La minera ya cuenta con luz verde por parte de las autoridades para iniciar la construcción del proyecto de cobre en Moquegua, pero también está avanzando en por lo menos otros cuatro emprendimientos.
El presidente peruano Ollanta Humala anunció hace unos meses una serie de medidas para mantener el crecimiento económico y promover la inversión privada. Dentro de estos planteamientos, el mandatario habló de hacer una revisión para poner en marcha los nuevos proyectos mineros con aprobación en sus Estudios de Impacto Ambiental (EIA); uno de los casos más emblemáticos (por lo menos hasta el cierre de esta edición) es el yacimiento cuprífero de Quellaveco, localizado en Moquegua, al sur del país.
“Anglo American está haciendo una revisión de las inversiones a nivel mundial producto de la baja en el precio de los metales. Tenemos confianza en que este proyecto (Quellaveco) va a continuar. Un factor importante es ver qué tan competitivo es el Perú para atraer inversiones. Anglo American nos ha señalado que el país tiene una posición importante”, ha afirmado el Jefe de Estado.
El interés por poner en marcha el proyecto tomó fuerza en el marco de la visita que efectuó al país el nuevo CEO de Anglo American, Mark Cutifani. El ejecutivo se reunió a mediados de mayo con el presidente del gobierno regional de Moquegua, Martín Vizcarra Cornejo, quien hizo hincapié sobre el compromiso que la minera tiene con la región “para que el proyecto no contamine el ambiente ni se use agua destinada para el consumo humano y agrícola”, uno de los temas claves para el otorgamiento de la licencia social a esta futura faena.
A la fecha Anglo American viene asumiendo unos 20 puntos concertados desde el año pasado a fin de obtener la aprobación comunitaria; la minera está comprometida a desembolsar unos S/. 1.000 millones (cerca de US$366 millones) a través de un fondo social.
Juan José Córdova, especialista en minería para la auditora KPMG, empresa que realizó apoyo contable a Anglo American Quellaveco (en normas internacionales de información financiera), refiere que las medidas anunciadas por el gobierno peruano buscan dar tranquilidad a las nuevas inversiones mineras.
“Puedes congelar un proyecto en la medida que no haya un avance, pero si se tiene un avance relativo tienes que seguir adelante; no tiene sentido paralizarlo, es un tema de costo/beneficio. El problema es con los grandes proyectos en etapa exploratoria o con estudios técnicos (ya listos) que todavía no se han iniciado”, manifiesta Córdova, precisando que en ocasiones estas iniciativas se dilatan en pos de mejores condiciones, existiendo también el riesgo que se suspendan.
En tanto, María Chappuis, ex directora de la Dirección de Minería del Perú, advierte que el CEO de Anglo American está visitando todas las unidades, revisando los costos de todos los proyectos en la región. “Quellaveco, es un emprendimiento de gran envergadura. Pero por la coyuntura de precios bajos de los metales y costos más altos, Anglo American estará evaluando todos los factores económicos para ver si comienza a construir. Dependiendo de este análisis se va a decidir la construcción, posiblemente para 2014. Pero nada está dicho”, puntualiza. Hasta el cierre de esta edición todavía no había luz verde por parte del directorio de la multinacional minera.
MÁS INICIATIVAS
Sin embargo, hablar solamente de Quellaveco es ver una parte del compromiso de inversión que Anglo American ya tiene apostado en Perú. Desde fines de 2012 y en lo que va de este año la compañía viene trabajando en unos cuatro emprendimientos exploratorios, a través de solicitudes de estudios ambientales como Declaraciones de Impacto Ambiental (DIA) y Estudios de Impacto Ambiental semidetallado (EIAsd).
Por un lado, la minera considera la exploración del proyecto Marion en Arequipa, prospecto de cobre con porcentaje de 0,5% que comprende una extensión de 135,2 hectáreas, y sobre el cual se harán unas 20 perforaciones. Los trabajos tienen una duración de 48 meses y un presupuesto de US$700.000.
Asimismo, en el departamento de Tacna ha solicitado una tercera modificatoria para su yacimiento de cobre en Chipispaya, que tiene un presupuesto por US$2.000.000 para realizar 18 perforaciones en la zona. Los trabajos se iniciaron en 2012 y las labores se extenderán por 18 meses.
Anglo American también está evaluando una ampliación de perforaciones para su proyecto de cobre Michiquillay (Cajamarca). La empresa ha presentado una solicitud de EIAsd al Ministerio de Energía y Minas (MEM) por medio de la cual se busca hacer un total de 5.640 perforaciones a través de 705 plataformas y cuyos trabajos tendrán una duración de 51 meses. La minera espera iniciar trabajos durante el segundo semestre de este año.
Esta solicitud exploratoria tiene un presupuesto de US$38 millones y modifica los trabajos antes planificados en el yacimiento cajamarquino, cuando en marzo de 2009 se aprobó hacer sondajes por 110.910 metros en un conjunto de 545 plataformas. La modificación del EIAsd contempla la construcción de 160 nuevas plataformas para perforación de tipo diamantina y de aire reverso, para hacer 113.794 metros adicionales en sondajes. Michiquillay es un proyecto cuya construcción se estima en US$700 millones y donde se planea producir 187.000 TM de cobre a 2016.
Muy próximo a Quellaveco se encuentra el proyecto de Pinco Pinco (Moquegua), donde esperan hacer un reconocimiento de contenidos de cobre en la zona y realizar unas 26 perforaciones en un lapso de 24 meses.
Asimismo, desde 2005 Anglo American tiene registrado ante el Ingemmet unos 416 derechos mineros, distribuidos en cuatro personas jurídicas: Anglo American Exploration Peru, Anglo American Michiquillay, Anglo American Peru y Anglo American Quellaveco. Estos denuncios están distribuidos entre los departamentos de Ayacucho, Arequipa, Moquegua, Cusco y Apurimac (sur peruano), Lima y Pasco (zona centro) y La Libertad y Cajamarca (norte del país), lo que habla del atractivo que ofrece el Perú para esta minera y las oportunidades de potenciales nuevos desarrollos.