13 de julio de 2012
Acusan actitud complaciente de las autoridades, pese al daño ambiental
La organización “Tetela hacia el futuro” comprobó con base en documentos, que la empresa Minera FRISCO del Grupo Carso ha estado funcionando fuera de la ley en Puebla, pues la SEMARNAT recibió apenas el 29 de junio pasado la solicitud de la firma para obtener el dictamen de Impacto Ambiental que le permita realizar trabajos de exploración.
En un comunicado, explican que la solicitud es sólo un informe preventivo, elaborado por el biólogo del Instituto politécnico Nacional Alfredo Patiño Siciliano, para la Exploración Minera Espejeras ante la Dirección General de Impacto Ambiental, instancia que definirá en un plazo de 20 días si es necesario que la empresa presente una manifestación de impacto ambiental.
Integrantes de la organización que está en contra del funcionamiento de la Minera, el informe tiene proyectadas un número de 43 barrenaciones o apertura de caminos, supuestamente avalados por la Norma 120: 22 son en caminos existentes, 8 en caminos por rehabilitar y 13 en caminos “que serán construidos”.
“La realidad es que, la empresa lleva varios meses trabajando (desde mayo), haciendo barrenos, abriendo brechas, talando árboles y hasta el día 10 de Julio de 2012 no había pruebas de trámites ante las delegaciones correspondientes, a la fecha, han hecho cerca de 80 barrenaciones, casi el doble de lo estipulado en su estudio”.
Insistieron en que la norma establece la obligación de notificar a la Comisión Nacional del Agua, sobre el inicio de cualquier actividad de exploración cuando esta se desarrolla sobre mantos acuíferos, ya que, “de concretarse el proyecto minero de La Cañada, se envenenaría el río que abastece a la ciudad de Tetela, además de que disminuiría su caudal de forma dramática y se contaminaría el aire y suelo de la región. El problema es mayor si tomamos en cuenta que se trata de la Cuenca del Río Papaloteno que finalmente se une a la Cuenca del Río Zempoala y Tecolutla”.
La organización Tetela hacia el futuro ha denunciado que la explotación minera del Grupo Carso se realiza a cielo abierto, destruyendo árboles, tierra, animales, y altera los ciclos de lluvia, además de que utiliza grandes cantidades de agua y produce desechos que contaminan las fuentes de agua en detrimento del bienestar de la población.
Lamentaron que la minera FRISCO inicie sus actividades pasando por alto los requerimientos legales ambientales, amparados por un permiso por el cual pagaron solamente la cantidad de 25 mil 382.00 pesos.
Ante las pruebas recabadas, exigieron a las autoridades dejar la actitud pasiva y detener el proyecto de exploración de manera inmediata.