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El Negrito, primer municipio hondureño libre de explotación minera

hondurasEn ejercicio de su libre determinación, El Negrito Yoro, se convirtió en el primer municipio en Honduras auto-declarado territorio libre de explotación minera. Esta decisión fue tomada en un cabildo abierto a petición de más de 50 comunidades quienes a través de una caminata exigieron a la actual administración encabezada por el alcalde Delvin Salgado que firmara esta determinación.

«Estamos amenazados por compañías mineras interesadas en la explotación de nuestros bienes naturales. Todo esto motivado por la aprobación de la nueva Ley de Minería y la complicidad del Gobierno de la República; el Instituto Hondureño de Geología y Minas (Inhgeomin) y la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente (Serna), quienes son las que dan el certero golpe final legalizando y otorgando concesiones mineras por encima de la voluntad del pueblo», indicó Modesta Morales, presidenta de la Red de Juntas de Agua del sector de Guaymas.

«Con esta determinación enviamos un claro mensaje de rechazo a la explotación de la minería y la tala del bosque, rechazamos las tres solicitudes de concesiones mineras aprobadas, dos metálicas de oro y carbón y una no metálica, por SERNA, en nuestro municipio no queremos esta industria», dijo el alcalde Delvin Salgado.

«Hemos visto los desastres que se han hecho en otros lados y las consecuencias que está viviendo mucha gente en el Valle de Siria ubicado al norte de Francisco Morazán y en el municipio San Andrés, Copán, en el occidente hondureño», agregó el edil.

«Estamos en contra de aquello que venga a hacernos daño. Todas las fuentes de agua provienen de la parte alta de la montaña y es precisamente allí donde se quiere hacer la explotación minera», expresó el sacerdote Andrés Colindres, encargado de la parroquia de El Negrito, y dijo que como iglesia también se han sumado a la lucha organizada en contra de esta explotación.

Aprueban veda forestal

Tras la autorización del Instituto de Conservación Forestal (ICF) de cortar 200 árboles en la comunidad de Santa Elena, a pesar que están a menos de 80 metros de una fuente de agua y 400 árboles más ubicados en las aldeas El Cimarrón y La Coroza, las comunidades en cabildo abierto aprobaron una veda forestal. «La denuncia ya se interpuso en los diferentes entes, pues es preocupante para nosotros que se estén entregando los recursos naturales de un día para otro, en un mes el gobierno central y el Instituto de Conservación Forestal ha otorgado la explotación de 3 mil metros cúbicos de madera en la cordillera Mico Quemado. Por eso las comunidades y la alcaldía hemos acordado prohibir el corte de madera en toda esta zona», expresó Delvin Salgado.

Por su parte José Ángel Hernández, presidente de la Comisiòn municipal de la compra de microcuencas, indicò que la decisión de otorgar 10 años de veda es importante, ya que la desforestación está reduciendo la cantidad de agua que abastece al municipio.

El pueblo de El Negrito, que habita en 32 comunidades del sector de Guaymas, 18 comunidades de la montaña y todo el casco urbano ha formado una Comisión para la compra y protección de Microempresas (COMIC), además son las principales protagonistas en la declaratoria de «municipio libre de explotación minera y los 10 años de veda en el bosque».

La voz y fuerza del Pueblo

El proceso tomó fuerza el año anterior cuando las comunidades se organizaron y desarrollaron varias movilizaciones en contra la imposición de explotación minera. Las comunidades movilizadas y organizadas se unificaron en su diversidad con la consigna: «la voz del pueblo es la única que puede decidir sobre el presente y destino de sus territorios».

Desde entonces se comprometieron a defender sus tierras, cultivos y forma de vida ante cualquier imposición o proyecto que ponga en riesgo a las futuras generaciones. Estanislao Bustillo de la Red de Patronatos de Guaymas indicó que la minería no solo amenaza los recursos de El Negrito, sino también los de El Progreso y Santa Rita en el departamento de Yoro.

En el caso de la ciudad ribereña, las organizaciones aglutinadas en la Asociación Intermunicipal de Desarrollo y Vigilancia Social de Honduras (Aidevish), arrancó un compromiso de las autoridades municipales encabezadas por el alcalde Alexander López, de declarar al municipio libre de explotación minera.

Articulación de luchas

«Dentro de las estrategias de los mega-proyectos, las presas, hidroeléctricas y minas vienen juntas. Lo bueno es que poco a poco en Honduras y América Latina se está haciendo consciencia sobre la forma en que se les impone a las comunidades estos proyectos», manifestó el ambientalista Juan Mejía.

El proceso de resistencia y articulación de los pueblos en defensa de los bienes comunes lleva poco tiempo de construcción, sin embargo es un reto desarrollar una verdadera articulación para la puesta en marcha de lucha nacional unificada. «Lo ideal sería que se decrete al país como un territorio libre de explotación minera, pero eso se logrará en la medida en que el pueblo hondureño tome consciencia y exija que estos proyectos de la muerte no se instalen en sus territorios, por eso la decisión tomada por la población de El Negrito es aplaudible y debe servir de modelo para el resto de los municipios», concluyó el ambientalista.