indignados’, frente a frente
La presencia de la Guardia Civil evita que el encuentro entre mineros e ‘indignados’ del 15-M en Sosas de Laciana acabe en altercado.
‘Indignados’ y mineros han dejado ver este sábado sus diferencias en la localidad de Sosas de Laciana, aunque el enfrentamiento de unos y otros no ha llegado a mayores por la fuerte presencia de efectivos de seguridad.
La presencia de los miembros del Grupo Rural de Seguridad de la Guardia Civil ha evitado que los enfrentamientos verbales entre dos centenares de mineros y menos de un centenar de indignados’ acampados en esta localidad dentro de las movilizaciones del 15M fueran a más.
La primera de las marchas mineras para dejar ver el rechazo a los ‘indignados’ del 15M y su acampada partió desde la localidad de Villaseca y la segunda inició el recorrido en Villablino.
Ambas tuvieron como punto de encuentro la localidad de Sosas, donde un grupo de menos de un centenar de jóvenes acampan desde hace unos días para mostrar su oposición a la explotación de minas a cielo abierto.
Los ‘indignados’ señalan a responsables de confrontación
La portavocía de la acampada emitió ayer un comunicado en el que anunciaba su intención de pedir «responsabilidades» a la alcaldesa de Villablino, Ana Luisa Durán, y al empresario minero Victorino Alonso por «promover» la confrontación de los «indignados» con mineros el sábado en Sosas de Laciana. Aseguran que se profirieron «graves amenazas» contra los integrantes del movimiento por parte del otro grupo, en el que aseguran que había presencia de «multitud de funcionarios» de Villablino, así como su alcaldesa. Por todo ello acordaron exigir responsabilidades a la regidora lacianiega y al empresario minero Victorino Alonso.