Mexico

De 290 mineras en México, 211 son de Canadá; todos las autorizan, nadie se responsabiliza del daño

Las dependencias federales que autorizan que las mineras nacionales y extranjeras operen en una extensión que abarca ya 22 millones de hectáreas en el territorio mexicano son las secretarías de Economía (SE), Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu), del Trabajo y Previsión Social (STPS), de la Defensa Nacional (Sedena) y de Energía (Sener).
También se involucran las comisiones Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y la Nacional del Agua, además del Servicio Geológico Mexicano (SGM), los gobiernos municipales y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

La minería es una de las actividades extractivas más dañinas para el medio ambiente, la salud y los derechos humanos, sin embargo, las empresas de este sector operan con el aval de distintas dependencias del Gobierno mexicano.

La actividad minera provoca daños a la salud que incluso propicia distintos tipos de cáncer, enfermedades respiratorias y pulmonares por la generación de partículas de polvo, problemas dermatológicos, padecimientos auditivos a causa del ruido provocado por el uso de explosivos y, por supuesto, la muerte por accidentes laborales y negligencia.

En el tema medioambiental, los problemas se esparcen por suelo, aire y agua, además, en la flora y fauna, principalmente por el uso de químicos. El cianuro utilizado para la extracción de algunos minerales contamina fuentes hídricas y tierras que llegan a perder fertilidad.

Los impactos sociales que surgen en las zonas de extracción se centran en el desplazamiento y migración local, así como en conflictos que incluyen la resistencia y la división en la comunidad entre las personas que están de acuerdo contra quienes se oponen a los proyectos.

En palabras de Isabel Clavijo, investigadora del Proyecto sobre Organización, Desarrollo, Educación e Investigación (PODER, por sus siglas en inglés), “las empresas tienen patrones y tácticas que contribuyen a la generación de conflictos sociales, ya que buscan desestimar y eliminar cualquier proceso de resistencia organizativa por parte de las comunidades, la mayoría indígenas y pobres, que estén en contra de los proyectos”.

 

SinEmbargo consultó a distintos especialistas en la materia, quienes señalaron a las instancias que tienen participación –en mayor o menor medida– para permitir operar en el país a 290 compañías mineras, 211 de ellas de origen canadiense.

Todo comienza en la Secretaría de Economía (SE), donde se otorga la concesión. La dependencia federal es, afirmaron los entrevistados, la principal de la docena de instancias incluidas en la “Guía de Procedimientos Mineros”, realizada justamente por dicha instancia hoy dirigida por Ildefonso Guajardo Villarreal.

Asimismo, la SE regula y promociona la actividad minera e inscribe a las firmas en un registro de empresas mineras y de compañías con inversión extranjera directa.

Un documento de Fundar, Centro de Análisis e Investigación AC, cita cifras de la SE: hasta julio de 2016, existían en toda la República Mexicana 25 mil 178 títulos de concesiones mineras vigentes en 22 millones de hectáreas.

“Para poder dimensionar esta extensión, equivale aproximadamente a la superficie acumulada de la Península de Yucatán, que abarca Yucatán, Quintana Roo y Campeche, más Veracruz, Aguascalientes y Ciudad de México”, se lee.

En apego al último registro del Sistema de Administración Minera (SIAM), sólo en septiembre de 2017 se otorgaron 84 permisos.

Cabe mencionar que la concesión es otorgada hasta por un siglo: de entrada se concede por 50 años, con la posibilidad de solicitar una prórroga por un periodo igual, que, indicaron los especialistas, difícilmente será  negada.

“Lo que hace el Gobierno federal es otorgar un pedazo de soberanía nacional sobre un territorio determinado a un particular por un periodo de tiempo demasiado extenso […]. La función de la SE es un clásico ejemplo del Estado reducido a su mínima denominación como ente regulador”, alertó Francisco Cravioto Lagos, de la Asamblea Veracruzana de Iniciativas y Defensa Ambiental (LAVIDA).

“Los polígonos se están otorgando de manera muy rápida, su objetivo es hacer lo más ágil posible el trámite para los intereses privados. La concesión normalmente se otorga, no conozco un caso donde se haya negado una concesión en aras de respetar o garantizar un derecho humano, no es común”, apuntaló Clavijo.

Cabe aclarar que el hecho de que exista una concesión no significa que haya un proyecto en marcha.

MANGA ANCHA A MINERAS

El maestro Eduardo Torres Alonso, miembro del Seminario Universitario de Estudios sobre Sociedad, Instituciones y Recursos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), expuso que, a pesar de que la Secretaría de Economía, es la instancia más importante porque otorga las concesiones, no es la única que tiene participación en dar manga ancha a las mineras.

Las otras dependencias que tienen participación son las secretarías de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de Desarrollo Agrario Territorial y Urbano (Sedatu), del Trabajo y Previsión Social (STPS), de la Defensa Nacional (Sedena) y de Energía (Sener); también las comisiones Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y Nacional del Agua, además del Servicio Geológico Mexicano (SGM), los gobiernos municipales y el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

En términos de importancia, coinciden los investigadores consultados, a la Sener le sigue la Semarnat, encargada de la regulación en el tema ambiental, ente que debiera velar por la conservación y el bienestar de los recursos naturales, pero que en la práctica no lo hace.

Para que la dependencia operada por Rafael Pacchiano Alamán autorice las actividades de exploración, los interesados deben presentar un informe preventivo.

Ante esta dependencia federal, las empresas presentan también la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA), un análisis en el que se previene y planea el proyecto a fin de determinar cuáles son las consecuencias que puede causar, en este caso la actividad minera, sobre el medio ambiente. Además, la MIA designa las medidas preventivas que se ejecutarían para disminuir esos impactos negativos.

“La Semarnat tiene un papel fundamental, dadas las consecuencias ecológicas que tiene esta actividad. Esta Secretaría regula precisamente el tema medioambiental, fomenta la protección, la restauración y la conservación de los ecosistemas y recursos naturales. Para obtener la concesión, la Semarnat revisa la MIA y da el visto bueno en relación con las actividades mineras. Una vez que da el visto bueno, se puede continuar con el proceso de obtención de la concesión”, dijo Torres Alonso.

La investigadora Clavijo afirmó que lo que se ha “identificado es que Semarnat no necesariamente hace un análisis exhaustivo que permita garantizar que no se esté atentando contra el derecho a un medio ambiente sano”.

A las autoridades municipales se les solicita un permiso de cambio de uso de suelo.

La SHCP otorga el registro fiscal a dichas firmas, además de recaudar los impuestos y los derechos de sus actividades.

La Sedatu otorga la certeza jurídica con relación a la tenencia de la tierra. A través del Registro Agrario Nacional (RAN), se encarga del control de la tenencia de la tierra ejidal y comunal. Es la entidad que lleva a cabo la inscripción de los decretos de expropiación de dichos bienes.

“La Sedatu tiene como misión proporcionar la certeza jurídica en la tenencia de la tierra de la población, pero si esto no se cumple, pues la dependencia no satisface su objetivo. La Sedatu está vinculada a que precisamente los terrenos no le sean arrebatados indebidamente a los pueblos que habitan en donde se va a ejecutar la minería”, comentó Torres Alonso.

La CDI asesora a las empresas en relación con los usos y costumbres de los pueblos originarios a fin de evitar conflictos sociales, ya que gran parte de las comunidades indígenas habitan en lugares que son atractivos para la realización de la minería, de allí la importancia de que los interesados en llevar a cabo la actividad extractiva se acerquen al organismo descentralizado.

No obstante, “la CDI interviene cuando ya hay un conflicto porque las empresas no se acercan antes a ellos, no se comunican antes para preguntar si en tal lugar se puede operar una mina”, criticó Torres Alonso.

La Conagua tiene una actividad fundamental vinculada a la regulación de los derechos por uso del vital líquido. La minería requiere grandes cantidades del vital líquido y contamina aún más, entonces la Comisión puede otorgar o prorrogar los títulos de asignación o concesión para el uso de agua. También se encarga de lo relacionado con las descargas de aguas residuales.

“Los espacios que se ocupan para la minería están en el norte del país, principalmente, donde hay muy poca agua. En la franja norte de México, hay 30 por ciento de disponibilidad de agua y como allí se concentran los proyectos mineros, disminuye aceleradamente el vital liquido para la población”, puntualizó el investigador de la Máxima Casa de Estudios.

La Sedena está vinculada con la autorización y supervisión del uso de explosivos, ya que es la encargada de otorgar un permiso general para la compra, almacenamiento y consumo de este tipo de material en la industria.

El IMSS tiene la tarea fundamental de brindar el servicio médico y seguridad social a sus afiliados, después de que el patrón de la empresa minera registra a los empleados.

La STPS proporciona la seguridad laboral con los trabajadores, lo cual resulta importante al ser la minería una actividad riesgosa. La secretaría autoriza el funcionamiento de recipientes como calderas o recipientes sujetos a presión a fin de vigilar el cumplimiento a la NOM-020- STPS-2011. También inspecciona que en las mineras no trabajen menores de edad y es quien puede autorizar empleos a menores entre 14 y 17 años. También aprueba planes y programas de capacitación.

La Sener, al ser la entidad encargada de dirigir la política en materia energética del país, participa cuando en las tierras a explotar por las compañías mineras se da el hallazgo de yacimientos de hidrocarburos. Por su parte, el SGM ofrece asesoría geológica minera de uso de suelo y estudios ambientales.

Ante el panorama expuesto, los especialistas coinciidieron que en México, las autoridades anteponen los intereses particulares de las mineras, sobre el bienestar de la población.

“Las autoridades, amparadas en el marco de la Ley, no están realizando un proceso de evaluación y de revisión exhaustivo que permita que las empresas garanticen el respeto a los derechos humanos y al medio ambiente […]. No se está considerando la decisión y la libre autodeterminación de las comunidades a decidir sobre las actividades que quieren sobre el territorio”, aseveró Clavijo.

Por ello, recriminó que “el interés privado no debería prevalecer por encima del bien común”, por lo que remarcó, “es obligación del Estado y de las autoridades actuar en concordancia con esta premisa” y que existe una “actitud muy laxa” por parte de las autoridades, que favorece precisamente el interés privado sobre el público.

“[El Gobierno] sobrepone el interés privado, sobre el interés público. Se le da prioridad a grupos privados en aras de proteger la inversión como política de Gobierno”, insistió.

 

Fuente:https://www.sinembargo.mx/15-04-2018/3404994?fbclid=IwAR2kS1T3XV1JzTXHuuhuRlUC0k2TO9g2A35Mk1L-T51-K79a3chA9aTvwek

Colombia

Colombia: dos geoportales revelan los conflictos entre megaproyectos y ecosistemas estratégicos

  • Son más de 2400 alertas por grandes proyectos mineros, de hidrocarburos, energéticos y viales que se cruzan con áreas prioritarias de conservación en Colombia.
  • Solo cuatro departamentos del país concentran el 54 % de las alertas: Antioquia (497), Santander (327), Tolima (258) y Meta (220).
  • En los ecosistemas de páramo del departamento de Cundinamarca existen 245 proyectos de alto impacto.

La ley de Transparencia y Acceso a la Información en Colombia pone los datos públicos a disposición de cualquier ciudadano, de forma libre y sin restricciones. Sin embargo, esto no siempre se cumple, mucha información no se actualiza, se encuentra fragmentada en diferentes instituciones y llegar a ella suele ser un trabajo dispendioso y hasta especializado.

Todos estos problemas se juntan cuando las comunidades desean obtener información sobre megaproyectos mineros, energéticos, de hidrocarburos o viales. Cuatro sectores priorizados por el Plan Nacional de Desarrollo y cuyas obras, muchas veces, solo llegan a conocimiento de las personas cuando se dan los procesos de socialización o cuando están a punto de entrar en operación.

La noticia es que a principios de abril se dieron a conocer dos geoportales de libre acceso, uno donde los colombianos pueden identificar todas estas actividades en el país y cruzarlas con áreas prioritarias de conservación y otro donde se dan a conocer los proyectos que tendrían gran impacto sobre los páramos de Guerrero, Chingaza y Sumapaz en el departamento de Cundinamarca. Esto permite a las personas solicitar información adicional a las entidades competentes y estar enterados en tiempo real sobre las decisiones que se toman en sus territorios.

Miles de megaproyectos en Colombia

 

Al ingresar a www.ecosistemasenalerta.info ─creado por la organización Ambiente y Sociedad─ se pueden visualizar, en un solo mapa, los sitios donde hay grandes megaproyectos y añadir capas que permiten identificar los lugares en que las actividades se cruzan con áreas de gran valor ambiental, e incluso ─con información oficial del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) y de Global Forest Watch─ saber si coinciden con focos de deforestación en el país.

El departamento con más alertas es Antioquia (497), seguido por Santander (327), Tolima (258) y Meta (220). Sin embargo, estas cifras solo incluyen los proyectos legales y hay informaciones oficiales que están desactualizadas. Entidades como el Catastro Minero no entregaron la información más reciente a pesar de que los creadores del portal la solicitaron a través de un derecho de petición ─mecanismo jurídico en Colombia con el cual toda entidad que trabaje con datos públicos está obligada a dar respuesta a las solicitudes─.

Hernando Ovalle, coordinador general del proyecto y desarrollador del sistema de información geográfica (SIG), asegura que algunos proyectos les llamaron la atención debido a los grandes impactos que generarían.

Uno de ellos está relacionado con el sector hidrocarburos. El Oleoducto al Pacífico tiene un corredor aprobado de 780 kilómetros que pasaría por cuatro departamentos colombianos: Valle del Cauca, Tolima, Huila y Meta y atravesaría las tres cordilleras de los Andes (Oriental, Central y Occidental).

El proyecto busca conectar de manera más eficiente los bloques de producción de la región de los Llanos Orientales con la región Pacífica, en otras palabras, unir las zonas productoras de petróleo con la salida al mar para ser más competitivos con futuros mercados asiáticos.

De acuerdo con Ovalle, con este proyecto habría afectación a resguardos indígenas y comunidades afrodescendientes donde ya se han venido adelantando las consultas previas. “En un momento el proyecto cruzaba un Parque Nacional por lo que tuvieron que presentar una nueva alternativa a la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla). Aun así, pasará por zonas de bosques que están relativamente bien conservadas”, asegura.

Y es que, según dice, esta obra no solo se limita a darle paso a un tubo, sino que busca unir varios oleoductos existentes y eso trae consigo la construcción de vías que aumentarían la deforestación en esas zonas. Ovalle además ve con preocupación lo que viene sucediendo con la Amazonía, sobre todo en el sector noroccidental donde los proyectos de hidrocarburos están ejerciendo mucha presión sobre los departamentos de Putumayo y Caquetá.

El geoportal también llama la atención sobre proyectos en etapa de construcción u operación. Es el caso del polémico Hidroituango, en el departamento de Antioquia, que ha estado en el ojo del huracán, entre otras cosas, por la inundación que provocó en mayo de 2018 en el sector de Puerto Valdivia o cuando Empresas Públicas de Medellín (EPMretuvo el río Cauca durante una semana en febrero de este año, generando impactos ambientales que aún no se conocen con exactitud.

Esta hidroeléctrica se encuentra sobre bosques naturales y vegetación secundaria del orobioma bajo de los Andes, una de las áreas prioritarias de conservación establecidas en el libro ¿Qúe y Dónde Conservar? publicado en 2011 por Germán Andrade y Germán Corzo en un ejercicio de investigación de Parques Nacionales Naturales de Colombiay donde uno de sus objetivos era identificar los tipos de ecosistemas sin representación en el Sistema de Parques Nacionales Naturales de Colombia. Este libro fue la base para establecer las áreas prioritarias de conservación que se reflejan en el geoportal.

De hecho, el fiscal general, Néstor Humberto Martínez, a inicios de abril pidió acciones inmediatas para frenar la crisis ambiental que desató Hidroituango en el ecosistema del río Cauca y que afecta la vida de cerca de 60 000 personas.

Fábricas naturales de agua en amenaza

 

Los páramos son ecosistemas estratégicos para Colombia y de ahí que ─después de la gran ola invernal de 2010-2011 que causó grandes estragos─ su delimitación y protección fueran una tarea de primer orden para el gobierno nacional, que destacó su importancia para la mitigación y adaptación al cambio climático dada su enorme importancia como fuente de agua.

Precisamente el segundo geoportal: Páramos y proyectos de gran impacto (www.cuidemoslosparamos.info), también creado por Ambiente y Sociedad, se centra en este ecosistema en el departamento de Cundinamarca. Ahí se identificaron 328 proyectos de gran impacto en los páramos de Sumapaz, Chingaza y Guerrero: 272 títulos mineros, 41 viales, 10 de hidrocarburos, 2 de represas y 3 de tendidos eléctricos. De estos, 245 fueron caracterizados y mapeados, y pueden ser visualizados y consultados en el geoportal.

“Se diseñó como una herramienta que le permitiera a diferentes actores, que conviven y trabajan en estos territorios de alta montaña, conocer los proyectos de desarrollo que se están implementando en sus espacios de vida y consultar, de forma fácil y rápida, información precisa sobre dichos proyectos”, señala Andrea Prieto, geógrafa en la Asociación Ambiente y Sociedad y co-coordinadora de la investigación.

Quizás el proyecto que mayor impacto podría generar sobre los páramos es Chingaza II, que busca proveer más agua para Bogotá y que a pesar de estar suspendido actualmente, es probable que se reactive en el futuro. Abarca 500 000 hectáreas en la cuenca del río La Playa, río Guatiquía y río Guavio; y además incluiría el trasvase ─paso del agua de un afluente a otro─ de la cuenca del Orinoco a la cuenca del río Bogotá, con el aumento del caudal de los ríos Fucha, Tunjuelo y Soacha.

“El proyecto está dentro del Parque Nacional Natural Chingaza. Páramo Chingaza. Requiere la totalidad de las aguas de los ríos: i)La Playa, ii)Frío, iii) Chuza, y demás vertientes tributarias de dicha olla. Afectación posible a la cuenca la quebrada Blanca que abastece a la cabecera municipal de San Juanito y la vereda El Carmen”, se lee en el geoportal.

Allí también se indica que, en términos generales, el desarrollo del proyecto altera los ecosistemas naturales, reduce caudales, altera vías migratorias de aves y peces, genera contaminación de las aguas, afecta humedales aguas abajo, reduce el aporte de nutrientes y sedimentos aguas abajo y puede producir desecamiento de áreas inundables, además de pérdida de vegetación paramuna y fragmentación de hábitats.

En 2015, un análisis geoespacial de la Universidad Nacional de Colombia determinó que el embalse afectaría directamente el 11,33 % del valle del río La Playa (la biodiversidad de 638 hectáreas). Además, el pasado 22 de marzo, día del agua, el excandidato a la Alcaldía de Bogotá, Antonio Navarro Wolff, reactivó la polémica sobre el proyecto cuando indicó “la necesidad de Chingaza II para el abastecimiento de agua potable para Bogotá y la sabana, para adaptarse al cambio climático y sus veranos más intensos”.

Otros proyectos polémicos en los páramos son: la ampliación de la Vía Perimetral de Oriente y el tendido eléctrico Nueva Esperanza, “que ya existe pero preocupan los impactos indirectos, principalmente por cuenta de las radiaciones que emiten las líneas de alta tensión y que cruzan algunos de los páramos”, dice Hernando Ovalle.

Así mismo, le preocupa en general el impacto de la sinergia de un gran número de proyectos mineros en la parte norte y que están en el límite del páramo de Guerrero. “Los bosques altoandinos de ahí para abajo prácticamente desaparecieron en esa zona y aunque están en los límites del páramo, pueden afectarlo. Toda esa minería es a cielo abierto lo cual genera mayores presiones”, dice.

Luisa Vargas, antropóloga que ha trabajado durante varios años con las comunidades en los páramos, considera que se deben analizar en profundidad los proyectos pero cree que lo que más impacta a estos ecosistemas, paradójicamente, es su delimitación, la cual “se viene realizando con criterios meramente ecológicos y técnicos, desconociendo los criterios sociales y de participación. A esto se sumó la restricción de la producción agrícola tradicional arraigada en la cultura campesina. Si bien hay que realizar acciones de protección, estas deben estar basadas en acuerdos concertados con los campesinos y las comunidades locales”.

Transparencia y acceso a la información

 

Cada vez que un proyecto se traslapa con un área prioritaria de conservación se genera una alerta. Según dice Hernando Ovalle, estas “alarmas” fueron agrupadas por departamento y por municipio. “Al dar click sobre cada proyecto puedes ver quién lo genera; la información de quién lo ejecuta; el número de expediente para que la gente pueda ubicarlo rápidamente si, por ejemplo, necesita información en la Anla; y el tipo de ecosistema que se estaría impactando con el proyecto”, asegura.

El objetivo es que todo se pueda encontrar en un mismo lugar, sin necesidad de buscarlo en otras páginas. “Para nosotros es muy importante el derecho al acceso a la información para tener una verdadera participación y justicia ambiental”, comenta Margarita Flórez, directora de Ambiente y Sociedad.

Para ella, los geoportales dan un sentido de la gran cantidad de proyectos que hay en las regiones y de su impacto acumulado. “Para una mejor toma de decisiones necesitamos mayor información sobre lo que existe”.

El gran reto es mantener actualizados los datos de los proyectos. En el caso de ecosistemasenalerta.info, Global Forest Watch seguirá dando un soporte técnico y las licencias para utilizar los mapas, pero lo más difícil será obtener la información. “Lo del acceso a datos abiertos es muy bonito en el papel, pero no se cumple en Colombia”, dice Ovalle. A pesar de esto, el objetivo está en actualizar la información por lo menos dos veces al año.

Jessica Webb, gerente senior de Compromiso Global de Global Forest Watch, asegura que “las personas más afectadas por los megaproyectos de infraestructura son los últimos en enterarse de que se van a realizar. Una vez que se dan cuenta del proyecto, ya es demasiado tarde para poder expresar sus opiniones y participar en la toma de decisiones sobre su implementación”.

Webb considera que no es suficiente con este espacio abierto en internet. Cree que es necesario tener un plan para interactuar y conectar con los usuarios, para apoyarlos en entender cómo se puede utilizar la información que contienen los mapas.

La expectativa ahora está en la utilidad que tengan los geoportales en las comunidades. El desafío es lograr su apropiación, garantizar una actualización de la información y con ella generar participación y diálogo para enfrentar los conflictos socioambientales que no cesan en Colombia.

*Imagen principal: La minería de carbón es una de las principales actividades en el páramo de Pisba y una de las que quedará prohibida con la delimitación. Foto: Daniel Reina Romero-Semana Sostenible.

 

Fuente:https://es.mongabay.com/2019/04/megaproyectos-y-ecosistemas-estrategicos-geoportales-colombia/

Mexico

Incendio en Alto Lucero pudo ser provocado por mineras, según ONG

Xalapa, Ver., El dirigente de La Asamblea Veracruzana de Iniciativas de Defensa Ambiental (Lavida), Guillermo Rodríguez Curiel, dijo que el incendio que comenzó el 27 de marzo en el paraje La Pedrera-Cerro Roca de Oro, municipio de Alto Lucero, pudo haber sido provocado por las mineras Candelaria Mining, Gavilán SA de CV y Alondra SA, que pretenden asentarse en la zona.

No hay casualidades; detrás de este incendio están las empresas, que con esa acción pretenden amedrentarnos para que dejemos de defender los cerros, acusó en el festival político-cultural 500 años resistiendo a la vida, que se realizó en Palma Sola, de Alto Lucero.

Por lo anterior, el activista solicitó a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente y la Secretaría del Medio Ambiente estatal investigar las causas que lo provocaron.

El incendio se inició en la zona de La Pedrera, cerca de la carretera costera 180, y con los días nos hemos percatado que empezaron a aparecer varios focos secundarios en los cerros La Paila y La Bandera; es muy poco común que haya tantos puntos activos, expuso.

Rodríguez Curiel consideró que las autoridades deben aclarar por qué ha transcurrido más de una semana con el fuego activo, sin que hasta ahora sean capaces de extinguir las llamas, a pesar de que se usaron helicópteros para ayudar en los trabajos de mitigación.

“Nos parece sospechoso que un incendio que comenzó a orillas de la carretera se haya dejado escalar a la parte alta de los cerros (…) Siguen siendo muy valiosos y vamos a defenderlos de la minería, que destruye los ecosistemas del Golfo de México. No hay pretexto para declararlo zona de desastre y que ingresen las máquinas de las mineras. El cerro aún puede regenerarse”, externó.

Por su parte, Elisa Pérez Barbosa, directora de Pro Natura Veracruz, mencionó que en la zona del siniestro hay encinares tropicales, únicos en el Golfo de México, pues forman parte de un corredor de aves rapaces migratorias. Va-mos a ver si el incendio fue provocado, esperaremos los dictámenes, dijo.

En el auditorio de la Unión Ganadera de Palma Sola, municipio de Alto Lucero, más de 500 habitantes acordaron enviar una misiva al presidente Andrés Manuel López Obrador para pedirle revocar 27 concesiones mineras en Veracruz aprobadas en los gobiernos de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) y Enrique Peña Nieto (2012-2018).

Solicitaron a la administración lopeobradorista no emitir nuevas autorizaciones en el paraje La Pedrera-Cerro Roca de Oro y que la zona de encinares tropicales, entre las localidades de Alto Lucero, Actopan, Juchique de Ferrer, Acatlán, Chiconquiaco y Colipa sea decretada área natural protegida.

 

Fuente:https://www.jornada.com.mx/2019/04/17/estados/028n2est#
Latinoamerica, Litio

El precio ambiental de la fiebre del litio en Argentina, Bolivia y Chile

  • Concentrado en cantidades ingentes en la salmuera de los salares de Bolivia, Chile y Argentina, el litio se ha convertido en la gran estrella de la megaminería mundial.
  • La explotación masiva amenaza con transformar definitivamente parajes desérticos donde las lluvias no superan los 200 mm anuales. La escasez de agua se presenta entonces como uno de los principales problemas ambientales que destacan los expertos.

Copaisa, el segundo salar más grande de Bolivia y el quinto del mundo en extensión, encierra en sus 2218 kilómetros cuadrados un lago del mismo nombre. Es una fotografía bellísima pero al mismo tiempo una metáfora del conflicto hídrico que atraviesa desde hace un tiempo el Altiplano de Bolivia, Chile y Argentina. Este espacio conocido como el “Triángulo del Litio” se ha convertido en uno de los blancos para la extracción de un mineral que es componente básico para almacenar energía en las baterías que alimentan vehículos, teléfonos, plantas solares y otros artilugios.

Los pueblos indígenas han sabido desde siempre cultivar y extraer de la costra salina las cantidades necesarias de agua para sus cultivos y ganado. Pero desde que el litio se volvió indispensable para las baterías acumuladoras de energía, el interés en los salares cambió radicalmente. El auge universal de la telefonía celular y otros aparatos electrónicos semejantes, junto al incalculable margen de expansión debido a la decidida apuesta por los vehículos eléctricos en los países del norte desarrollado, se unieron para desatar “la fiebre del litio”.

La megaminería

Marcelo Sticco, hidrogeólogo e investigador de la Universidad de Buenos Aires explica que para explotar el litio “se hacen pozos en la superficie y se bombea salmuera desde las profundidades hacia el exterior. Después se vuelca lo extraído en piletas construidas sobre el mismo salar y se deja que el sol vaya evaporando el agua para que solo queden las sales”.

Uyuni es el depósito más grande del mundo en contenido de litio como recurso y en él “hay una cantidad de salmuera que nos permitiría la explotación durante 200 o 300 años”, dice el ingeniero Juan Carlos Montenegro, gerente ejecutivo de Yacimientos de Litios Boliviano (YLB), la empresa estatal que el Gobierno de ese país creó para centralizar la explotación del mineral. En 2011, mucho antes de la creación de YLB, el mismo Gobierno de Bolivia había elevado a la Unesco el pedido para que Uyuni fuese incorporado a la lista de Patrimonios de la Humanidad. Hoy la idea ha sido dejada en un segundo plano.

De los tres países, Bolivia es el que lleva más retraso en la explotación. A cambio de este avance a paso lento, los ecosistemas de los salares se mantienen más o menos intactos, aunque no exentos de riesgos.

Chile es el caso contrario. El salar de Atacama, segundo más grande del mundo tras el de Uyuni, lleva más de dos décadas de explotación intensiva y los efectos de veinte años de megaminería ya son visibles a simple vista. “Atacama vive una agonía socioambiental”, sostiene Bárbara Jerez, académica de la Escuela de Trabajo Social de la Universidad de Valparaíso en diálogo con Mongabay Latam: “Se están arrasando humedales, bofedales, ojitos de agua. Se ha roto el equilibrio hídrico del territorio y con ello también se está arruinando la economía local de los indígenas”. El Comité de Minería No Metálica de Chile ha establecido que la capacidad de recarga hídrica del salar es de 6682 litros/segundo. La descarga de las empresas es, sin embargo, de 8802 litros/segundo.

Argentina, por su parte, se encuentra en un punto intermedio. La explotación del litio lleva 21 años en el pequeño Salar del Hombre Muerto, donde la empresa FMC Lithium ya ha sido varias veces denunciada por contaminación de las aguas. En cambio, es más o menos reciente en Salinas Grandes y el complejo Olaroz-Cauchari y actualmente existen más de 60 solicitudes de permisos de prospección, de los cuales 28 ya están en proceso.

Los salares de los tres países comparten el mismo problema: “no hay líneas de base para hacer las valoraciones ni capacidad para efectuar controles efectivos”, dice la abogada argentina Pía Marchegiani, directora de política ambiental de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN).

 

Una especie de esponja que chupa agua embebida en sales

Marcelo Sticco, investigador de la Universidad de Buenos Aires, señala que el modelo general es igual en todas las cuencas del triángulo. Explica que ellas son como una olla rellena de materiales arenosos que funciona como una especie de esponja en las profundidades del salar. Allí se va acomodando la poca agua que ingresa al sistema. Mientras tanto, en los bordes y en franjas de pocos kilómetros se acumula el agua dulce que equilibra el líquido que entra y sale del sistema en forma natural y permite la existencia de vida en la zona. El movimiento de esos volúmenes de agua dulce está totalmente influenciado por lo que ocurre en el centro del salar.

“La explotación a través de pozos”, indica Sticco, “forma los llamados ‘conos de depresión’, embudos que cambian el gradiente hídrico. Si naturalmente el agua dulce se moviliza progresiva y horizontalmente, los conos transforman el lugar en algo así como en un tobogán y el agua se introduce casi de manera vertical. De este modo deja de estacionarse en los bordes del salar y ya no está disponible para la población, el ganado o la flora”.

En el fuero oficial, sin embargo, las opiniones difieren. “Uyuni tiene 10 000 km2 y nuestra área de intervención es de 40 km2, menos del 1 %. Además, el agua que ingresa al salar a través del río Grande supera en mucho la cantidad que evaporamos en nuestro proceso”, asegura el ingeniero Montenegro, gerente ejecutivo de Yacimientos de Litios Boliviano (YLB).

Pero el agua no solo se pierde a través del bombeo de salmuera. La evaporación en piletas requiere de dos millones de litros de salmuera por cada tonelada de litio producida y deben utilizarse grandes cantidades de agua dulce para los procesos finales de obtención del carbonato de litio.

“Hoy, los grandes actores económicos quieren invertir en litio”, analiza la doctora Marchegiani, “esto ocurre ahora mismo, pero simultáneamente se están buscando otras fórmulas para almacenar energía más baratas y fáciles de obtener”. El hidrógeno, el sodio, el silicio son algunos de los competidores. Treinta o cuarenta años de demanda masiva es el plazo máximo que la mayoría de los investigadores le dan a esta nueva “Fiebre del Oro”. Algunos incluso lo acortan por debajo de los veinte, un tiempo demasiado corto para estudiar a fondo los efectos posibles sobre ecosistemas desérticos, en los que las lluvias no superan los 200 mm anuales. Las empresas y los gobiernos se ven así empujados a acelerar los procesos sin detenerse en exceso a pensar qué puede ocurrir después, cuando la ola haya pasado.

 

Fuente:https://movimientom4.org/2019/04/el-precio-ambiental-de-la-fiebre-del-litio-en-argentina-bolivia-y-chile/?fbclid=IwAR1MzihJUFTxsDM7UJAHoeqmIMmYE6LJSiqOhomYzRUno1cJKk0GRkSsor8

 

Ecuador

Girón, el poblado que derrotó a la minería

Son las 18:00 del domingo 24 de marzo. La tarde es fría, pero tranquila. Poco a poco, los pobladores de Girón se concentran en el parque central. La iluminación es muy mala. Unos escuchan atentos la radio, otros revisan sus celulares y algunos, sentados, mueven sus piernas y sus manos. Es la ansiedad por conocer los resultados de la consulta popular de Kimsakocha.

En las redes sociales y en los medios de comunicación se difunden resultados preliminares. El colectivo ambientalista Yasunidos Cuenca informa que más del 70% del electorado votó por el No. Los veedores de las organizaciones involucradas en el proceso, como la Federación de Organizaciones Indígenas y Campesinas del Azuay (FOA) y la Unión de Sistemas Comunitarios de Agua de Girón, hacen llamadas a los dirigentes diciendo que en los distintos recintos electorales el triunfo por el agua se mantiene. Son noticias buenas, pero los defensores del agua son cautelosos. Quieren información oficial. Revisan una y otra vez la página web del Consejo Nacional Electoral (CNE) y no hay nada.

En junio de 2012, la compañía IAMGOLD vendió el 45% de los derechos de explotación del proyecto denominado inicialmente como “Quimsacocha” a la empresa INV Metals. Al adquirir los derechos de exploración en la zona, INV Metals cambió el nombre del proyecto por “Loma Larga”.

Después de una hora de incertidumbre, llegan más personas, líderes y lideresas de las parroquias de Tarqui y Victoria del Portete, ambientalistas de Cuenca y de otras partes del país. La tendencia por el No crece, pero la página web del organismo electoral sigue vacía. Las radios de Cuenca ya confirman la derrota de las mineras y la gente cada vez se convence más, se abrazan largamente, saltan con alegría, sus ojos brillan, son rostros de esperanza.

Las pocas dudas se desvanecen cuando llega Yaku Pérez Guartambel, con el poncho rojo que lo acompañó durante casi dos décadas para enfrentar a las empresas mineras de Kimsakocha y Río Blanco, y durante los 10 años del gobierno de Rafael Correa. A las ocho de la noche, son todavía pocas las actas escrutadas para saber quién será el nuevo prefecto de la provincia de Azuay, pero ya se expande la certeza de que Yaku, conocido como el defensor del agua, es la nueva autoridad.

Bolívar Quezada, de 33 años, es presidente de los sistemas de agua de la comunidad de Cauquil, ubicada en la parroquia San Gerardo. A Cauquil la conocen como la “tierra seca”, ya que su gente no tuvo acceso al agua potable durante muchos años.

Kimsakocha cuenta con tres lagunas de las que nacen tres ríos que sirven a Tarqui para Victoria del Portete, Tarqui, Baños y Turi; el río Yanuncay que abastece la tercera parte de la ciudad de Cuenca, y el río Rircay que abastece los cantones de Girón, Santa Isabel, San Fernando y la zona costera del Pacífico.

Pero en el 2010, adultos, jóvenes y mujeres se organizaron para crear el sistema comunitario y abastecerse de agua todos los días desde el Lago Cristal, la parte baja de Kimsakocha. La escasez del agua marcó su vida, así como la del resto de la comunidad de 103 familias. Las memorias son frescas: cultivos dañados, animales muertos, pastos secos. Cuando Bolívar era niño corría con los baldes para recolectar el agua desde los reservorios y vertientes.

Ahora, muchos caminan juntos por las calles de Girón, con sus banderas azules. Esperan celebrar como lo han hecho desde que se inició su lucha, cantando al agua y a la vida.

A la voz de nuestra agüita, todo el mundo se levanta, a defender Kimsakocha.
Agua quiero, agua quiero, oro no. Vida quiero, vida quiero, muerte no.

Al mediodía del lunes 25 de marzo, por fin los resultados se publican en el sitio web del CNE. El No gana y de largo en el cantón Girón, con 7 135 votos que representan el 86,79% del total. La situación es similar en dos parroquias más. En Asunción, con 2 343 empadronados, el 86,43% dijo no a la minería. Girón, la zona con mayor población, también votó por el No y obtuvo el 88,63% de los votos. En San Gerardo, la diferencia es menor. En este territorio, fragmentado por las regalías mineras, el No se impuso con el 55,27%.

Desde este espacio, desde su chakra, donde cultiva maíz, arveja, papas, zambos y porotos para alimentar a su familia y sobrevivir económicamente, Bolívar califica de “histórica” la consulta y exige que se respete la decisión de los gironenses en las urnas

Después. Esperanza y amenazas

La celebración por el triunfo del No apenas duró la noche de ese 24 de marzo. Al día siguiente, las declaraciones de la empresa minera Inv Metals y de los voceros del gobierno de Lenín Moreno mataron la alegría de los defensores del agua. La compañía, en un comunicado, informó que reubicará las instalaciones de procesamiento y relaves fuera del cantón Girón, y que seguirá con las actividades mineras y agotará todas las instancias legales jurídicas en el Ecuador, y si fuera necesario, acudirá a los organismos internacionales.

El martes 26, Carlos Pérez, el ministro de Energía y Recursos Naturales No Renovables, dijo que la situación es “preocupante”, que los resultados son “un golpe” para la industria minera. Habló de la probabilidad de demandas contra el Estado ecuatoriano y hasta vaticinó que perderían recursos económicos y en el ámbito jurídico. El viernes 29, 9 empresas mineras y la Cámara Nacional de Minería se agruparon en la denominada Alianza para la Minería Responsable y solicitaron a la Corte Constitucional que se pronunciara sobre estos resultados.

A Lauro Arariwa Sigcha, presidente de la FOA y activista por 16 años, le preocupan todas las estrategias de la empresa y del gobierno para deslegitimar el proceso de consulta popular. Sin embargo, tiene la certeza de que esta victoria ha permitido posicionar varios mensajes como el derecho de los pueblos y comunidades a ser consultados, fortalecer la resistencia de los territorios con conflictos mineros y pensar en otro mundo más sustentable y justo.

Yaku Pérez Guartambel, abogado de las comunidades defensoras del agua, sostiene que la consulta es vinculante, es decir, que el pronunciamiento popular será de obligatorio e inmediato cumplimiento. Además, así lo establece la actual Constitución del Ecuador, en su Artículo 106. En caso de que las actividades mineras continúen en Girón, pese a la notificación de los resultados del CNE, la empresa minera podría enfrentar un juicio penal por desacato, dijo Yaku Pérez.

Artículo 106 de la Constitución de la República del Ecuador.

Antes. Quienes conspiran

Antes de las elecciones hubo varias piedras en el camino. En febrero, el Ministerio de Minas pidió medidas cautelares para evitar la consulta popular, pero la jueza Ximena Barragán negó el pedido porque el Ministerio no tenía legitimidad para haber actuado “a nombre del pueblo”.

Faltando una semana para el día de las elecciones, el juez Vicente Rivadeneira aceptó la solicitud del Colectivo Unidos por el Desarrollo de los cantones de Girón y San Fernando para suspender temporalmente la consulta hasta que la Corte Constitucional se pronunciara. Pero el Pleno del CNE solicitó que se revocaran las medidas cautelares y se destituyera al juez. El proceso continuó.

Se pretendió explotar cerca de 2,04 millones de onzas de oro, 11,5 millones de onzas de plata y 81,1 millones de libras de cobre, bajo el esquema de minería subterránea.

Ya el domingo de elecciones, las alarmas de un posible fraude electoral llegaron en las primeras horas. Veedores de la Federación de Organizaciones Indígenas del Azuay (FOA) y del colectivo Yasunidos difundían en sus redes que en algunos recintos electorales no habían entregado la papeleta de la consulta popular sobre la minería en Kimsakocha. Los medios de comunicación replicaron la noticia. Heriberto Cairo, observador internacional y académico de España, visitó el centro educativo Rafael Chico y lo confirmó: no se había entregado una papeleta debido al retraso en la instalación de una mesa.

La desconfianza se mantuvo hasta el cierre de la votación. Los veedores preguntaban a los electores si recibieron la papeleta de la consulta y sus respuestas eran afirmativas, pero con esas respuestas explicaban cómo fue su voto. Lo hacían, sobre todo, las mujeres con pollera y sombrero:

 

“Yo voté por el No. No queremos ser afectados por la minería. Estamos luchando por el agua por nosotros y nuestros hijos”

“Necesitamos tomar agua y el agua es nuestro primer recurso. ¿Qué hacemos con el oro? Anillos que no podemos tener porque todo nos roban. ¡Sí al agua!”

“Yo voté por el agua porque eso nos interesa mucho, porque sin agua no podemos vivir”

“Sí recibimos la papeleta de la consulta. Nuestro voto fue en contra porque creemos que la minería sea legal o ilegal igual afecta las fuentes hidrológicas”.

Las expresiones de las mujeres de Girón fueron indicador de que las trampas preparadas por el Estado y las empresas mineras en este proceso electoral no eran posibles en un pueblo unido y vigilante. Ante cualquier movimiento sospechoso, las comunidades lo esparcían, los medios de comunicación alertaban a sus audiencias y las voces desde los distintos espacios llamaban la atención al CNE para corregir cualquier error. Las miradas de otros países estuvieron pendientes de la consulta por el agua por ser un referente mundial para detener la megaminería.

Memoria que fluye

El triunfo del agua no es el resultado de una lucha reciente. La defensa de Kimsakocha y de sus fuentes hídricas tiene al menos dos décadas. Según el defensor del agua, Jhonny Tapia, los miembros de la Unión de los Sistemas Comunitarios del Agua y la FOA hicieron cerca de 50 viajes a Quito para insistir a la Corte Constitucional una respuesta, hasta que en noviembre de 2018, el organismo electoral transitorio dio paso a la consulta popular.

Al principio eran pocos, por eso los llamaban “4 pelagatos”. Hoy son miles. Muchos defensores que estuvieron al inicio ya no están hoy para celebrar esta victoria electoral, pero sus huellas siguen vivas. Lo recuerdan Angelita Loja y Miriam Chuchuca, dos mujeres incansables que lideraron varias marchas, huelgas de hambre, cierres de vías. Ellas cuentan que los comuneros han pasado al menos veinte años de persecución, de violencia física y verbal, de cárcel por defender el agua, y hoy quedan familias divididas y comunidades rotas por culpa de la presencia de la minera que ofrecía oro, empleo y estatus social.

Son dos décadas. Pero las comunidades azuayas ya no se sienten solas. La resistencia se multiplica en la provincia de Azuay y en otras zonas del país. El triunfo de esta consulta es el precedente para muchos pueblos amenazados por la arremetida de la minería que se extiende en la región.

 

Fuente:https://labarraespaciadora.com/medio-ambiente/giron-el-poblado-que-derroto-a-la-mineria/?fbclid=IwAR2zeFfUtjhy7RcAXEkn1hNiOKer5pvmuZE4AJMgwLBoOb2HNXrIHr9tgOw

Perú

Vuelve la tensión a Las Bambas: tres comunidades se retiran de mesa de diálogo y retomarían protestas

Las comunidades de Fuerabamba, Huancuire y Pumamarca se retiraron de la mesa de la mesa de cumplimientos que busca solucionar el conflicto por Las Bambas y anunciaron que retomarán, en las próximas horas, las protestas contra la minera china MMG.

El presidente de la comunidad de Fuerabamba, Gregorio Rojas, dijo que la decisión responde a que no dejaron ingresar a los representantes de esas comunidades al salón comunal en Challhuahuacho donde se desarrollaba el encuentro este martes con representantes del Ejecutivo, la Defensoría del Pueblo y de la empresa privada, cita que fue denominada como ‘Mesa de Justicia y Derechos Humanos’.

«No nos han permitido ingresar a las tres comunidades. Nos vamos a retirar de este punto y vamos a continuar luchando», expresó el dirigente en RPP.

Rojas Paniura añadió que presentaron una lista de las personas que asistirían en representación de las referidas comunidades, pero esta no habría sido aceptada, por lo que ─anunció─ los comuneros sostendrán una reunión para decidir si es que vuelven a bloquear el ingreso a la mina Las Bambas.

El líder de Fuerabamba también pidió que antes de seguir con el diálogo se retire las denuncias contra comuneros implicados en manifestaciones anteriores y denunció que la ministra de Inclusión Social, Paola Bustamante, no había llegado a la reunión de este martes, pese a que el premier Salvador Del Solar lo prometió.

 

Fuente:https://redaccion.lamula.pe/2019/04/16/vuelve-la-tension-a-las-bambas-tres-comunidades-se-retiran-de-mesa-de-dialogo-y-retomarian-protestas/redaccionmulera/

Mexico

Policías intentan romper cerco de habitantes en Peñasquito

Agentes de la Policía Estatal Preventiva (PEP) intentaron romper el cerco que habitantes y transportistas de Mazapil mantienen desde hace casi tres semanas en torno de la mina de oro y plata a cielo abierto Peñasquito, propiedad de las trasnacionales Goldcorp y Newmont.

Los uniformados llegaron ayer por la mañana al acceso principal del complejo minero ubicado en el valle de Mazapil, 305 kilómetros al noroeste de la capital de Zacatecas, con el argumento de que recibieron el reporte de que había una persona herida por arma blanca durante una riña en el interior del yacimiento, y ellos debían ingresar al lugar porque somos seguridad pública.

Vecinos del municipio expusieron que un trabajador de la mina resultó lesionado en un incidente que nada tiene que ver con nosotros, y lo dejaron ingresar por humanidad para que fuera atendido en la clínica que existe dentro de Peñasquito.

Agregaron que si el herido requería salir en alguna de las ambulancias de la minera a Saltillo, Coahuila, o a la capital de Zacatecas, los policías podrían sacarla, pues se les permitiría el paso, o de ser necesario, se le podría trasladar en uno de los helicópteros a disposición de Goldcorp las 24 horas, para mover a quien quiera.

El comandante de la PEP que encabezaba a los uniformados pidió que se les permitiera pasar para comunicarse con sus superiores.

Los pobladores de Mazapil le respondieron que toda la comunidad está totalmente incomunicada desde el 27 de marzo, cuando Peñasquito apagó la antena de telecomunicaciones que daba servicio de Internet y telefonía en la región.

Los vecinos dijeron a los elementos de la PEP que si querían comunicarse con sus superiores en Zacatecas se dirigieran a la cabecera municipal de Mazapil o a la delegación municipal de Cedros.

Sólo que traigas una orden de un juez vas a entrar, si no, lo sentimos mucho, pero nuestro movimiento no lo permite. Agarren la onda, son mexicanos ustedes también, como nosotros. Y ellos adentro son canadienses y estadunidenses (…) Este es un movimiento pacífico. No van a entrar, advirtieron.

Asimismo, los inconformes entregaron a La Jornada un informe elaborado por la Comisión Nacional del Agua y la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, con número de oficio BOO.932.04-077/037, firmado por Héctor González Curiel, director de la Conagua en Zacatecas, donde se informa que el manantial El Socavón, de San Juan de Cedros, se secó en 2013 y posiblemente uno de los factores contribuyentes en la disminución del flujo del manantial El Socavón hayan sido las actividades mineras.

Felipe Pinedo Hernández, asesor de los habitantes de Mazapil, apuntó al respecto que en el desierto semiárido de ese valle la única mina en operaciones es Peñasquito.

Goldcorp respondió a la Conagua en su comunicado número 04/19 que Peñasquito considera los argumentos del documento como no determinantes pues no presenta elementos definitorios. El mismo documento afirma que no existe evidencia que las actividades mineras sean la causa de disminución de flujo en El Socavón.

 

Fuente:https://www.jornada.com.mx/2019/04/17/estados/028n1est?fbclid=IwAR1db-zNQavSV0TFNfI-8r-_I0YoD4UIj-5CimBM9J2fQN-vtuf3EZ_ISfU

Perú

Siempre nos van a matar

En Madre de Dios los delincuentes mineros y madereros continúan amedrentando y arrinconando a la población nativa. Es imperativo enfocarse en proteger a la ciudadanía vulnerada (la inmensa mayoría), reparar el daño y promover economías verdes, sin ofrecer cuartel ni concesiones al extractivismo.

Pasé el último viernes por La Pampa, el enclave de minería ilegal en Madre de Dios, intervenido con masiva fuerza pública hace semanas. Una tropa castrense trotaba sobre la pista y rugían consignas (“¡No-deser-taré!”) al ritmo de su marcha. Numerosos expendios siguen abiertos; pero el bullicio de los prostibares, las muchachas alineadas, el basural y la invasión de la carretera, que obligaba a desfilar lentamente entre miradas cargadas de sospecha, han disminuido sensiblemente. Igual hay mucha gente. “Siguen trabajando de noche”, me guiña nuestro chofer ¿Tan pronto y ya flaquea la vigilancia?

La Pampa es el vértice más publicitado de una extensa comarca dominada por la fiebre del oro y salpicada de narcotráfico, conectada mediante la carretera Interoceánica Sur y un enredo de ríos navegables y vías carrozables entre el altiplano y la llanura selvática. La frontera boliviana, La Rinconada en Puno, Camanti en la selva alta del Cusco, el río Inambari, el bajo Madre de Dios y sus tributarios; están criminalmente comunicados ¿Cómo permitimos que una porción tan grande de territorio, ciudadanía y patrimonio natural fueran secuestrados por el crimen organizado? Perú país minero, pues, hermano.

La gente acude desde Cusco y Puno y se desperdiga en la selva, talando, excavando, desmoronando, envenenando, abandonando. Convertir la minería aurífera aluvial en la Amazonía en un negocio decente y ambientalmente amigable, más que un espejismo burocrático, es una falacia fraguada para no llamar cáncer al cáncer y salir del paso.

Un minero ilegal y un informal provocan el mismo daño; pero el informal puede trabajar una concesión impuesta sobre una comunidad nativa, devastar la tierra impunemente y vender oro libremente. ¿Qué incentivo tiene para formalizarse? Cada tanto, el Estado les amplía el plazo.

El foco de cualquier intervención gubernamental honesta y sensata no deben ser los mineros, sino la mayoría vulnerada. Los cientos de miles de niños y madres con mercurio en la sangre, los hombres enviciados y lisiados, las empresas honestas arrinconadas, los pueblos indígenas invadidos y contaminados, y las jóvenes violadas no parecen contar para nadie. Invisibilizarles ha sido el peor error y pecado de cada administración derrotada.

En junio pasado, los comuneros de Masenawa y la federación indígena de Madre de Dios consiguieron apoyo policial para expulsar mineros ilegales de su territorio. Días después, Carmen, la presidenta comunal, su hermano Timoteo y dos de sus hijos acudieron, como siempre, al cercano poblado de Boca Colorado. Una turba iracunda les sorprendió en el puerto. Les lanzaron gasolina al cuerpo e incendiaron su bote. Solo saltando al agua se salvaron. Diez meses después, el esposo de Carmen me conmina: “Yo quiero saber para qué sirven tantos proyectos, si la señora que le echó gasolina a mi mujer sigue libre”. También los hombres armados que les roban madera siguen libres. “Siempre nos van a matar, algún día será”, concluye Timoteo, triste como un árbol solitario. Viven en la zozobra, los defensores de nuestros ríos y bosques milenarios. Extirpar de nuestra sociedad todo el extractivismo criminal es un imperativo humanitario.

 

Fuente:https://rpp.pe/columnistas/ernestoraezluna/siempre-nos-van-a-matar-noticia-1189723?fbclid=IwAR1UrBUugCtdqJ7LdSUyED5f4YQdRprIIoxQCfV1v8LYW6rBbaYP2E3x2mg

Perú

Primera sesión de la mesa de diálogo de Las Bambas termina de manera accidentada

No es una buena noticia. La primera sesión de la mesa que se debía instalar hoy en el distrito de Challhuahuacho, ha terminado de manera accidentada, con el retiro abrupto de las delegaciones de las comunidades.

El día comenzó mal con la publicación en el diario oficial El Peruano del Decreto Supremo que conformaba la Comisión Multisectorial denominada “Espacio de diálogo y cumplimiento de compromisos para el desarrollo en la zona de influencia del proyecto Las Bambas” (D.S. 075-2019-PCM).

Una de las principales observaciones al D.S. por parte de las comunidades apuntaba a la conformación de la Mesa: solo se aceptaba a un representante de todas las comunidades que habitan en la zona de influencia del proyecto. Como era de suponer, esta propuesta fue rechazada.

Además, el hecho que para esta sesión inaugural del proceso solo se presente el Vice Ministro de Gobernanza Territorial, Raúl Molina y no asista la Ministra de Inclusión Social que preside el espacio, ha sido interpretado por las comunidades como una muestra del poco interés y falta de compromiso de parte del gobierno.

El Vice Ministro Molina no se pudo dar abasto para atender la situación de tensión que se fue complicando en la medida que crecía el malestar de las comunidades. Finalmente, la Mesa ha quedado suspendida y las comunidades han anunciado que van a evaluar su participación.

Nuevamente el gobierno comete un gravísimo error. Tanto que había costado sacar el conflicto de la situación de extrema tensión que se vivió durante 60 días y lograr un acuerdo inicial para iniciar el diálogo y a los pocos días lo tira todo por la borda. Deberían reaccionar lo antes posible, antes que el conflicto se active nuevamente.

 

Fuente:http://conflictosmineros.org.pe/2019/04/16/primera-sesion-de-la-mesa-de-dialogo-de-las-bambas-termina-de-manera-accidentada/?fbclid=IwAR11fB01EQqdO4I6-6wKQlFxHPqiWJLPHBOe2449QjT1dISctcc0wUsfv4I

Mexico

Cabildo Municipal Declara: Territorio de Magdalena Ocotlán, prohibido para la minería.

En el ejercicio de nuestros derechos a la autonomía, libre determinación, medio ambiente sano, territorio y salud y en el marco del 100 aniversario del asesinato de Emiliano Zapata, quién luchó por tierra para nuestros pueblos y comunidades, el Cabildo Municipal de Magdalena Ocotlán hemos tomado la firme determinación de declarar nuestro territorio como Prohibido para la Minería.

A través de un acta de Sesión Solemene de Cabildo El H. Ayuntamiento de Magdalena Ocotlán, el Presidente del Comisariado de Bienes Ejidales  y la comunidad de Magdalena Ocotlán reafirmamos nuestro amor por la tierra, la que consideramos como madre y sustento de vida, nuestro territorio representa el fundamento de nuestra identidad y vida comunitaria.

Nuestros abuelos y abuelas lucharon en décadas pasadas contra la Hacienda San José para que nuestras tierras volvieran a sus legítimos poseedores, en esta lucha perdieron la vida un sinumero de campesinas y campesinos. El proyecto minero San José, se pretende imponer en nuestra comunidad, como en la época de las haciendas, con el objetivo de despojarnos de nuestros bienes comunes (agua, tierras de cultivo, árboles, minerales).

En correspondencia con nuestra historia, queda estrictamente prohibida cualquier actividad de prospección, exploración y explotación de minerales así como de cualquier proyecto nacional o transnacional que tenga por objeto modificar o extraer los bienes naturales de nuestro territorio, atente contra la vida de nuestros habitantes, dañe el medio ambiente y despoje nuestra cultura.

Este Cabildo se pronuncia por la cancelación definitiva de todos los títulos de concesión minera vigentes en nuestro territorio,  por lo que asume la responsabilidad y el compromiso de proteger y defender nuestro territorio, por lo que no otorgará el cambio de uso de suelo  en el territorio municipal.

Magdalena Ocotlán, es una comunidad indígena zapoteca de los Valles Centrales de Oaxaca. Desde 2009 ha mostrado su oposición rotunda a la imposición del proyecto minero San José ( en el municipio vecino de San José del Progreso) y ha exigido a las autoridades estatales y federales la cancelación de las concesiones mineras otorgadas en su territorio.

Durante 10 años, la comunidad ha sufrido diversos impactos por explotación minera, caracterizados por explosiones y vibraciones durante la noche, polvo excesivo, contaminación al agua, detenciones arbitrarias, amenazas e intimidaciones.

Además hemos recibido diversas presiones por parte del gobierno federal y la empresa Fortuna Silver Mines-Cuzcatlán para aceptar el proyecto minero, en noviembre de 2016 quisieron realizar una consulta para aceptar la firma de contratos o convenios de exploración a favor de la empresa minera, dicha consulta no se consumó por la oposición de la comunidad.

Sobre los impactos ambientales, en octubre del año pasado se registraron dos derrames de la presa de jales secos, de los cuáles las autoridades federales (PROFEPA-CONAGUA) han dicho que no necesitan remediación porque no existe contaminación, queremos denunciar que en ningún momento las autoridades mencionadas anteriormente han explicado los argumentos de sus conclusiones, el pueblo continua comprando agua ya que sus conclusiones no proporcionan ninguna certeza sobre la posible contaminación.

Exigimos a la empresa minera Fortuna Silver Mines-Cuzcatlán se abstenga de ingresar a nuestro territorio, la responsabilizamos por los daños producidos al medio ambiente y a nuestro tejido social, de igual forma le responsabilizamos por cualquier amenaza, intimidación o agresión hacia los integrantes de este Cabildo y de nuestra comunidad.

Ni Oro, Ni Plata, la Minería Mata

Sí a la Vida, No a la Minería

Ayuntamiento de Magdalena Ocotlán, Oaxaca, México.

 

Fuente:http://endefensadelosterritorios.org/2019/04/10/cabildo-municipal-declara-territorio-de-magdalena-ocotlan-prohibido-para-la-mineria/