Japón mira hacia Colombia, Rusia, Mongolia, Mozambique, Estados Unidos y Canadá en busca de carbón mientras trata de abandonar la energía nuclear, dijo el martes un alto cargo del Gobierno nipón.
«El carbón seguirá siendo una de nuestras principales fuentes de energía y seguiremos haciendo esfuerzos para garantizar el suministro de carbón», dijo el director de la división de carbón del Ministerio de Economía, Comercio e Industria, Akira Yasui, en una conferencia en Tokio.
Actualmente, cerca del 60% de las importaciones niponas de carbón proceden de Australia y un 20% de Indonesia. Japón debe diversificar sus proveedores porque la competencia por el carbón con países como China e India se ha intensificado, dijo Yasui.
Japan importó 165 millones de toneladas métricas de carbón en los once primeros meses de 2012, un 5,9% más que en el mismo periodo del año anterior, según los datos oficiales. El carbón ruso y el estadounidense representaron el 5,7% y 3,5%, respectivamente, sin experimentar grandes cambios. El carbón canadiense supone otro 5,7%, un 6,8% interanual más, de acuerdo con las cifras.
Rusia está cerca y Mongolia cuenta con amplias reservas de carbón de alta calidad, señaló Yasui.
Tras el accidente en la central nuclear de Fukushima Daiichi en marzo de 2011, Japón ha estado elaborando un nuevo plan energético que pretende mantener en torno al 20% la electricidad producida a partir de carbón de aquí a 2030.
Anteriormente, el Gobierno quería reducir ese porcentaje al 11% y elevar la cuota de la energía nuclear desde el 30% hasta más del 50%.