Solange Bordones, presidenta y vocera de la comunidad indígena de Placeta, pidió a los parlamentarios que visitarán la zona este lunes que se realicen actividades sanitarias en el lugar, debido a la contaminación de las aguas por la presencia del proyecto minero.
SANTIAGO.- Solange Bordones Cartagena, presidenta y vocera de la comunidad diaguita de Placeta, del sector de Huasco Alto, pidió que en la visita que harán diputados el 22 de abril a la zona, consideren organizar un operativo médico para aclarar la serie de patologías que sufren los habitantes que consumen el agua contaminada por los residuos del paralizado proyecto Pascua Lama.
La dirigente, madre de cuatro niños, señaló que las siete comunidades diaguitas que lograron la orden de no innovar para la explotación de oro de la empresa canadiense, esperan conocer el origen de algunas enfermedades que padecen.
Bordones señaló que «sólo sé que hay gente, niños y parte del tercio de adultos mayores de 80 años, con quistes, alergias y muchas otras enfermedades como dolores de cabeza, molestias estomacales, cáncer, manchas en la piel y cardíacos», y añadió que desconocen las reales dimensiones de estas patologías.
Solange Bordones explicó que en la cuenca del Huasco, donde cultivan hortalizas, uvas, higos, tomates, paltas, naranjas, limones y crianza de animales, los habitantes además sufren del sistema nervioso, padecen stress y depresión, a raíz de la pérdida en dinero y tiempo, por la disminución de las cosechas y a causa de la contaminación del agua.
La representante indígena aclaró que «que esta lucha la hemos dado solos, y golpeamos muchas puertas denunciando lo que nos afecta y no hubo ninguna organización, político, ni ONG que nos brindaran el apoyo».
Además confirmó que «la mayoría de las comunidades, ubicadas a diferentes distancias del proyecto Pascua Lama, acceden a los cauces naturales del agua, hoy contaminados por la mina, de la cual hasta ahora, no hemos recibido compensación ni indemnización alguna. Nosotros esperamos que el caso llegue a la Corte Suprema, se haga justicia y cierren el proyecto».
La vocera aseveró que el tema laboral, por el problema hídrico en la zona, es crítico en la comunidades diaguitas —de 50 habitantes cada una, aproximadamente—, como en los casos de la mencionada Huasco Alto, Yastai de Juntas Valeriano o Pacul de La Arena, entre otras.