Reuters – 08 de enero 10
Por Ayesha Rascoe
Un grupo de científicos instó al Gobierno de Estados Unidos a dejar de emitir permisos de explotación minera de carbón en las cimas de las montañas, al afirmar que esa práctica está dañando el ambiente y la salud humana.
Una revisión de estudios publicados demostró que ese tipo de minería, que representa el 10 por ciento de la producción de carbón en Estados Unidos, provoca un daño ambiental irreparable, señaló el grupo en la revista Science.
La revisión revela también que la minería de extracción en la cima de la montaña expone a los habitantes locales a un aumento del riesgo de sufrir enfermedades graves.
«Sus impactos son de larga duración y no existen evidencias de que alguna práctica de mitigación revierta el daño causado», dijo la autora principal del estudio, Margaret Palmer, de la University of Maryland.
Los científicos opinaron que no se deberían emitir más permisos «a menos que nuevos métodos, sujetos a una rigurosa revisión de pares, demuestren resolver esos problemas».
Un vocero de la industria minera descalificó el informe por ser «una declaración de defensa» y dijo que acabar con la minería de montaña provocaría pérdidas de puestos de trabajo y aumento de los precios de la electricidad.
Más de la mitad de la energía en Estados Unidos deriva del carbón.
En la minería de extracción en la cima de las montañas se vuela con explosivos la superficie de las montañas y se empujan los restos hacia valles cercanos. Las principales empresas de energía, como Arch Coal Inc. y Consol Energy, participan en ese tipo de minería, que representa el 10 por ciento de la producción estadounidense de carbón.
La práctica recibió más controles desde la llegada al Gobierno de Barack Obama. Varias entidades federales instaron a reducir el impacto de la minería de superficie, que se realiza principalmente en los Apalaches en Virginia, West Virginia, Tennessee y Kentucky.
Aun así, esta semana, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos respaldó la emisión de un permiso de minería en la cima de una montaña en West Virginia solicitado por Hobet Mining, LLC.
Los científicos afirmaron que el análisis de los últimos datos demostró que ese tipo de minería destruye grandes porciones de bosques, lastima a los peces y daña las plantas.
Los habitantes locales también resultarían lesionados debido a corrientes de toxinas en el aire y polvo.
Los residentes de las áreas cercanas a las zonas donde se realiza la minería en las cimas de las montañas tienen altas tasas de cáncer pulmonar, enfermedad cardíaca y otros problemas de salud.
Los esfuerzos para revertir o disminuir el impacto de la monería en el ambiente no fueron muy efectivos; en muchas zonas, hubo poco o nulo crecimiento de vegetación 15 años después.
La portavoz de la Asociación Nacional de Minería, Carol Raulston, señaló que las prácticas ambientales de la industria no son nocivas y que las conclusiones del estudio tienen sesgos.
«Intenta generar correlaciones que no deberían hacerse. Es una declaración de defensa para poner punto final a la minería de extracción en la cimas de montañas, lo que dejaría a miles de personas sin trabajo y alteraría nuestra capacidad de brindar electricidad a valores accesibles», dijo Raulston.