Con el aval de unas 24.480 firmas, personas organizadas en la campaña “No al golpe de Rio Tinto Alcan” entregaron ayer al Ejecutivo y al Congreso un petitorio para el cese de las negociaciones entre el Gobierno y la empresa multinacional, sobre la que hacen fuertes denuncias.
La ingeniera Mercedes Canese, exviceministra de Energía, fue una de las que encabezó la entrega del petitorio, con las 24.480 firmas, dirigido al presidente Federico Franco y una copia, luego, a Jorge Oviedo Matto, presidente de la Cámara de Senadores.
En la nota, señalan que sobre la multinacional Rio Tinto Alcan, dedicada a la producción de aluminio, pesan graves denuncias y condenas por violación de derechos humanos, políticos, laborales y ambientales en Canadá, Estados Unidos, Papúa Nueva Guinea y otros países.
Canese señaló también que rechazan que el gobierno esté negociando en forma poco transparente, “a espaldas de la ciudadanía”, dado que eso viola los artículos 1 y 2 de la Constitución en el sentido que estamos en un régimen de democracia representativa, participativa y pluralista.
La nota expresa también que la instalación de esta empresa pone en riesgo la posibilidad de desarrollo del país, ya que en 20 años no se dispondrá de excedentes energéticos para nuevos consumidores dadas las previsiones de consumo de energía.
Igualmente, advierten que se pone en riesgo la biodiversidad y la vida al negar los posibles impactos ambientales que provocará la instalación y al aceptar la inversión sin estudios serios ni condiciones para la aplicación de reglas ambientales.
Otro punto denunciado por los ciudadanos organizados es que se pretende subsidiar la energía con un precio de US$ 45/MWh o incluso menor, cuando que el precio actual de la energía es de US$ 60/MWh, incluyendo costos de transmisión que va en continuo aumento y que es pagado por la industria nacional.
Por otro lado, señalan que los beneficios y retornos de la inversión para el Estado serán marginales y no alcanzarán ni siquiera el 7% del valor de las exportaciones, según información del Ministerio de Industria y Comercio, por lo cual no se puede hablar de desarrollo nacional cuando una sola empresa privada será beneficiada.
Apuntan que la carta de intención de industrias que vendrían al parque industrial no pueden ser elementos de negociación por el carácter hipotético de estas que no brindan garantía alguna.
Solicitan, por tanto, cesar las negociaciones con la empresa Rio Tinto Alcan y, en su lugar iniciar un plan concertado de industrialización con todos los sectores de la población.
Está próximo a firmarse
Aunque no existe información transparente sobre los plazos, según denuncian las organizaciones ciudadanas, el Gobierno estaría firmando el 14 de diciembre próximo la carta de intención y concluir en marzo la firma del contrato, para de esta manera, cuando se reinicien las sesiones del Congreso en marzo de 2013, el Poder Ejecutivo remita el documento para su aprobación. Las organizaciones que piden cesar la negociación con Rio Tinto Alcan señalan que una inversión que tendrá un impacto tan importante como la que se pretende instalar debe ser objeto de un referéndum vinculante, en los términos que establece la Constitución porque, en caso contrario, se estaría avasallando los derechos ciudadanos.