9 de diciembre del 2011
Críticas al proceso de debida diligencia ambiental, social y de derechos humanos de Export
Development Canada y el Export-Import Bank de los Estados Unidos.
Sr. James Flaherty
Ministro de Finanza
Re:
Sr. John Baird
Ministro de Relaciones Exteriores
Sra. Hélène Laverdière
Crítica de la Oposición Oficial, Relaciones Exteriores
Sr. Peter Julian
Crítico de la Oposicion Oficial, Finanza
Scott Brison
Crítico, Finanza
Dominic LeBlanc
Crítico, Relaciones Exteriores
Sr. Stephen S. Poloz
Presidente
Export Development Canada
Estimados Señores y Señoras:
Escribimos para expresar nuestra gran preocupación sobre el proceso de debida diligencia
ambiental y social del Export-Import Bank y Export Development Canada, el cual, en los
hechos, carece de transparencia, neutralidad y credibilidad.
Somos organizaciones locales comunitarias, redes de la sociedad civil y organizaciones no-
gubernamentales de Chile y Argentina, afectadas por el proyecto minero aurífero binacional
Pascua Lama, el cual está ubicado en la frontera entre nuestros países, que pertenece a la
empresa minera canadiense Barrick Gold. Pascua Lama se encuentra en la cordillera de los
Andes entre glaciares, a una altura de más de 4,500 metros.
Barrick ha solicitado financiamiento público para el proyecto desde el Export-Import Bank del
gobierno estadounidense (Ex-Im Bank) y Export Development Canada (EDC) del gobierno
canadiense. Ambas instituciones públicas son ‘agencias de crédito para la exportación’ que
tienen la obligación de seguir políticas ambientales, sociales y de derechos humanos.
Casualmente, hace tres semanas, nos enteramos de que el personal de Ex-Im Bank y EDC estaba
de visita en Chile y Argentina. No recibimos con antelación información acerca de los objetivos
de la visita, la composición del equipo ni su itinerario. Las personas que fueron contactadas para entrevistas recibieron antecedentes superficiales con respecto a la naturaleza de estas agencias
extranjeras y el propósito de la visita de esta comisión. Esto motivó, por ejemplo, que un
sacerdote del Valle del Huasco se negara a reunirse con el personal de los bancos porque no
entendía quienes se le acercaban ni por qué, otro dirigente local fue contactado por personal de
Barrick y citado a las oficinas de la empresa en Vallenar, el dirigente se negó y exigió reunirse
en un lugar público e independiente.
Este método incoherente de realizar la debida diligencia es asombroso, más aún considerando
que el 10 de mayo del 2010, muchos de los firmantes chilenos de esta carta le escribieron a Fred
Hochberg, Presidente de Ex-Im Bank, con respecto a la solicitud de Barrick para el
financiamiento. En esa oportunidad se expresaron las inquietudes serias sobre los impactos
ambientales, sociales y de derechos humanos que podrían ocurrir de llevarse a cabo el proyecto,
y se dio también cuenta de los impactos ya generados, además se ofreció proveer de mayor
información y se urgió al banco para que visitara Chile. El 29 de junio del 2010, James
Mahoney respondió a la carta, explicando que “[El Sr. Hochberg] pidió que prestemos particular
atención a los asuntos que Uds. identificaron cuando comencemos nuestra revisión de debida
diligencia del proyecto.” El Sr. Mahoney continua: ‘apreciamos los insumos que nos proveyeron
y agradeceremos el envío de mayor información sobre los impactos medioambientales y sociales
del proyecto Pascua Lama que podrían proveer en el transcurso de la revisión de debida
diligencia del Ex-Im Bank con respecto a la solicitud de financiamiento para el proyecto.”
A pesar de estas expresiones de interés, ninguna de las organizaciones chilenas que firmaron la
carta del 2010 fue contactada por el personal de Ex-Im Bank o EDC durante su viaje a
Sudamérica. El Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA) se comunicó
con ExIm Bank cuando se enteró, por terceros, de su presencia en Chile. Cuando el banco
respondió, las restricciones de tiempo imposibilitaron una reunión con los firmantes de la carta
del 2010.
El propósito central de realizar actividades de debida diligencia en el terreno es de permitir que
las instituciones financieras públicas evalúen la suficiencia y veracidad de la información
entregada por el cliente respectivo. Para ser creíble, este proceso requiere de independencia de la
empresa, pues es evidente que personas que están negativamente impactadas por una inversión
pueden dudar en compartir información con las instituciones financieras si creen que estas
carecen de neutralidad. Por eso sorprende que las agencias hayan pedido a la empresa Barrick
que arreglara las entrevistas para el personal de Ex-Im Bank y EDC, y que además, como ocurrió
en al menos dos casos, que la empresa estuviera presente mientras se desarrollaban las
entrevistas.
A estas irregularidades, que desacreditan la seriedad con que se está desarrollando este proceso,
cabe agregar que, por lo menos a un entrevistado, se le exigió que llevara su propio traductor a
una reunión con el personal de Ex-Im Bank.
Tanto EDC como Ex-Im Bank afirman que aplican los Estándares de Desempeño del Banco
Mundial a sus clientes del sector privado. Sin embargo, el proceso deficiente de debida diligencia
que el personal de EDC y Ex-Im Bank realizó recién en nuestros países no permitirá que estas
agencias evalúen el cumplimiento de Barrick con aquellos estándares, particularmente con
respecto a temas como el relacionamiento con las comunidades, el apoyo de las comunidades
locales al proyecto y el consentimiento libre, previo e informado de los pueblos indígenas
afectados. Este modo de operar ahonda la sensación de vulnerabilidad de las comunidades y
pone en riesgo la credibilidad de EDC y Ex-Im Bank.
Reiteramos nuestro interés de participar en un proceso de debida diligencia creíble con respecto
al financiamiento público de Pascua Lama, lo cual necesariamente debiera incluir una consulta
transparente y significativa a las comunidades afectadas y actores interesados de la sociedad
civil de Chile y Argentina. Esperamos una rápida respuesta de EDC y Ex-Im Bank con respecto
a sus planes de volver a Sudamérica.
Atte.
Chile
Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA)
Agrupación Ecológica Atacama Limpio – Vallenar, Región de Atacama
Alianza por una Mejor Calidad de Vida RAP-AL
Centro Cultural Social y del Medio Ambiente Ceibo – Maipú, RM
Centro Ecoceanos
Consejo de Defensa del Valle del Huasco- Región de Atacama
Corporación de Defensa y Promoción de los Derechos del Pueblo, CODEPU-Chile
Acción por los Cisnes – Valdivia – Región de los Ríos
Centro Ecoceanos
Liga Ciudadana de Consumidores
Mapuexpress
Radio del Mar
La Coalición Ecuménica por el Cuidado de la Creación
Centro Ecuménico Diego de Medellín
Departamento de Paz Justicia e Integridad de la Creación, CONFERRE-Chile
El Comité de Defensa y Recuperación del Cobre
ONG Recuperemos el Cobre de Chile
Feministas Autónomas – Memoria Feminista
Organización Ciudadana Ambiental de Salamanca, OCAS – Región de Coquimbo
Oficina de Justicia, Paz e Integridad de la Creación. Sociedad Misionera de San Columbano
Pastoral Salvaguarda de la Creación – Alto del Carmen, Valle del Huasco
Red Ciudadana por la Defensa de la Precordillera de Santiago, RM Chile
Argentina
Frente Cívico por la Vida – San Juan
Inti Chuteh – San Juan
Conciencia Solidaria – Buenos Aires
United States