Representantes del pueblo indígena Guarijío de la Sierra de Álamos, en Sonora, México, afirmaron que el verdadero motivo de la construcción de la presa Pilares Bicentenario es abastecer de agua a una futura mina de plata que se haría en la zona. También denunciaron que el proyecto no ha sido consultado y presenta una seria de irregularidades.
En una conferencia de prensa realizada el 4 de septiembre en el auditorio Arturo Warman del Programa Universitario México Nación Multicultural de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Fidencio Leyva Yoquivo, líder guarijíro, sostuvo que su pueblo es objeto de hostilizaciones por el Gobierno estatal y local de Los Álamos para viabilizar la construcción de la presa.
Según el líder, el mencionado proyecto se construiría en el territorio patrimonial y cultural de su pueblo, y significaría el despojo de sus tierras.
Junto a sus asesores Armando Haro Encinas, profesor-investigador del Colegio de Sonora y Ramón Martínez Coria, presidente para el Foro Sustentable A.C, así como a líderes del área de influencia del proyecto, Leyva aseguró que el verdadero fin de la presa es abastecer de agua a un planeado proyecto minero de plata en la zona adyacente a la obra.
Los expositores mostraron el mapa de un gran yacimiento de plata junto al lugar donde se construiría la presa y explicaron que inicialmente se dijo que el proyecto tenía fines hidroeléctricos, pero después solamente fines de contención para inundaciones que se producen cada siete o nueve años.
Lo anterior, más el hecho de que hasta el momento no se ha hecho público el proyecto oficial de la presa, alimenta las sospechas de que en realidad el proyecto se haría para abastecer de grandes cantidades de agua a una probable mina que las autoridades estarían tratando de esconder.
Represa inconsulta
El líder guarijiro señaló también que el proyecto se pretende realizar sin el consentimiento de los gobernadores tradicionales indígenas y mediante chantajes a la población con la asistencia social.
No se ha hecho ninguna consulta sobre los beneficios o afectaciones que tendremos con la construcción de la presa que va a estar dentro de las comunidades guarijías. Pero en vez de hacer la consulta, nos amenazan que nos van a quitar los programas sociales y los apoyos para proyectos productivos si no firmamos, aseguró.
Por su parte, Armando Haro aseguró que el Gobierno no ha cumplido con la consulta previa e informada tal como dispone la reforma constitucional de 2011. Asimismo, señaló que la obra se pretende construir en un área natural protegida -mediante el Decreto de 1949-.
El investigador indicó que existen varias irregularidades en los trámites jurídicos y administrativos en la obra, pues fue presupuestada y licitada si una adecuada documentación y divulgación.
Estamos buscando qué se puede hacer desde el nivel federal, porque en Sonora las instancias estatales, delegaciones federales y municipales se han venido coludiendo para que los promotores de la presa hagan lo que quieran declaró Haro.
Por otra parte, Haro afirmó que el Gobierno ha incumplido con los acuerdos a los que se llegó en sucesivas reuniones desde 2012, entre los cuales estaban detener las acciones de amedrentamiento y manipulación, así como entregarles una copia certificada del proyecto.
Por el contrario, el estudioso señaló que tras la muerte de, principal detractor del proyecto, el exgobernador Guarijío Lino Leyva Zazueta, se incrementaron las acciones de manipulación a fin de obtener la firma de los gobernadores indígenas guarijíos, sin consultar a sus bases.
Firmas falsas y amenazas
En la conferencia, los dos asesores hablaron de las constantes amenazas que recibieron durante su permanencia en las comunidades de la zona del proyecto, tras lo cual debieron huir del lugar el pasado cuatro de agosto.
Igualmente denunciaron que las firmas requeridas para llevar a cabo el proyecto fueron falsificadas u obtenidas de manera ilegítima por el Gobierno estatal, llegando incluso a sacarse a los gobernadores indígenas con la policía de sus casas para que firmasen el consentimiento.
Afirmaron también que la firma de otro gobernador fue falsificada y una más fue obtenida sin el respaldo de la población. Por esto el gobernador fue destituido después de firmar.
Polémica presa
La presa Pilares que se planea construir en el municipio de El Álamo, tiene como fin controlar las avenidas del Río Mayo para evitar las recurrentes inundaciones en los municipios de Navojoa, Huatabampo, Etchojoa y Benito Juárez que causan daños por hasta tres mil millones de pesos a cultivos e infraestructura rural, vial y urbana. Los trabajos de construcción tendrán una duración de 37 meses.
Los indígenas, por su parte, temen la aparición de enfermedades por la aparición de insectos en las aguas estancadas, así como la pérdida de plantas medicinales y tierras de cultivos y la desaparición bajo las aguas de su cementerio, aspecto cultural muy importante para ellos.