Los fondos de pensiones suecos están reglamentados por un escrito que dice: “los fondos deben tomar consideración de los aspectos éticos y del medio ambiente, sin embargo sin privarse de la comodidad del objetivo general de altas ganancias”. Es un escrito vago e ineficaz. En este momento el Grupo de pensiones, que está conformado por los partidos de gobierno y el partido socialdemócrata, están discutiendo el futuro de los fondos de pensiones y entre otras cosas se encuentra la cuestión del reglamento y directrices de sustentabilidad de los fondos de inversiones. Ahora tienen la oportunidad de establecer metas claras para inversiones verdaderamente sostenibles, escribe Solidaridad Suecia América Latina y el líder Maya K’iche’ Mario López de Coordinación y Convergencia Nacional Maya Wakib Kej, que hoy empieza una gira en Suecia, para informar sobre los problemas que causan los fondos de pensiones suecos en Guatemala.
Dichos fondos invierten actualmente 182,5 millones de coronas en la empresa minera canadiense Goldcorp. Su mina mas lucrativa, es la mina de oro Marlin en el área de San Marcos en el noreste de Guatemala. Nuestras organizaciones conocen a los pueblos originarios en las áreas afectadas en San Marcos y hemos constatado los daños irreversibles contra ellos y sus territorios. Por eso hacemos un llamado de atención de cómo el reglamento ético del sistema de los fondos de pensiones suecos posibilita inversiones, que generan violaciones de los derechos humanos y destrucción del medio ambiente. La mina Marlin es un ejemplo claro de como los fondos de pensiones suecos, priorizan sus intereses de ganancia, antes que el de su responsabilidad ética y medioambiental.
Las comunidades mayas que habitan alrededor de la Mina Marlin, atestiguan que las fuentes de agua se han secado y varios estudios confirman altos niveles de metales pesados en el agua. Cada vez se reportan mas casos de erupciones en la piel, parálisis en las extremidades, deformaciones y bebés con limitaciones físicas, entre otros impactos en la salud. La presencia de la mina en el área ha provocado divisiones profundas y conflictos sociales en la zona. Muchas personas que se encuentran afectadas por la mina no se atreven denunciar sus casos, porque corren el riesgo de persecución y represión. Varios activistas opositores a la mina han sido disparados y perseguidos.
En los últimos años la criminalización de la protesta social ha aumentado. Cada vez mas activistas que lideran la lucha contra la minería en Guatemala están acusados de causar disturbios contra el orden y seguridad, y son desacreditados y perseguidos, calificados de terroristas pese a que se manifiestan pacíficamente. La institucionalidad corrupta del Estado, que está al servicio de los intereses de las grandes industrias extractivas, legitiman sus acciones, diciendo que los manifestaciones son una amenaza para la seguridad nacional y la libre locomoción de la ciudadanía como una forma de justificar el uso de la fuerza, cuando lo único que hacen es defender el agua, la Madre Tierra y la vida misma.
Por varios años los fondos de pensiones suecos han mantenido un diálogo con Goldcorp sobre la situación alrededor de la mina, pero en 2012 terminaron el proceso de dialogo diciendo que “los objetivos del diálogo se cumplieron”. Ahora el consejo ético de los fondos de pensiones muestran este proceso de diálogo como un buen ejemplo de su trabajo de incidencia. De esta manera, los inversiones suecas continúan en Marlin. Mientras tanto las enfermedades, la criminalización de la protesta social, la división de los pueblos originarios y la contaminación de sus territorios ancestrales, que tienen un significado espiritual profundo, continúan.
Es por estas razones que organizaciones en Guatemala como la Coordinación y Convergencia Nacional Waqib’ Kej estamos apoyando fuertemente a las comunidades y pueblos mayas y mestizas de San Marcos, denunciando cuando sus derechos son violentados. Nos organizamos a nivel nacional y articulamos nuestra oposición en forma conjunta. Los fondos de pensiones suecos son parte del problema y es por eso que nosotros, Solidaridad Suecia América Latina, apoyamos movimientos como Waqib’ Kej. Juntos demandamos al parlamento sueco clarificar las directrices a los fondos de pensiones que las inversiones solo se deben hacer con pleno respeto a los derechos humanos y al medio ambiente.
Según una encuesta realizada por la red Justicia Ya! cinco partidos piensan como nosotros. Folkpartiet, Kristdemokraterna, Miljöpartiet, Vänsterpartiet y Feministiskt Initiativ todos responden un “Si” sobre la pregunta, si el respeto a los derechos humanos y medio ambiente deben ser priorizados con relación al objetivo de las altas ganancias de los fondos de pensiones suecos.
Sin embargo, nos preguntamos, ¿hay algún otro partido sueco que puede prometer dar el paso de trabajar por estos cambios? Ahora falta dos semanas para las elecciones y no vamos a dejar a los políticos evitar esta pregunta cuando tenemos la visita a Suecia de Mario Lopez la semana que viene. ¡Electores, mantengan sus ojos y oídos abiertos!
*Mario Lopez, Lider Maya K’iche’, Waqib’ Kej y
Rebecka Jalvemyr, Vicepresidenta, Solidaridad Suecia – América Latina