El día de ayer, 29 de febrero, luego de una audiencia preliminar, la Alta Corte de Londres concedió un plazo adicional antes de dar inicio al juicio contra la empresa minera Glencore (Xstrata) por su responsabilidad en las acciones de violencia que causaron tres muertes y decenas heridos durante la protesta social de mayo de 2012, en la provincia de Espinar, Cusco.
Durante la audiencia, el juez británico David Foskett, concedió un plazo adicional para que los abogados de los demandantes, un grupo de 22 comuneros, hombres y mujeres de Espinar; puedan acceder a más pruebas. Sus abogados solicitaron más tiempo para conseguir documentos de Xstrata, principalmente mensajes de Internet que intercambiaron los dirigentes de la minera durante la crisis, en mayo de 2012.
Los incidentes ocurrieron el 28 de mayo de 2012, cuando, después de varios días de intensas protestas contra la mina de cobre de Xstrata, la policía disparó a los manifestantes, siguiendo, según los demandantes, órdenes de la empresa minera. Los afectados afirman que la policía operaba bajo las instrucciones y el control de la dirección de la empresa, señalan además que la policía recibió casi medio millón de dólares de la empresa para proteger la mina. La empresa ha negado dichas alegaciones.
En el momento de las protestas, la mina pertenecía a Xstrata Tintaya S.A. (renombrada luego como Companía Minera Antapaccay), una filial de la empresa suiza Xstrata, que en 2013 fue adquirida por la británica Glencore, para formar Glencore Xstrata.
En un comunicado en 2013, la empresa afirmó: “lamentamos profundamente que las protestas que tuvieron lugar en 2012 en Espinar derivaran en violencia (…) Pese a nuestros intentos por mantener un diálogo con las comunidades y alcanzar una solución pacífica (…) las protestas siguieron adelante”.
01 de marzo de 2016
CON EL RUEGO DE SU DIFUSIÓN
Fuente: MiningPress, Diario Gestión
Foto: MiningPress