El sector residencial y agrícola de Valle Alegre de la comuna de Quintero fue contaminado por elementos tóxicos provenientes de la Minera Montecarmelo. Episodio que se suma a otros similares, que según los afectados (y demandantes), desde el año 2006 vienen ocurriendo en Puchuncaví. Los vecinos piden a Fiscalía abrir causa contra Codelco Ventanas por el botadero y la amenaza de contaminación de aguas.
La intervención de la Seremi de Salud, de Medio Ambiente y de la Superintendencia de Medio Ambiente, solicitará uno de los afectados por el episodio de derrame de ácido sulfúrico ocurrido ayer en la localidad de Valle Alegre, comuna de Quintero, desechos que provendrían de la Minera Montecarmelo, planta que se ocupa del tratamiento por vía hidrometalúrgica de los residuos tóxicos, denominados “Polvos Pepa o de Fundición”, provenientes de Codelco Ventanas.
Las primeras denuncias datan del año 2006, cuando autoridades sectoriales de los distintos gobiernos otorgaron autorizaciones ambientales para el funcionamiento de una empresa minera que no cumple con las mínimas e indispensables medidas de seguridad para evitar que sus piscinas de ácido sulfúrico percolen a los predios vecinos.
Hoy las piscinas derechamente se rebalsaron contaminando con cientos de litros de ácido una importante cuenca de Puchuncaví. Así lo dio a conocer a ANIN.CL el abogado Vladimir Mondaca, en calidad de patrocinante de Manuel Vega Puelles, uno de los propietarios afectados, junto con indicar que recurrirán a los Tribunales Ambientales para demandar a la Minera Montecarmelo, ubicada en el sector de Los Maitenes, por el episodio que afectó gravemente suelo agrícola y residencial, además de constituir un peligro para la seguridad humana y un daño irreparable al medio ambiente.
El abogado Mondaca explicó que “esta situación se viene repitiendo por años, las primeras denuncias son del año 2006 y las autoridades sectoriales de los distintos gobiernos ha otorgado autorizaciones ambientales para el funcionamiento de una empresa minera que no cumple con las mínimas e indispensables medidas de seguridad para evitar que sus piscinas de ácido sulfúrico percolen a los predios vecinos. Situación aún más grave el día de hoy cuando las piscinas derechamente se rebalsaron contaminando con cientos de litros de ácido una importante cuenca de Puchuncaví”.
El rebasamiento de las piscinas contenedoras habría ocasionado el derrame de ácido sulfúrico. Agregó que “Los afectados no es sólo mi representado, sino un conjunto de pequeños propietarios agrícolas que se encuentran abusados en su derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación”.