Chile

Gremios se muestran preocupados por escenario futuro y dependencia del cobre

Construcción e industria metalúrgica y metalmecánica reconocen que menor dinamismo afectaría a los rubros.

Los gremios están conscientes de las consecuencias que podría acarrearles la dependencia de la minería. Sólo en construcción, esta actividad incide en el 43,4% de su crecimiento anual. “En 2012 la inversión para construcción minera significó US$ 4.600 millones, la mitad del sector”, señala Carlos Piaggio, gerente de infraestructura de la CChC, desde donde afirman sentirse preocupados por una posible debilidad de la industria del cobre.

“Cualquier variación va a impactar en esta mitad. Nos preocupa porque independiente de cuánto sería la baja, el sector está muy ligado”, sostiene. En lo que respecta a paralizaciones de proyectos de inversión, dice que “es posible que en tres o cuatro años más se vaya a ver el impacto. La industria debe prepararse y leer las señales del mercado que avisan sobre la evolución de los próximas iniciativas”, alerta.

“De la cartera de proyectos, los que están en estudio pueden depender del escenario energético o avanzar de forma más lenta. Si bien esta situación no es preocupante, hay que ir viendo cómo se va a ir dando el cronograma de inversiones”, aclara. Aunque como nota optimista, recuerda que “alrededor de un tercio de la cartera ya se encuentra con un grado de avance” y que las empresas constructoras están diversificadas.

En la industria metalúrgica y metalmecánica la demanda de productos para el sector minero significó en los últimos años el 17% de la oferta del sector. Ambos subrubros representan un 50% de la oferta del sector referida a fabricación nacional. Desde Asimet, Gastón Lewin, su presidente, reconoce “la vital importancia” de la minería en el rubro. “Obviamente que una baja en la actividad –explica- impacta negativamente en el crecimiento de la industria metalmecánica nacional y nos preocupa. Cae la fabricación de estructuras metálicas, afectando no sólo a todos los subsectores aguas abajo, sino que también a la demanda de maquinarias y equipos”, continúa.

Impacto en el comercio


En el comercio también dejan entrever una mayor atención por cómo les podría influir la baja de un área “relevante para la actividad económica, para el consumo y, por ende, para el comportamiento de las ventas del sector”, explica Jaime Alé, secretario general de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo de Chile (CNC).

Aunque lo tradicional, apunta, era que “si caía el precio del cobre de manera importante, el tipo de cambio se depreciaba, los productos importados se encarecían, los exportadores no mineros mejoraban sus ingresos y los chilenos veían deteriorarse su poder adquisitivo, hoy tenemos una economía con nuevas oportunidades y condiciones”.

Por esto mismo, mantiene que una baja de la inversión o de los precios de los minerales probablemente estaría acompañada por otros condicionantes en la economía internacional que podrían compensar de forma total o parcial el impacto en el comercio.