Comunidades miran con recelo medida de recaraterización del daño mandatada por SMA al SAG y denuncian que esta acción va de la mano con las aspiraciones de Barrick.
Para las comunidades del Valle del Huasco, de manera inexplicable e ilógica, el pasado 7 de mayo la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) decidió realizar peritajes respecto del daño ambiental a vegas o humedales altoandinos no susceptible de reparación ocasionado por la empresa en el verano de 2013, el que fuera sancionado como infracción gravísima en anterior resolución (477), proceso reclamado y luego impugnado por el Segundo Tribunal Ambiental que por mandato del mismo se encuentra hoy en proceso de reapertura y reponderación.
Las vegas o humedales altoandinos son un ecosistema extremadamente frágil que tiene funciones de purificación de las aguas y es sostenedor de la biodiversidad, entre ella especies vulnerables y en peligro de extinción.
Si bien el Tribunal mandato corregir una serie de situaciones por carecer de ilegalidad LA Resolución 477, tal como expresan las comunidades: “El Tribunal Ambiental en ningún momento puso en tela de juicio el Daño Ambiental no susceptible de reparación, menos considero la idea de rebajar su calidad de irreparable”. Pese a esto, la SMA por medio de Resolución 755 solicita al SAG de la Región de Atacama que conteste un cuestionario y brinde información técnica y opinión con el fin de : “(…)caracterizar de mejor forma la significancia del menoscabo, pérdida y/o detrimento inferido en las vegas, alcanzadas por el movimiento de tierra ocasionado por las aguas que cayeron desde la Obra de salida de Canal Perimetral Norte Inferior, de forma de acreditar o descartar el daño ambiental de carácter irreparable (…)”.
Las comunidades ven con mucha desconfianza esta decisión y temen presiones otra vez de Barrick al gobierno, ya que esta medida abre la posibilidad, ilegítima según el dictamen del fallo, de una revaluación de un daño constatado y evaluado de manera homogénea en su gravedad por todos los servicios fiscalizadores inclusive la SMA, conformándose justamente el escenario buscado por Barrick que da cabida a su torcida intención de rebajar la clasificación de sus infracciones, sobre todo de aquellas gravísimas, que está contenida como petición en sus alegaciones entregadas por Barrick a la SMA hace dos semanas.
Es por esto que las comunidades decidieron expresarle su preocupación al SAG y le requirieron al organismo de manera expresa que continúe cumpliendo la función que versa en su misión como entidad que es ser protectores de la flora, fauna, aguas, suelo y aire así como de las actividades agrícolas y agropecuarias y que por ende no cambien la gravedad del daño ya constatada en el 2013 y que incluso puedan aumentar la gravedad del impacto al tomar en cuenta el efecto negativo en las vegas tras la contaminación de las aguas con drenaje ácido ya comprobado y evaluar y analizar más impactos asociados a ésta pérdida como son por ejemplo de las funciones sociales fundamentales que prestan estas vegas como son los de purificar el agua y por ende la afectación a la salud, a la agricultura y criancería.
También le dejaron claro al SAG que en todo este proceso de defensa, que lleva 15 años, se ha aprendido mucho de la naturaleza y la interdependencia con el medio ambiente. Así es como hoy saben que hay una dependencia estrecha entre la salud del agua y la sobrevivencia de las vegas, en el fondo que los sostenedores de la calidad de las aguas y por ende sostenedores de la biodiversidad. Además demostraron desde el punto de vista técnico y legal, mediante citas en el documento entregado, que las vegas andinas como humedales andinos están protegidos institucionalmente, que se coincide en su fragilidad y que no son susceptibles de reparación, y que además contienen una serie de fauna y flora vulnerable en protección como lo es la llareta que demora 50 años en crecer 15 centímetros. Si se tiene en cuenta que según la misma empresa acepto que fueron alrededor de 1,8 ha destruidos y dentro de ellas 1800 llaretas el daño es irreparable.
Finalmente dijeron al Director del SAG que seguirán muy pendientes del proceso y que “Por todo esto y por los contundentes fundamentos técnicos y científicos que ya sustentaron la clasificación de daño ambiental no susceptible de reparación en los análisis anteriores en la materia es que no comprenderemos un cambio de clasificación del daño ambiental. Sabemos su valor y que el daño es irreparable, es por eso que les pedimos sigan su directriz al contestar sobre todo el punto que habla de posible recuperabilidad y resilencia del ecosistema, esperamos no tener la decepción de leer de sus documentos que han cambiado su visión de dicho impacto a un daño ambiental susceptible de reparación”.
La acción convocada por la Asamblea del Agua del Guasco Alto, estuvo acompañada de difusión de los incumplimientos de la minera en el Valle del Huasco en la Plaza de Armas de Vallenar y de una espontanea marcha acompañada de consignas vociferadas enérgicamente como “Agua si oro no” y “Agua limpia vida sana no a Pascua Lama”, que entrego el documento en las dependencias del SAG y que dio a conocer la razón de la acción a su Director en representación de los más de 90 vecinos que son parte de la acción judicial que a su vez representan el sentir de toda la cuenca del Valle del Huasco.
ASAMBLEA POR EL AGUA DEL GUASCO ALTO
Comité Ecológico y Cultural Esperanza de Vida – Unidos por el Agua – Comunidad Diaguita Los Tambos – Comunidad Diaguita Patay Co – Pastoral del Cuidado de la Creación, Iglesia Evangélica y Presbiteriana – Asociación de Pequeños Agricultores del Valle de San Félix (AG) – Pajareteros Alto del Carmen – Pastoral Salvaguarda de la Creación, Departamento de Justicia y Paz, Obispado de Copiapó – Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales- Consejo de Defensa del Valle del Huasco – Junta de Vecinos de Piedras Juntas – Comunidad Indígena Hermandad Kai Co.