Eso lo decidirá el Tribunal Unitario Agrario de Torreón, Coahuila al dar sentencia en una desigual lucha en tribunales debido al despojo e invasión de dos mil has. pertenecientes al Ejido Tenochtitlan por una minera canadiense, más de 10 años de juicio al fin terminan y esperamos se haga justicia después de 40 años de abuso, la trasnacional Majestic Silver Corp. Al amparo del poder y la simulación ha usufructuado esas tierras que deberá entregar toda vez que se ratifique la sentencia emitida el 30 de mayo del 2006 por el Tribunal Unitario Agrario donde se le niega el amparo interpuesto al no acreditar sus hechos por no tener valor los documentos presentados. El Tribunal Unitario Agrario y la Magistrada Ramírez Borjón tienen la oportunidad de trascender en la lamentable historia de los conflictos agrarios cuando hay poder e intereses de por medio, “la Ley como escudo” diría El Benemérito, Será arma y bandera para esta decisión que de hecho es simplemente atender a la Resolución Presidencial y al plano proyecto aprobado por el Cuerpo Consultivo Agrario; las más de dos mil has. que tiene invadidas la minera extranjera, están dentro del plano proyecto aprobado y la Resolución Presidencial, los documentos que presenta en su defensa la trasnacional son los mismos que presento en el año 2004 y le fueron depuestos en el 2006 con sentencia negativa, es decir que las escrituras de compra son hechas con fecha posterior a la solicitud de afectación y algunas otras a la fecha de la Resolución Presidencial.
Al negársele el amparo a la minera se pretendió entregar al ejido terrenos fuera de la dotación original llegando al extremo de entregar superficies de predios particulares contiguos.
A pesar de tantos años de conflicto la resolución del mismo es cuestión de fechas y medidas, las cuales no se pueden modificar como lo ha manifestado la compañía minera en su defensa, la Ley Agraria es muy clara en el concepto de planos y fechas.
El saqueo indiscriminado de metales preciosos y la devastación del entorno ecológico con toda suerte de productos químicos contaminantes y mortíferos, es lo único que deja esta minera pues en cuarenta años no ha pagado un solo centavo al ejido por el derecho de paso, regalías y demás obligaciones. Ante esto en una ocasión los ejidatarios haciendo valer el derecho de propiedad cerramos el camino de acceso que está dentro de nuestro terreno y fuimos sacados a golpes de nuestra tierra con una falaz orden de un tortuoso Agente del M. P. de Cuatrociénegas, Coahuila, Lic Olivas además de cuarenta policías estatales acusándonos de obstruir vías de comunicación, después de secuestrarnos durante toda la noche fuimos dejados en libertad sin delito alguno (no lo había) en un poblado a cientos de kilómetros, se interpuso una demanda ante la CDHEC la cual aún duerme el sueño de los justos desde hace cuatro años..
Su Señoría ante usted están cuarenta años de abuso, injusticia y devastación que deben terminar al sumarse usted a los funcionarios ejemplares que hay en este país, aplicando la Ley Agraria que precisa proteger a los ejidatarios y ordenar conforme a la ley a los saqueadores y explotadores extranjeros.
Saltillo, Coahuila a 3 de marzo de 2016, Ejido Tenochtitlan.