Por Lionel Varela y David Pavez
Ayer, por primera vez desde iniciada una huelga de hambre el 27 de septiembre pasado, un grupo de diputados visitó a los 11 manifestantes del pueblo de Caimanes, en el Choapa, para conocer de manera directa sus inquietudes y su estado de salud. Ello, luego de 58 días sin recibir alimentos y de que se rompiera el diálogo entre sus representantes y la minera Los Pelambres.
Los comuneros adoptaron esta medida para protestar en contra de las operaciones del tranque de relaves El Mauro, que la minera construyó a unos 12 kilómetros de ese poblado, ya que acusan un grave impacto ambiental en todo el valle donde se localiza el pueblo, situación que es descartada por la empresa.
Por la mañana, los parlamentarios visitaron Caimanes, donde sostuvieron encuentros con las juntas de vecinos del sector. Posteriormente se dirigieron hasta la sede del Colegio de Profesores de Illapel, donde se está llevando a cabo la acción de protesta.
Allí, Alejandra Sepúlveda (PRI), presidenta de la Cámara Baja, explicó que efectuó un llamado al ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, para que interceda en este conflicto, gestiones que habrían sido bien acogidas.
“Él ayudará a hacer un llamado a la empresa para que pueda sentarse con las organizaciones que representan a la comunidad de Caimanes”, aseveró.
De igual manera, le solicitó al Gobierno que destine personal para que facilite el diálogo y para que monitoree una eventual negociación.
Una opinión similar entregó el diputado Luis Lemus, quien recalcó que “es la hora de que el Gobierno debiera estar interviniendo”, algo que a su juicio debió ocurrir hace tiempo a través de la instalación de una mesa de diálogo, ya que “este tema es más complejo que decir que es un movimiento por plata o por situaciones de otra naturaleza. Este es un problema ambiental”, acotó.
El vocero de los huelguistas, Cristian Flores, valoró la comitiva de los parlamentarios, que también incluyó al diputado Marcelo Díaz (PS), debido a que considera que el asunto es “absolutamente grave”, porque está trascendiendo del aspecto ambiental a uno social. “Creo que hemos dado una clara señal de que este conflicto se dará a conocer al mundo”, aseveró.
En tanto, Ignacio Cruz, gerente general de Los Pelambres, ha señalado que la compañía está dispuesta a dialogar con la comunidad y con los huelguistas, pero sin intermediarios, a quienes acusan de perseguir intereses económicos.
SITUACION. En la ocasión, el diputado Enrique Accorsi (PPD), quien es médico, efectuó un chequeo de las condiciones físicas de los huelguistas, determinando que de los 11 vecinos, 4 se encuentran en un estado complicado.
El diputado Luis Lemus, sobre la base del informe respectivo, explicó que “estamos en una situación límite”, razón por la cual “no se puede estar jugando con la vida”, aunque reconoció que los huelguistas “son personas de mucha convicción”.