Hoy 25 de noviembre de 2011, mientras los pueblos y comunidades indígenas, campesinas y afrodescendientes caminaban pacíficamente en el municipio de Barrancas, departamento de la Guajira, Colombia, en el marco del “Encuentro de armonización y movilización por la defensa de la vida, el agua y el territorio”…
expresando su desacuerdo con el proyecto de expansión minera y desvío del Río Ranchería única fuente de abastecimiento de agua a los municipios de Barrancas, Hatonuevo, Albania y Rioacha, se descubrió a miembros del B2 armados que durante toda la mañana estuvieron haciéndose pasar por periodistas, entrevistando y filmando a personas que participaban en la marcha.
Al sentirse descubiertos por los verdaderos manifestantes, tres sujetos que hacían parte del mismo grupo infiltrado escaparon con las imágenes que habían tomado mientras que otro al que se logró requerir para que se identificara manifestó ser el Teniente Pinzón exhibiendo una cédula antigua que no era su documento válido, indicando que estaba autorizado para ejercer actividades de “seguridad”; la policía llegó en el momento y lo protegió sacándolo del lugar. Posteriormente los cuatro sujetos abordaron la camioneta Toyota de placas CZK 976 de Bogotá.
Esta marcha pacífica se realiza por el total desconocimiento de los derechos de la población guajira por parte del Estado y las empresas mineras que pretenden expandir el proyecto minero de carbón a cielo abierto y desviar el río Ranchería a pesar de los tremendos impactos que esto traerá para la vida, la salud, el medio ambiente, la cultura, y la economía de la Guajira y el País y a favor de las empresas CERREJÒN, PACIFIC RUBIALES y MPX.
La nuestra es una manifestación pacífica amparada por la Constitución Nacional y por ello:
Exigimos al estado Colombiano:
– Indicarnos cuál es la razón para que desde organismos oficiales se ordenara infiltrar una marcha pacífica en la que participaban mujeres, niños, niñas, jóvenes de diferentes etnias, campesinos y afros que habían solicitado el correspondiente permiso a la autoridad municipal.
– Tomar TODAS LAS MEDIDAS correspondientes para evitar que las fotografías y filmaciones que produjeron sus agentes sean utilizadas para atentar en contra de los derechos y libertades de las personas, pueblos y comunidades protestantes.
– Escuchar la voz de las comunidades y cumplir sus obligaciones de garantizar, respetar y proteger los derechos individuales y colectivos que nos amparan, en lugar de enviar a sus agentes para intimidarnos y hacer inteligencia ilegal en contra nuestra.
Responsabilizamos:
Al estado colombiano, a las empresas beneficiarias de estos proyectos, CERREJÓN, PACIFIC RUBIALES y MPX y a los estados de origen de estas empresas, por cualquier afectación en la vida e integridad física de los manifestantes que puedan causar la infiltración e inteligencia ilegal detectados.
Barrancas, 25 de noviembre de 2011.
Asociación de Autoridades y Cabildos Indígenas Wuayuu del sur de la Guajira AACIWASUG, Fuerza de Mujeres Wuayuu y Junta Social Proreubicación de Tabaco.