El comisario de bienes comunales del municipio mexicano de Aquila, Michoacán, Octavio Villanueva Magaña, explicó que «simplemente la empresa Ternium, controlada por el grupo argentino Techint, quiere llevarse gratis el material de fierro de Aquila y la comunidad indígena se opone a regalarlo». Indígenas de Aquila culparon a la empresa Ternium de difícil situación por la que atraviesa la población, debido a que ha sembrado la discordia entre los 401 beneficiarios con derecho a recibir los pagos en ese municipio, donde actualmente los líderes de los comuneros mantienen serias diferencias por los derechos de explotación.
El comisario de bienes comunales del municipio de Aquila, Michoacán, Octavio Villanueva Magaña, explicó que «simplemente la empresa Ternium, controlada por el grupo argentino Techint, quiere llevarse gratis el material de fierro de Aquila y la comunidad indígena se opone a regalarlo».
Asimismo, detalló que originalmente ambas partes habían pactado trabajar sobre 73 hectáreas, pero ahora la actividad se extiende a alrededor de 200.
Villanueva Magaña denunció que nosotros le estorbamos a los directivos de Ternium, pues «ellos quieren debilitarnos, quieren a otro comisariado que la comunidad indígena desechó porque se vendieron ellos con la minera».
Reveló que fue objeto de amenazas por parte del crimen organizado. «Me mandaron dos amenazas, que si no me callaba iban a venir por mí, que si seguía publicando más cosas que sucedían en Aquila iban a hacer atrocidades», declaró.
Información obtenida sobre el asunto apunta, que incluso la aparición del grupo de autodefensa de Aquila, se debió al interés de recuperar el cobro de regalías que paga la empresa Ternium al comité comunal de San Miguel de Aquila por la explotación de la mina «Los Encinos» que se encuentra en ese municipio
En ese sentido, los 401 miembros del comité se comprometieron a recibir cada mes 33 mil 324 pesos en forma individual y en tarjeta bancaria.
Además, Agustín Villanueva Ramírez, ex presidente de bienes comunales, detenido por federales el pasado miércoles, como líder de los guardias comunitarios de Aquila, organizó el grupo de autodefensa como una forma de recuperar el control de los comuneros beneficiados con las regalías.
Los por qué de la rebelión de Aquila
Desde marzo del 2012 y hasta el pasado martes 13 de agosto, la minera Ternium pagaba regalías a los comuneros de Aquila por explotar hierro en sus tierras, lo que proporcionaba a la comunidad importantes recursos económicos. La población este acuerdo logró tras una lucha social para que la minera diese un trato más justo a los pobladores.
Dentro de los acuerdos, los pobladores establecieron una empresa comunitaria de traslado de mineral. Llegaron a tener hasta 15 camiones que prestaban a la minera el servicio de acarreo de material. En sus operaciones diarias, Ternium acarreaba hasta 80 camiones al día. De esos quince camiones, en la última semana uno había sido robado, otro se descompuso y otro fue volteado por el crimen organizado. Pese a esas dificultades, la empresa comunitaria seguía prestando sus servicios a Ternium.
Un día antes de que el Ejército entrara al poblado, la minera detuvo sus operaciones. Ahora, los comuneros informan que incluso está terminando con todos los contratos, no sólo con ellos sino con otras empresas que les prestaban diferentes servicios.
Esto se hace, según creen algunos de los comuneros entrevistados por REVOLUCIÓN TRESPUNTOCERO, para dejar sin recursos a la comunidad. Creen que la estrategia de la minera es renovar los contratos con las otras empresas pero no con los comuneros de Aquila.
Cuando se piden explicaciones sobre el inicio del conflicto en Aquila y la relación del problema de la minera con el crimen organizado, los testimonios son contundentes: la minera tiene concesionadas minas en las tierras de Aquila y está permitiendo la explotación de 2 minas clandestinas ubicadas cerca de la mina principal. Ternium no dice nada sobre estos sitios de explotación ilegal porque prefiere «agarrarse de la mano» con el crimen organizado y explotar esas minas.
Así, estas actividades no le generan gastos extra a la minera pues no paga impuestos al gobierno ni regalías a los comuneros. Según algunos informes, el narco participa activamente en la explotación de esas minas clandestinas y el material es depositado en terrenos de Ternium.
Cuando se levanta en armas la guardia comunitaria de Aquila, una de sus acciones es detener la explotación de estas 2 minas ilegales. También se denuncia que, en toda la costera, hay explotación clandestina que se hace con participación de funcionarios del estado.
El acoso del crimen organizado a los comunitarios incluyó secuestros y el robo de un camión. La familia de Agustín Villanueva, líder de la comunidad de Aquila, incluso fue amenazada de muerte. Su hermano Octavio Villanueva, comisario ejidal, fue acosado por el crimen organizado. Además, los pobladores se veían obligados a pagarle a los grupos del crimen organizado por supuesta protección.
Estas situaciones límite llevaron a que el pueblo creara la guardia comunitaria que salió a la luz hace dos semanas, cuando el crimen organizado estaba buscando imponer un comisario ejidal para mantener controlada a la población.