Este artículo pretende responder inquietudes técnicas acerca de la minería del cobre en la República Argentina y explicar por qué la minería del metal rojo no se ha desarrollado como se preveía, después de la puesta en marcha de Bajo de la Alumbrera en 1996.
Por Nivaldo Rojas, presidente de Rojas & Asociados Consultores Mineros.
La búsqueda mineral moderna, y en particular la exploración de cobre en la Argentina, se inician en 1940 con la creación de la Dirección General de Fabricaciones Militares (DGFM). Este organismo gubernamental desarrolla ya en la década de 1960-1970 planes de búsqueda que conducen, además, a algunas empresas internacionales a identificar depósitos de minerales de cobre, como Bajo de La Alumbrera y Mi Vida (hoy Agua Rica) en Catamarca y El Pachón en San Juan. Sin embargo, a partir de ese momento la minería argentina entra en un letargo (1973 a 1990), donde solo unos pocos emprendimientos de consideración y de tipo privado-internacional se desarrollan tímidamente en las provincias del noroeste del país.
No obstante, como resultado de un plan gubernamental de atracción de inversiones eficiente y de la competente y versátil operatividad de empresas junior, empiezan a conocerse los primeros frutos de una intensa exploración de riesgo en las provincias de Jujuy, Salta, Catamarca, La Rioja, San Juan, San Luis, Mendoza, La Pampa, Rio Negro, Chubut y Santa Cruz. A partir de 1996 se activan algunos emprendimientos productivos mayores, que se inician con La Alumbrera (cobre y oro, 1996), Cerro Vanguardia (oro y plata, 1997) y Fénix (litio y potasio, 1997) y que han permitido desarrollar varios emprendimientos productivos de minerales metálicos en Jujuy, Catamarca, San Juan y Santa Cruz. Argentina empieza entonces a figurar entre los países productores de cobre, oro, plata y zinc.
La primera mina metálica que se abre en la Argentina como consecuencia de la aplicación de la Ley 24.196 de inversiones mineras (aprobada en 1992), es Bajo de la Alumbrera; única operación productiva de cobre que se explota hoy en el país. Durante los últimos 17 años han entrado en operación unas 15 minas metálicas, principalmente de metales preciosos, pero no se han abierto nuevas faenas de cobre, a pesar de haberse identificado importantes recursos y reservas del mineral rojo.
PRODUCCION CUPRÍFERA
Con una sola mina en operación, y con una producción anual estabilizada hasta la fecha en alrededor 160.000 tcf, Argentina ocupa el lugar número 16 entre los productores de cobre.
No obstante, el esfuerzo de varias empresas en los últimos 15-20 años ha permitido delimitar proyectos de cobre de categoría mundial, con un estado de conocimiento y recursos minerales tales que, en condiciones de mercado y políticas favorables, podrían evolucionar a operaciones de producción en un relativo corto plazo.
Para el presente análisis se incluyen solo depósitos con recursos minerales sobre 800.000 ton de cobre contenido (equivalente a un recurso de 160 millones de ton de 0.5%Cu), respaldadas por algún estudio, sea este de NI 43.101, JORQ o ejercicios previos considerados como aceptables por la comunidad geológica y minera. Para los efectos de estos ensayos técnicos y económicos, se consideran de la misma trascendencia las categorías de reservas probadas y probables, los recursos medidos e indicados, y los recursos inferidos.
Se asumen también, varios considerandos, como: i) leyes de cobre equivalentes para los recursos que indican además contenidos de oro, molibdeno y/o plata, utilizando valores actuales de US$3,50 por libra de cobre; de US$21 por libra de molibdeno y de US$1.500 la onza troy de oro y US$30 por onza troy de plata; ii) se asume que la totalidad del recurso mineral señalado es efectivamente extraíble durante la vida de la mina; iii) se considera una recuperación en proceso mineralúrgico del 80% del recurso; iv) se asume un tonelaje de procesamiento de acuerdo a la importancia de los recursos disponibles; v) se adelanta una inversión en construcción comparable a emprendimientos internacionales; vi) se propone un valor del precio de cobre proyectado de US$3,20 (base 2013) durante la vida útil de la operación; vii) se postula un costo de producción equivalente a US$1,20 por libra de cobre recuperada; viii) se realiza un breve análisis de la implicancia de los impuestos en las operaciones mineras considerando datos de un 52% sobre ganancias . Finalmente se realiza un pronóstico asignando una estimación de la fecha de puesta en operación de cada depósito mineral.
Los depósitos que presentan los mayores recursos de cobre son El Pachón, Taca Taca y Agua Rica. Recursos de nivel intermedio, aunque considerables, se observan en Los Azules, José María y El Altar, mientras que en un nivel más moderado se encuentran las reservas residuales de La Alumbrera, recursos en desarrollo en Rio Grande, los recursos y reservas de San Jorge, los recursos sin certificación moderna de Paramillos y de Famatina.
Las provincias mejor posicionadas al momento de este análisis son: San Juan, Salta y Catamarca, que por otra parte sostienen, a lo largo del tiempo y a pesar de las dificultades, una posición decididamente favorable a la minería.
De acuerdo con las actuales circunstancias políticas, técnicas, de condicionamiento medio ambiental y de tiempo de construcción, se prevé que el primer depósito en iniciar operaciones debiera ser Agua Rica, que reemplazaría plenamente a La Alumbrera. Debería seguirle San Jorge junto con Río Grande, antes de fines de 2016. Se les sumarían en relativo corto plazo Los Azules, El Altar, Taca Taca, hacia 2019 y 2020. Ya más alejados en un horizonte que se cierra para este ejercicio hacia 2025, estarían operando El Pachón, Jose María, Famatina y probablemente Paramillos.
INTERROGANTES
¿Por qué no se ha desarrollado la minería del cobre en Argentina?
El trabajo de exploración y certificación de recursos en los yacimientos de pórfidos de cobre aquí considerados necesita de mayores tiempos y recursos que los yacimientos de metales preciosos. Asimismo, las inversiones demandadas para desarrollar y llevar a la etapa de producción un proyecto mayor de cobre implican cifras muy por sobre los valores que se requiere invertir en los yacimientos de oro y plata en vetas.
Por otra parte, se considera necesario reforzar las políticas de Estado para asegurar que los jugadores de ligas mayores del cobre, como BHP-Billiton, Rio Tinto, Xstrata Copper, Freeport Mc-MoRan, Teck, Southern Copper, Antofagasta Minerals y Vale, entre otros, regresen o se consoliden en el país y desarrollen negocios con las empresas locales y aquellas compañías extranjeras que permanecen en Argentina. La respuesta, preliminar a la luz de la actitud presente de los inversores, es que existe temor y desconfianza que debiera revertirse a corto plazo.
¿Cuál es el conocimiento del potencial geológico y qué importancia tiene la exploración de los depósitos de cobre argentinos?
Está claro que la exploración de cobre realizada en Argentina es bastante menor que la realizada en Chile y Perú. No obstante, en el estado actual de las artes, existe un conocimiento geológico de yacencia, distribución mineral y de extensión de los recursos bastante acabado, como para seguir identificando nuevos yacimientos, especialmente en terrenos cubiertos o profundos.
¿Qué temas son trascendentes en este momento para la el desarrollo pleno de la minería argentina?
• Desactivar la aplicación de leyes inconstitucionales, como la 7722 de Mendoza que mantiene paralizados proyectos totalmente viables, como San Jorge en el valle de Uspallata y que impidió la exploración de Papagallos en el Valle de Uco.
• Se propone terminar con los apetitos impositivos crecientes de provincias como Chubut, que luego de posponer una ley anti-minera espera negociar salidas impositivas excesivas y fuera de contexto, que en lugar de favorecer el desarrollo minero impide y posterga las inversiones. Esta presión impositiva del fisco provincial se ha tratado de implementar en Santa Cruz, sin obtener los resultados esperados, hasta ahora.
• Se sugiere trabajar en el mejoramiento de la voluntad y decisión en fomentar la actividad minera por parte de la dirigencia política de provincias como La Rioja, en donde grupos ambientalistas menores mantienen en jaque desde hace cinco años una política gubernamental bien inspirada, y posterga el desarrollo tanto de uno de los prospectos más atractivos en la Argentina (Famatina) como el de una comunidad postergada.
A pesar de todo, la minería argentina y en especial la maquinaria de la exploración de cobre, avanza clara y decididamente en provincias como San Juan, Santa Cruz, Catamarca y Salta.
Durante la edición 2013 de PDAC en Toronto, los ejecutivos de algunas de las empresas que han invertido y que operan en Argentina se manifestaron preocupados por medidas de política adoptadas por el Gobierno Nacional, principalmente por las restricciones a la transferencia de ganancias al exterior y por la creciente inflación que dispara los costos locales. Sin embargo, desde el gobierno afirman que son medidas transitorias, que buscan controlar los flujos de fondos y los intereses nacionales, y que están flexibilizándose.
Si bien es cierto hay empresas que están frenando proyectos en Argentina, como Vale, también existen otras como Yamana y Barrick que siguen empujando iniciativas importantes.
El mensaje final es claro: Si la Argentina desea incluir a la minería en su panorama económico productivo, deberá afinar las condiciones para que se puedan desarrollar los yacimientos de cobre.