Latinoamerica

Coordenadas del extractivismo en la pandemia en A. Latina

Emiliano Terán Mantovani

27/07/2020
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A pesar de la crisis que ha desatado la pandemia, el extractivismo no está confinado: aunque con altibajos, sigue operando y se reposiciona estratégicamente. Esto ocurre mientras el grueso de la población se encuentra agobiada y restringida por la situación. En este artículo intentamos cartografiar las coordenadas del extractivismo en la pandemia en América Latina, sus ritmos, reajustes y atajos. Resaltamos sus políticas para la expansión de fronteras, impulsar una ola de neoliberalización e imponer formas de secutirización de la vida. Finalmente, destacamos las movilizaciones, re-existencias y alternativas ante la compleja situación.

“Tenemos la oportunidad, en este momento en el cual la atención de la prensa está concentrada casi exclusivamente sobre el COVID […] ahora que la prensa está dando un poco de tregua sobre los otros temas, de aprobar las reformas infralegales de desregulación y de simplificación en materia, todas aquellas reformas de las que tenemos necesidad […] Necesitamos nuestro esfuerzo, ir ‘pasando el ganado’, ir cambiando todo el reglamento y simplificando normas del IFAM, del Ministerio de Agricultura, del Ministerio del Ambiente”.

Ricardo Salles, ministro del Ambiente de Brasil, 2 de abril de 2020

“La pandemia les venía como anillo al dedo porque nos habían metido a todos en la casa, pero al ver que el extractivismo no estaba haciendo cuarentena, nos vimos forzados a romper la cuarentena para salir a movilizarnos y además lanzar una nueva iniciativa popular con muchísimo más vigor y más fuerza que el anterior”.

Leo Travaglia, Asamblea No a la Mina de Chubut, 6 de julio de 2020

El continente americano es hoy uno de los puntos álgidos de la pandemia global de la Covid19. Misma que está generando impactos múltiples en América Latina y va trastocando las coordenadas y ejes del patrón y modo de acumulación dominante en la región: el extractivismo. Estamos en medio de un largo proceso de crisis y reestructuración sistémica muy accidentado e impredecible.

A pesar de la coyuntura y la gran inestabilidad, el extractivismo no está confinado; mucho menos está sentado esperando a que llegue el tan mentado “mundo post-covid”. El extractivismo ‘está en la calle’, tiene salvoconducto y también impunidad. Esto hay que tomarlo muy en cuenta, pues está ocurriendo mientras el grueso de la población se encuentra agobiada y restringida por la situación de la pandemia.

La orientación de una ‘nueva normalidad’ está ya en agenda y construcción en la región, que posibilite la apropiación y capitalización de la naturaleza y el trabajo, partiendo de la administración del binomio seguridad/emergencia y rescate/crisis económica. ¿Hacia dónde marchamos? En este artículo intentamos cartografiar las coordenadas del extractivismo en la pandemia. De sus ritmos, sus reajustes, sus altibajos, sus atajos. Veamos.

Commodities, crisis, pandemia y protestas: cuatro determinantes de la situación

Primeramente, las dinámicas del extractivismo en la pandemia hay que entenderlas en el marco de procesos globales, nacionales y territoriales que están siendo determinantes (y lo seguirán siendo), de los cuales es importante resaltar al menos cuatro aspectos entrelazados:

Impactos en la demanda y mercados globales de energía y commodities: en general, la pandemia ha deprimido la demanda de materias primas, provocando a su vez una caída en los precios de la mayoría de los commodities. Esto ha sido así especialmente para hidrocarburos y commodities metálicos1. Además de la estrepitosa e histórica caída de la demanda y precios del petróleo (que impacta a Venezuela, Colombia, Brasil, Ecuador, Bolivia, México, Perú o Argentina), destacan también la del cobre (afectando especialmente a Chile y Perú) y el caucho. También, aunque en menor medida, se evidencian caídas en los precios de la soja, el maíz, el café o la caña, entre otros. Muy al contrario, los precios del oro están experimentando una notable alza, que se mantienen en ascenso y rozan records. Todos estos factores tienen una alta incidencia en las dinámicas del extractivismo. Por ejemplo, la debacle petrolera va incrementando las tendencias hacia la minería, aunque está también provocando una crisis sobre los agrocombustibles (afectando los negocios sobre el maíz y la caña); se eleva el atractivo sobre los commodities agroindustriales; mientras que el alza del oro produce más presiones en la Amazonía y otros territorios campesinos e indígenas, donde existen reservas del mineral. Lo que vaya ocurriendo en este sentido será determinante sobre el curso de las tendencias que configuren al extractivismo en la región;


Procesos de ajuste económico y el desarrollo de la crisis económica: por otro lado, la pandemia emerge cuando ya América Latina venía, desde al menos 2014-2015, desarrollando una crisis económica que estaba evolucionando de la mano de una progresiva expansión de políticas neoliberales (que incluyeron a gobiernos ‘progresistas’). Organismos como la Cepal o el FMI prevén que a raíz de la pandemia se viene para Latinoamérica la peor recesión de su historia2. Esto tiene múltiples y tremendas implicaciones, entre las que destaca el hecho de usar retóricamente al extractivismo como el ‘gran salvador’ y tratar así de legitimarlo. Otra cuestión es que, de la mano de la creciente precarización de la población y del autoritarismo en los gobiernos, probablemente el extractivismo se haga mucho más conflictivo;

Dinámicas de flujo social y comercial en la pandemia: la restricción, severa en muchos casos, de la circulación de personas y el comercio, a raíz de la pandemia, ha tenido un impacto tremendo en la forma que ha tomado la crisis. Las tendencias que vayan imponiéndose en el tiempo –por ejemplo, la instauración de circulaciones permanentemente restringidas en diversas áreas, o diversas formas de desglobalización– van a ser determinantes en la ‘normalización’ de una u otra modalidad de extractivismo (dependiendo de los emprendimientos);

Emergencia, masividad y/o intensidad de las protestas y resistencias: la región ha sido un amplio territorio de movilizaciones sociales masivas contra diversas políticas anti-populares, así como de resistencias territoriales contra el extractivismo. El año 2019 fue año de explosión de estas expresiones de poder de los pueblos, que hicieron un muy importante contrapeso a los poderes establecidos. Diversas movilizaciones se han podido ver en 2020, lo que muestra que la cuarentena y el miedo al contagio pueden ser relativos. El extractivismo y sus reacomodos dependen también del nivel de las resistencias sociales que se desarrollen en los tiempos venideros.

El ‘esencial’ extractivismo no está en cuarentena: opera sobre trabajadores contagiados y los gritos de la selva

El shock social, económico y político que implicó la globalización de la pandemia, ciertamente ha estremecido todo, incluyendo las economías de la región y los emprendimientos extractivistas. Pero, en general, el extractivismo, en sus diversas facetas, ha seguido operando, y, sobre todo, las élites políticas de nuestros países se han encargado de ello, a pesar de los sensibles costos sociales, sanitarios y ambientales que conlleva en este tiempo de tanta vulnerabilidad.

En buena parte de los países latinoamericanos, mientras se declaraban estados de emergencia y se imponía el aislamiento social obligatorio, actividades como la minería, el agronegocio o la tala eran declaradas “actividades esenciales” para la economía y la sociedad, lo que implica que estas funcionan sin restricciones. Esto fue así, por ejemplo, para gobiernos como el de Fernández en Argentina, de Vizcarra (Perú) o el de Bolsonaro en Brasil. El gobierno de Lenin Moreno (Ecuador) eximió a las empresas mineras de los cierres impuestos a la población, mientras que el Gobierno de Piñera en Chile afirma que ha hecho ‘grandes esfuerzos’ para mantener la minería en pie3 durante la pandemia.

En estos críticos meses de la Covid19 en la región, ciertamente la minería ha tenido altibajos. Sin embargo, esta actividad extractiva ha tenido un lugar privilegiado y, de acuerdo a comunidades, organizaciones y trabajadores, ha actuado saltándose normas y protocolos establecidos para la coyuntura. En México, las principales empresas de la rama –como el Grupo Frisco, Fresnillo o Industrias Peñoles– de una u otra forma no han suspendido operaciones4; en Chile, la Cámara Minera de ese país se jacta de haber aumentado las cuotas de extracción en varios de sus emprendimientos de cobre y otros minerales5; en Argentina, se retoman actividades como ocurre en los yacimientos de la provincia de Santa Cruz –llegando a producir al 80% de su capacidad6–; mientras que en Brasil, se alcanzó la notable cifra de 29 toneladas de oro (oficialmente) extraídas7. Respecto a la minería ilegal (e informal), aunque en sus inicios se generó una significativa ralentización (o parón, dependiendo de los casos) de la actividad, posteriormente esta se reposicionó, como ha ocurrido en Colombia8, Perú9 y Venezuela10.

El agronegocio, en sus diversas formas, ha venido también funcionando con impunidad en casi todos los países de la región. En Colombia, nuevas fronteras son colonizadas de forma mafiosa para el acaparamiento de tierras, además de la ganadería extensiva o la agroindustria –como ocurre con el rápido crecimiento de cultivos de eucalipto y palma en las sabanas de La Fuga (Guaviare)11; en Perú persisten operaciones como las de las empresas de palma aceitera –como ocurre en Ucayali12–; e incluso se registran aumentos de las exportaciones agroindustriales como en Brasil con la carne y la soja13, o en Paraguay, con un incremento del 24% de los envíos de carne al exterior en relación a 201914.

En relación al extractivismo petrolero, este ha continuado operando, pero la crisis lo ha llevado a la baja (como ocurre en grados diversos en Colombia, Brasil, Ecuador, Perú, Venezuela, entre otros).También es relevante mencionar la continuación de otras operaciones como el tráfico ilegal de madera, como se da en el Ecuador15; o la intensificación de la pesca ilegal marítima, como sucede en la Argentina.


Lo que resalta de estas particulares dinámicas del extractivismo en la pandemia, son al menos tres factores muy perversos: en primer lugar, la persistencia del extractivismo se ha sustentado en una lógica de sacrificio humano (marcado por patrones raciales, de clase y género), al puro estilo colonial que, para mantener las actividades operativas han forzado a las y los trabajadores a exponerse al contagio del coronavirus. Esta política de poner la ganancia de unos pocos por encima de la salud de la población se repite en un grado u otro en todos los países, con la negligencia de cumplir normativas por parte de las empresas o la laxitud de controles por parte de organismos estatales. Esto se produce, por ejemplo, en las plantas de carne o en emprendimientos mineros de Brasil; con trabajadores de las plantaciones de bananos y palmeras, fábricas de mariscos o granjas de flores en Ecuador16; en empresas petroleras en el Perú17 o en mineras en Chile18 y México19. El resultado no ha sido sólo numerosos contagios de trabajadores y trabajadoras, sino que los propios emprendimientos extractivistas se van convirtiendo en importantes vectores de contagio, como ha ocurrido en Rio Grande do Sul, un centro de exportación de carne donde más de una cuarta parte de los nuevos casos confirmados de la Covid19 en mayo, fueron entre trabajadores de estas plantas industriales20.

En segundo lugar, se han replicado los terribles impactos ambientales del extractivismo, pero ahora en un tiempo de gran impunidad y con serias dificultades para poder atenderlos. Destaca el dramático aumento de la deforestación en la Amazonía: unas 75.000 hectáreas ya se registraban para abril en la parte colombiana (buena parte en bosque primario)21, mientras que sólo en mayo en Brasil se deforestaron 82.900 hectáreas22. De seguir estas tendencias, 2020 podría ser el año más destructivo para la selva amazónica. A esto hay que sumarle el desmonte de 9.000 hectáreas de bosque en el norte de Argentina – principalmente en Salta– y el avance deforestador en los departamentos de Guairá y Canindeyú en Paraguay23.

No podemos dejar de mencionar el aumento de las quemas en la Amazonía boliviana –que comienzan antes de lo previsto y de enero a mayo se registraba un 80% más de focos de calor en comparación con enero-mayo de 201924– y en la brasileña –en junio se registró la peor marca para ese mes en 13 años25–; derrames petroleros como el ocurrido en los ríos Coca y Napo en la Amazonía ecuatoriana a principios de abril –el mayor derrame de petróleo en la zona en los últimos 15 años, afectando a cerca de 120.000 personas26–; o fumigaciones con agrotóxicos, como ocurre en el centro y noreste argentino27.

En tercer lugar, lo que nos parece un elemento central: a pesar de la situación general a la que hemos llegado, en la cual la pandemia de la Covid19 es apenas el síntoma de un planeta enfermo de capitalismo y extractivismo, lo que presenciamos es no sólo una abismal ceguera de las dirigencias políticas, que ignoran cualquier alternativa o camino diferente a este; sino, y sobre todo, una pisada en el acelerador de la locomotora de la devastación, aniquilando las condiciones que permiten la vida en la Tierra, al tiempo que se potencian las vulnerabilidades sociales y se socavan las capacidades de enfrentar esta u otras perturbaciones que podrían desarrollarse en los tiempos venideros. Se camina en sentido contrario. ¿Hacia dónde marcha el extractivismo?

Horizontes extractivistas: avance estratégico y reposicionamiento del capital

Derechas, extremas derechas, centros o izquierdas: todas nos ponen más y más extractivismo en el horizonte. Ciertamente la pandemia representa también un desafío para los intereses de estas élites económicas y políticas regionales. Pero parecen dejarnos claro que, cuando hablan de la situación de la Covid como una ‘oportunidad’, se refieren a relanzar las inversiones y/o ampliar las fronteras de la apropiación y la extracción.

En este escenario, la minería queda aún más realzada. En Argentina, de los numerosos proyectos mineros que están a la espera de luz verde o reimpulso, podemos resaltar el anuncio en mayo del gobernador de la provincia de Mendoza, Rodolfo Suárez, de la reactivación del viejo Proyecto Potasio Río Colorado (cloruro de potasio)28; la celebración del secretario de Minería de Salta, Ricardo Alonso, ante el anuncio en abril de Barrick Gold de la explotación del proyecto El Quevar (plata, plomo y zinc)29; o la nueva embestida en Chubut por parte de la empresa canadiense Yamana Gold para avanzar en su proyecto de extraer oro y plata en la localidad de Esquel –¡a pesar de las históricas resistencias!–, con el apoyo de la gobernación de provincia30, y en el marco del apoyo que el presidente Fernández ha planteado antes y durante la pandemia a la actividad minera en el país.

En Venezuela, en medio de la desastrosa crisis que se vive, el 8 de abril se promulgó la Resolución N° 0010 mediante la cual se autoriza la práctica minera de oro, diamantes y demás minerales estratégicos, en importantes ríos de la Amazonía venezolana, lo que supone una dramática expansión de las áreas de explotación en el marco del devastador proyecto Arco Minero del Orinoco31. En Chile, la Comisión de Evaluación Ambiental de Valparaíso aprobó en abril, a través de videoconferencia, las prospecciones de la Compañía Minera Vizcachitas Holding –propiedad de la canadiense Los Andes Coppers– en Putaendo32, mientras que Barrick Gold anunciaba nuevas negociaciones para entrar en nuevos proyectos mineros, así como los intentos de viabilizar Pascua Lama33. Y en Ecuador, se le dieron aprobaciones regulatorias para exploraciones a la empresa australiana SolGold –que controla 75 concesiones regionales en 14 provincias del país– en los proyectos Porvenir, La Hueca y Blanca (ubicados en las provincias de Zamora Chinchipe y Carchi)34, para lo que sería la explotación de cobre y oro. En numerosos casos, presenciamos declaraciones de los ministros de minería de los países valorando a esta actividad como el ‘salvavidas’ para la reactivación de la economía, buscando legitimar viejos y nuevos proyectos, como ha ocurrido con la ministra de Energía y Minas del Perú, Susana Vilca, quien no descarta impulsar la reactivación de los polémicos proyectos Conga y Tía María, mientras pide a las comunidades que se oponen, que ‘reflexionen’ sobre su posición, ante la crisis económica que se vive35; o bien el breve (ex)ministro de minería de Bolivia, Fernando Vásquez, quien afirmaba en mayo que el gobierno buscaría todos los medios para impulsar una exploración intensiva de minerales en el país36.

Similar situación de avance y reposicionamiento se produce con el agronegocio. En Honduras, con los decretos PCM-030-2020 (abril) y su reforma PCM-041-2020 (mayo), se facilita a las empresas agroexportadoras el acceso a tierras nacionales y ejidales37, mientras que en Ecuador, el 2 de junio el pleno de la Asamblea Nacional aprobaba el proyecto de Ley para el Fortalecimiento y Desarrollo de la Producción, Comercialización, Extracción, Exportación e Industrialización de la Palma Aceitera y sus Derivados, que promueve aún más este tipo de cultivos y la producción de biodiesel –afectando también tierras comunales y áreas en conservación38. El gobierno de Añez en Bolivia autorizó a principios de junio la importación de eucaliptos para el establecimiento de plantaciones forestales comerciales, que incluye un paquete tecnológico que “utilizará material genético con características inmunológicas más fuertes”39, mientras que en Chile, en los territorios del Wallmapu, forestal Arauco aprobó en mayo un aumento de capital de casi 700 millones US$ para el cuestionado proyecto MAPA40, el mayor complejo industrial de celulosa en construcción del mundo. También, en países como Perú y Bolivia, se busca abrir el camino para la introducción de transgénicos, como veremos más adelante.

En el caso de las infraestructuras, resaltaremos el caso del polémico proyecto del Tren Maya impulsado por el gobierno de López Obrador y presentado como el ‘motor’ de la reactivación económica. El 1 de junio, a pesar de las numerosas oposiciones, AMLO inauguraba obras en tiempos de pandemia, aunque para mediados de julio las mismas fueron detenidas por atentar contra la salud de comunidades y pueblos indígenas41.

Sin embargo, y a diferencia de los otros sectores mencionados, como ya señalamos el sector hidrocarburos se encuentra en serias dificultades dadas las particulares circunstancias energéticas globales. Importantes caídas y estancamiento en las inversiones han generado el estrangulamiento de algunos emprendimientos y las proyecciones son muy inciertas, muchas de ellas pesimistas. Esto de ninguna manera supone que este tipo de extractivismo de un paso al costado. De hecho, mientras Ecuador se encontraba en cuarentena y estado de excepción, una nueva carretera de 2,2 kilómetros se ha venido construyendo desde mediados de marzo en el controvertido Bloque 43, más conocido como ITT, ubicado en el corazón del Parque Yasuní (en la Amazonía) –según lo revela un reciente reporte de MAAP42.

En todo caso es muy relevante mencionar que los que quedan en una comprometida situación son los proyectos de hidrocarburos no convencionales, poniéndose seriamente en entredicho su viabilidad, como ocurre con Vaca Muerta en Argentina o la Faja Petrolífera del Orinoco en Venezuela. En el caso de Pre-sal en Brasil, probablemente queden inactivas las plataformas de aguas poco profundas con mayores costos de extracción (al menos temporalmente)43, mientras que la crisis parece allanar el camino hacia privatizaciones. Unas 18 empresas del fracking en los Estados Unidos han ido a la quiebra, entre las que se cuenta la pionera de esta técnica, Chesapeake Energy44. A pesar de este contexto, el presidente Iván Duque se ha mantenido activo e insistente en la promoción del fracking en Colombia, y a principios de julio la administración de Ecopetrol se asoció con la multinacional ExxonMobil para la puesta en marcha de los proyectos piloto en el Magdalena Medio45. ¿Cómo lo va a sostener económicamente? ¿A quiénes se le va a cargar la cuenta?

‘Pasando el ganado’: dejar colar una ola de flexibilización, endeudamiento y desregulación del extractivismo

Cuando el ministro del ambiente del Gobierno de Bolsonaro, Ricardo Alles, afirmaba con total crudeza y cinismo –en un video filtrado de abril de este año–, que había que aprovechar que la gente y la prensa estaban distraídas con la pandemia para impulsar una desregulación de la política ambiental del país46, para “ir pasando el ganado”, estaba no sólo mostrando la grotesca y desinhibida forma del extractivismo actual en Brasil, sino también lo que en realidad es una política compartida en la región, aunque varíe en sus grados de intensidad e intencionalidad. Como típica expresión de un proceso de acumulación por desposesión, estos movimientos de avance estratégico y reposicionamiento del extractivismo en la región vienen aparejados de lo que podría ser una ola de flexibilización, endeudamiento y desregulación, ante la cual hay que tener mucha atención. Aquí mencionamos al menos 4 modalidades de este proceso:

Eliminación, congelamiento o entorpecimiento de evaluaciones y leyes de protección ambientales: en Chile durante la pandemia se ha introducido más del doble de la cantidad de proyectos que el promedio de los dos años anteriores, para ser escrutados en el Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental. En un informe presentado por el Observatorio Latinoamericano de Conflictos Ambientales (OLCA), la organización indica que los más de 500 proyectos en calificación superan con creces la capacidad de evaluación de la institución, a pesar de que las Asociaciones de Funcionarios Públicos de los Servicios Ambientales del Estado, han solicitado públicamente congelar todos los procedimientos en este periodo, dado que provocará una precaria y deficiente evaluación ambiental47. Olca también señala que, durante el estado de excepción, la autoridad ambiental ha congelado el trámite de evaluación ambiental para proyectos que contemplan la Participación Ciudadana (PAC) y/o deben hacer consulta indígena. Esto se intensifica con el llamado “Acuerdo Covid” alcanzado a mediados de junio entre el Gobierno de Piñera y parte de la oposición, el cual contempla la reducción de los plazos en evaluación ambiental de grandes proyectos48. Por otro lado, en Colombia, el gobierno nacional ha resuelto que audiencias públicas para el otorgamiento de licencias ambientales se realicen en línea, como se ha evidenciado en el caso del proyecto aurífero Soto Norte en el páramo de Santurbán, lo que ha sido denunciado por el Comité para la Defensa del Agua y los Páramos de Santurbán49. Misma situación se registra en Honduras, siendo que la Secretaría de Recursos Naturales y Ambiente de ese país anunció el 31 de marzo que los trámites para licencias ambientales se pueden hacer de manera virtual, señalando la necesidad de no detener la operatividad del comercio y las empresas, ni la promoción de la inversión en el país50.

Facilitación y aprobación de ingreso de nuevos insumos para el extractivismo: en Bolivia, el 8 de mayo el gobierno de Añez le dio paso a la autorización al Comité Nacional de Bioseguridad para establecer procedimientos abreviados para la evaluación de eventos transgénicos, en cultivos como el maíz, la caña de azúcar, el algodón, el trigo y la soja (Decreto Supremo 4232)51. Situación un tanto similar se presenta en Perú donde, después de una moratoria de 10 años, el gobierno ha emitido un decreto, el 22 de mayo, en el cual ordena que se publique el reglamento que regula, con criterios de seguridad de la biotecnología, el desarrollo de actividades con Organismos Vivos Modificados (OVM) en el sector agrario52. Diversas organizaciones han señalado que se trata del primer paso para la liberación de transgénicos en el país, declarándose públicamente contra este decreto. En Brasil, entre marzo y mayo, el gobierno de Bolsonaro ha aprobado 118 nuevos agrotóxicos para ser vendidos en el mercado nacional, superando el registro del año pasado (que fue record) para el mismo período53. Algo parecido se da en la Argentina cuando, en un claro favor al agronegocio, el ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Solá –mismo ministro de Menem que en aquel entonces le abrió la puerta del país a los ‘paquetes tecnológicos’– redujo a finales de abril aranceles para potenciar la importación para la fabricación de los herbicidas glifosato y 24D en el país. Esto, en el marco del Acuerdo de Complementación Económica del Mercosur54.

Flexibilización y reducción de obligaciones laborales y sanitarias: en numerosos casos en varios países, como mencionamos anteriormente, además de otorgársele prioridad a los emprendimientos extractivistas antes que, a la salud de la población, se han generado reclamos y conflictos por parte de sindicatos, comunidades, organizaciones sociales y gobiernos locales ante el incremento de los contagios en los trabajadores y las malas condiciones para el desarrollo de las jornadas. Esto se dio también por omisión e incumplimiento de protocolos, complicidad gubernamental o medidas directas de favorecimiento a las empresas. Por ejemplo, en Perú, bajo presión de las empresas mineras entre mayo y junio se realizaron modificaciones el protocolo del Ministerio de Energía y Minas en relación a la protección de la salud de los trabajadores, lo que para Cooperación se trata de una acción en pro de estas grandes empresas. Dicha modificación supuso medidas como la reducción de la distancia social mínima que debe existir entre los trabajadores en varios espacios de los centros laborales, reducción del números de personas comprendidas en la categoría ‘grupo de riesgo’ o la eliminación de la especificación de que el Comité de Seguridad y Salud en el Trabajo es la instancia encargada de la aprobación del Plan para la vigilancia, prevención y control del COVID-19 en el trabajo55.

Formas de endeudamiento para el extractivismo: podríamos mencionar al menos dos modalidades resaltantes relacionadas con formas de ejercer poder a partir del financiamiento, requerido por gobiernos locales y nacionales en estos tiempos de crisis. En primer lugar, el caso de empresas que realizan sustanciosas ‘donaciones’ de dinero para ‘causa social’ y para afrontar la pandemia, generando claros conflictos de interés y promoviendo formas de captura corporativa del Estado. Un caso claro de esto es la muy cuestionada transnacional minera Barrick Gold, la cual, a la par que en el contexto de la pandemia dona un hospital de campaña por más de 10.000 millones de pesos (unos 13 millones de US$) y anuncia posibles inversiones por 3.500 millones de US$ en el país, declara que su idea es encontrar ‘rápidamente’ un proyecto de primer nivel y dice que la industria minera jugará un rol fundamental en la recuperación económica chilena tras superar la pandemia56. Similar situación se evidencia en Brasil, cuando apenas unos días después que empresas mineras como la Vale, donara al gobierno federal 5 millones de kits de análisis para Covid19, el Ministerio de Energía y Minas aprobó la resolución 135/2020 que catalogó a la minería como ‘actividad esencial’57. En segundo lugar, está una forma de endeudamiento de tipo macro, que vincula la deuda pública asumida por gobiernos locales y/o nacionales con viejos y nuevos proyectos extractivistas. En Argentina –caracterizada por su alto nivel de endeudamiento–, existe un proyecto de reestructuración de la deuda pública de la provincia de Chubut presentado por el gobernador Arcioni en junio que, según señala la Unión de Asamblea de Comunidades de Chubut, implicaría aceptar entregar ingresos de coparticipación municipal y provincial, y/o regalías de los bienes comunes naturales de la provincia como garantía. Esto se conecta con la declaración en video-conferencia que el 28 de mayo hiciese el Secretario de Minería de la Nación, Alberto Hensel, quien afirmó que están trabajando en un plan estratégico para el desarrollo minero argentino, con el fin de atraer divisas para pagar la deuda interna generada en este contexto de aislamiento social obligatorio. El otro que habló en dicha conferencia fue Alfredo Luenzo, senador por Chubut58.

Las precarias democracias no pueden respirar: securitización de la pandemia, continuidades del estado de excepción y vulneración de lo público

El surgimiento de la pandemia se produce cuando en América Latina, en el marco del fin del llamado ‘período progresista’, fue tomando determinante fuerza la presencia de lógicas del estado de excepción y el incremento de la violencia extractivista. Este nuevo estado de emergencia no sólo abre una nueva fase de este proceso de excepcionalidad, reorganizando y redefiniendo las gobernanzas, sino también, de una u otra forma, se va articulando con el avance estratégico y reposicionamiento del extractivismo. La serie de nuevas reformas, proyectos de inversión, ajustes y reestructuraciones en curso, intentan también apoyarse en los nuevos regímenes de poder de la pandemia, en nuevas biopolíticas, cosa que además evoluciona en un escenario que es y será más conflictivo.

En este sentido, conviene examinar cómo se configuran los marcos generales de este proceso, así como las políticas y dinámicas en los territorios. En relación a lo primero, además de una generalización de las declaraciones formales de estado de emergencia y/o de excepción en los países de la región, podríamos afirmar que nos encontramos ante un proceso de securitización de la pandemia. Esto tiene múltiples y profundas implicaciones, entre las que es importante resaltar una militarización de cada vez más ámbitos de la vida; mayor potestad de los Estados sobre los cuerpos, sus movilidades y su clasificación; una mayor politización de los criterios de bioseguridad; una mayor cabida a enfoques neo-darwinistas y/o neo-malthusianos; o el manejo a conveniencia de narrativas sobre la emergencia y la tipificación de amenazas por parte de los Estados y las corporaciones. La crisis que va dejando la pandemia, se ha traducido en una mayor debilidad de las instituciones, mientras que los espacios de deliberación y participación política van quedando relegados –destacando la postergación del plebiscito sobre la reforma constitucional en Chile y de las elecciones presidenciales en Bolivia. Del mismo modo se va generando una vulneración del ámbito y el espacio público, el cual va perdiendo contrapesos y formas de escrutinio, mientras la población y sus derechos van quedando más expuestos ante diversas formas de violencia oficial y extralegal. Todo esto configura un escenario enrarecido que ha servido para impulsar mayores formas de control social y de justificación de las mismas, al tiempo que estas han venido siendo aprovechadas en pro de un avance estratégico y reposicionamiento del extractivismo.

En lo que se refiere a las políticas y dinámicas que se expresan en los territorios, el marco descrito supone severas dificultades para los defensores y líderes sociales, así como para organizaciones de derechos humanos y de defensa del ambiente. En los tiempos de pandemia hemos visto cómo en Perú, desde fines de marzo, el gobierno de Vizcarra aprobó la anteriormente promulgada «Ley de Protección Policial», que permite el uso de fuerza letal, con total impunidad, por parte de la policía y el ejército59; en Guatemala, El Salvador y Honduras se imponen toques de queda y se endurecen sanciones a quienes rompen la cuarentena, siendo que en este último país se señala un incremento del hostigamiento policial y de las detenciones ilegales60, algo también denunciado en México en contra de defensores del territorio61. En Bolivia, el gobierno de Añez ha aumentado la represión ante las protestas sociales por la crisis, ha encarcelado decenas de opositores políticos y restringido seriamente la libertad de información, a través del decreto supremo 4.200 del 25 de marzo62. En Venezuela, el presidente Maduro y otros actores estatales han criminalizado a los migrantes venezolanos que entran al país por pasos fronterizos irregulares, acusándolos de ser parte de un plan foráneo para ‘contaminar’ a Venezuela63, siendo que el Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada llegó a calificarlos como “bio-terroristas”64. Y en tiempo de pandemia, persisten los dramáticos asesinatos de líderes sociales en Colombia (así como de excombatientes de las Farc)65; cosa que también se replica en Honduras, y con periodistas y activistas en México66.

Sorteando la cuarentena, defendiendo la vida: contrapesos y re-existencias populares y comunitarias

Ciertamente tenemos ante nosotros un escenario muy complejo en el que vemos cómo las lógicas de expolio, racismo, explotación, despojo, colonialismo y precariedad entran en una nueva fase con la pandemia, planteándonos extraordinarios desafíos. Como hemos visto, el extractivismo se moviliza, reacomoda y reposiciona en América Latina ante la situación. Sin embargo, no debemos de ninguna manera asumir este movimiento y ajuste extractivista como un proceso unilateral, estable, lineal e irresistible. La crisis en la que nos encontramos es de tal profundidad que no se trata sólo de si un sector económico se hunde y otro emerge o se fortalece. Lo que enfrentamos es una crisis del orden histórico civilizatorio, en la que se revela no sólo la inviabilidad del sistema capitalista global, con sus contradicciones a nivel máximo, sino también el que hayamos alcanzado un punto de degradación de los ecosistemas del planeta Tierra que está poniendo en serio peligro la vida tal y como la conocemos. La pandemia es no sólo un síntoma de esta profunda crisis, sino que está representando un punto de inflexión para que muchas cosas ya no vuelvan a ser como eran hasta ahora.

Si asumimos pues que se están moviendo las placas tectónicas del orden histórico civilizatorio, esto impacta, como hemos mencionado, no sólo a los pueblos sino incluso a las élites económicas y políticas, a la viabilidad de sus proyectos económicos, a la perdurabilidad de sus particulares sistemas de dominación. La volatilidad y la incertidumbre son la marca de la normalidad actual y futura. Nada está garantizado y absolutamente todo está en disputa.

Así que quedan ciertamente vías y caminos abiertos. Es en este sentido que se ha afirmado que la pandemia nos abre también oportunidades. Pero el aprovechamiento de dichas oportunidades y la emergencia de nuevas alternativas societales que tributen a los pueblos y a la vida en la Tierra, no surgirán espontáneamente. Muy al contrario, requerirá de los pueblos en movimiento y la organización social, grandes esfuerzos y lucha.

En este sentido, si el extractivismo se va volviendo cada vez más autoritario y agresivo, entonces hay que resaltar la fuerza de las masivas movilizaciones sociales en América Latina, las cuales no sólo nos revela el descontento de las poblaciones de la región ante el estado actual de cosas, confronta a los crecientes procesos de neoliberalización, cambia favorablemente la correlación de fuerzas, sino también potencia procesos democratizadores, abre caminos para posibilitar y expandir las democracias. Las causas que originaron los malestares, rabias y las extraordinarias movilizaciones que se vieron en Latinoamérica en 2019 siguen estando ahí, sin resolverse. El 2020 también nos ha mostrado que los pueblos siguen en las calles, buscando reformular la expresión de sus descontentos ante estos tiempos de pandemia, mientras que buscan adaptarse a las nuevas situaciones y encontrar nuevos sentidos de lo político. A pesar de los confinamientos, la impunidad, el estado de excepción y la constante inyección de miedo a la población, al profundizar la crisis e intensificar todos los males del sistema imperante, la pandemia también está generando las condiciones para más y nuevas protestas y estallidos sociales.

Pero si ponemos la mirada en la especificidad de los territorios en este período, también presenciamos movilización, organización y resistencia. En Argentina, ante los intentos de imponer nuevos proyectos mineros en la provincia, la Unión de Asambleas de Comunidades de Chubut rompió con la cuarentena para movilizarse, al ver que extractivismo no la estaba cumpliendo. A partir de ahí lanzaron una propuesta más fuerte, que convoca a más de 20 localidades: el proyecto de ley de Iniciativa Popular (IP) 2020, una herramienta legislativa planteada para proteger a la provincia de la avanzada minera en los territorios67. En Chile se ha producido una situación similar en Putaendo (provincia de San Felipe de Aconcagua), cuando los vecinos se han movilizado desde abril para manifestar contra las nuevas pretensiones de la minería (Vizcachitas Holding) en sus territorios y en defensa del agua68. En la Amazonía peruana, pueblos indígenas como el Awajún, en territorios que han sido muy afectados por la minería informal, cerraron sus comunidades desde inicios de la pandemia al ingreso de otras personas69. En México, desde el 21 de abril 290 organizaciones, colectivos, comunidades y personas de varios estados del país han exigido mediante diversas acciones legales (como demandas de amparo y medidas cautelares) el cese de las actividades del proyecto del Tren Maya por riesgo sanitario, además de solicitar las garantías de participación equitativas para las comunidades afectadas, lo que finalmente se tradujo en una orden de paralización del proyecto a fines de junio70. Y en Venezuela, comunidades de Maripa, en el estado Bolívar, ha protestado en contra de la instalación de nuevas plataformas para la explotación minera en el Río Caura –en el marco del Arco Minero del Orinoco–, además de la situación de precariedad de los servicios públicos en la zona.

El cuestionamiento al extractivismo en América Latina sigue siendo fuerte. Las élites económicas y políticas intentan ya en la pandemia reposicionarlo y legitimarlo como un ‘salvador’ de la economía, por lo que la disputa por los caminos que debemos transitar para ‘salir de la crisis’ será muy intensa. Muy al contrario de ideas como estas, este es un tiempo propicio y necesario para el post-extractivismo. Nos encontramos en una encrucijada como región y como planeta, y la opción no puede ser retomar o insistir en esa ‘normalidad’ expoliadora y depredadora. Es fundamental crear y promover espacios de confluencia de las diferentes luchas en las que se puedan tejer redes de acción, compartir visiones estratégicas y establecer algunos horizontes comunes. Espacios como el Pacto Eco-social del Sur71 permiten hacer confluir propuestas e iniciativas congregadoras para la región, tales como la solicitud de la condonación de la deuda externa –que contribuye no sólo a frenar la debacle que produce la pandemia sino también al extractivismo, que se sustenta en dicho endeudamiento–, una transformación tributaria solidaria o la construcción de economías y sociedades postextractivistas. Por su parte, la Asamblea Mundial Amazónica, realizada desde el 17 de julio, ha permitido articular organizaciones de varias partes del mundo con el fin de generar movilizaciones urgentes ante la situación de esta delicada biorregión72.

El extractivismo es hoy, más que nunca, una opción de muerte y destrucción. Quienes defienden la vida están convocados a oponerse a ello, reivindicando su derecho a existir y a re-existir.

-Emiliano Terán Mantovani es sociólogo venezolano, miembro del Observatorio de Ecología Política de Venezuela

1 The World Bank. Most Commodity Prices to Drop in 2020 As Coronavirus Depresses Demand and Disrupts Supply. https://www.worldbank.org/en/news/press-release/2020/04/23/most-commodity-prices-to-drop-in-2020-as-coronavirus-depresses-demand-and-disrupts-supply

2 ONU. América Latina sufrirá la mayor recesión económica de su historia por el coronavirus. https://news.un.org/es/story/2020/04/1473192. FMI. Perspectivas para América Latina y el Caribe: La pandemia se intensifica. https://blog-dialogoafondo.imf.org/?p=13682

3 Radio Agricultura. Ministro Prokurica y el escenario minero por la pandemia: “No está en normalidad, pero con un gran esfuerzo ha tenido un resultado que es muy distinto”.

https://www.radioagricultura.cl/economia/2020/06/24/ministro-prokurica-y-el-escenario-minero-por-la-pandemia-la-mineria-no-esta-en-normalidad-pero-con-un-gran-esfuerzo-ha-tenido-un-resultado-que-es-muy-distinto.html

4 Voces desde el territorio. Como la industria minera mundial se está beneficiando con la pandemia de Covid-19. http://agenciaecologista.info/wp-content/uploads/2020/06/voces_desde_el_territorio_-_web.pdf

5 Guía Minera de Chile. Algo bueno en medio de la pandemia. https://www.guiaminera.cl/algo-bueno-en-medio-de-la-pandemia/

6 Mariana Cabezuelo. Los yacimientos mineros de Santa Cruz producen al 80% de su capacidad en el marco de la pandemia. https://www.telam.com.ar/notas/202006/476766-yacimientos-mineros-santa-cruz-produccion-80-por-ciento.html

7 Maurício Angelo. Em plena pandemia, extração de ouro aumenta na Amazônia. https://brasil.mongabay.com/2020/07/em-plena-pandemia-extracao-de-ouro-aumenta-na-amazonia/

8 Voces desde el territorio. Op cit.

9 Sergio Saffon. Alza en precios del oro durante la pandemia atiza minería ilegal en Perú. https://es.insightcrime.org/noticias/noticias-del-dia/peru-coronavirus-mineria-ilegal/

10 La Voce d’Italia. Actividad minera en el Callao se mantiene cumpliendo protocolos. https://voce.com.ve/2020/07/03/509190/actividad-minera-en-el-callao-se-mantiene-cumpliendo-protocolos-audio-noticia/

11 Semana. La deforestación no guarda cuarentena en Colombia. https://www.semana.com/nacion/articulo/la-deforestacion-en-colombia-no-guarda-cuarentena/681041

12 Orpio. Empresas petroleras y de tala siguen funcionando y ponen en riesgo la vida de pueblos indígenas ante el COVID-19. http://www.orpio.org.pe/?p=1491

13 GRAIN. Agro-imperialismo en tiempos de Covid-19. https://www.grain.org/es/article/6509

14 Aldo Benítez. Paraguay es el segundo país más deforestador de Sudamérica. https://www.lanacion.com.py/pais/2020/06/15/paraguay-es-el-segundo-pais-mas-deforestador-de-sudamerica/

15 El Universo. Pandemia no ha frenado deforestación y tala ilegal en Ecuador. https://www.eluniverso.com/noticias/2020/07/08/nota/7898247/deforestacion-tala-ilegal-reduccion-bosques-naturales-nativos

16 GRAIN. Op cit.

17 Orpio. Op cit.

18 Meritxell Freixas. Alerta en la industria minera de Chile por miles de contagios de sus trabajadores. https://www.publico.es/internacional/covid-19-chile-alerta-industria-minera-chile-miles-contagios-trabajadores.html

19 Otros Mundos AC. COVID-19: Las empresas mineras ponen a los trabajadores y a las comunidades en el mayor riesgo. https://otrosmundoschiapas.org/covid-19-las-empresas-mineras-ponen-a-los-trabajadores-y-a-las-comunidades-en-el-mayor-riesgo/

20 GRAIN. Op cit.

21 Semana. Op cit.

22 Semana Sostenible. Deforestación en la Amazonia brasileña bate nuevo récord en mayo. https://sostenibilidad.semana.com/medio-ambiente/articulo/deforestacion-en-la-amazonia-brasilena-bate-nuevo-record-en-mayo/51944

23 GRAIN. Agribusiness must be quarantined! https://www.grain.org/en/article/6470-agribusiness-must-be-quarantined

24 Javier Aliaga. Las quemas comienzan en Bolivia y hacen temer otro desastre ambiental. https://www.france24.com/es/20200507-quemas-agricultura-bolivia-chiquitania-amazonas

25 Latinoamérica piensa. Brasil registró en junio el mayor número de incendios en el Amazonas en 13 años y temen por sus consecuencias durante la pandemia. https://latinoamericapiensa.com/brasil-registro-en-junio-el-mayor-numero-de-incendios-en-el-amazonas-en-13-anos-y-temen-por-sus-consecuencias-durante-la-pandemia/25806/

26 CONAIE. René Ortiz impulsará la minería a gran escala en medio de Covid 19.

https://conaie.org/2020/04/23/gobierno-de-ecuador-reforzara-politicas-extractivistas-en-medio-de-covid-19/

27 GRAIN. Agribusiness must be quarantined!

28 Radio Nacional. Los intentos históricos de reactivación del Proyecto Potasio Río Colorado. http://www.radionacional.com.ar/los-intentos-historicos-de-reactivacion-del-proyecto-potasio-rio-colorado/

29 El Inversor. Salta: Ricardo Alonso destacó la inversión de Barrick en la provincia. http://www.elinversorenergetico.com/salta-ricardo-alonso-destaco-la-inversion-de-barrick-en-la-provincia/

30 Telam. Extractivismo a full en la pandemia. https://noalamina.org/mundo/item/43977-extractivismo-a-full-en-la-pandemia. Prensa GeoMinera. ¿Se abre una nueva puerta para la minería en Chubut? https://perfilindustrial.com/se-abre-una-nueva-puerta-para-la-mineria-en-chubut/

31 Cerlas. Resolución N° 0010: Una medida ilegal que agrava la destrucción y envenenamiento de nuestras fuentes de agua. https://www.ecopoliticavenezuela.org/2020/05/13/resolucion-n-0010-una-medida-ilegal-que-agrava-la-destruccion-y-envenenamiento-de-nuestras-fuentes-de-agua/

32 El Mostrador. Indignación provoca la aprobación online de proyecto de sondajes mineros en Putaendo. https://www.elmostrador.cl/noticias/pais/2020/04/22/indignacion-provoca-la-aprobacion-online-de-proyecto-de-sondajes-mineros-en-putaendo/

33 Asamblea por el Agua del Guasco Alto. La minería es una pandemia. Barrick no salva vidas, las pone en riesgo. https://www.mapuexpress.org/2020/06/10/asamblea-por-el-agua-del-guasco-alto-la-mineria-es-una-pandemia-barrick-no-salva-vidas-las-pone-en-riesgo/

34 SolGold. SolGold PLC Announces Regional Exploration Update. https://apnews.com/0541b735e32591f92ec34b4c56758caa

35 Gestión. Reactivación de proyectos Conga y Tía María “tiene que darse en algún momento”, dice el Minem. http://www.iimp.org.pe/actualidad/reactivacion-de-proyectos-conga-y-tia-maria-%E2%80%9Ctiene-que-darse-en-algun-momento%E2%80%9D,-dice-el-minem

36 Miguel Angel Melendres. Nuevo ministro de Minería propone ingresar a una exploración intensiva de minerales. https://eldeber.com.bo/economia/nuevo-ministro-de-mineria-propone-ingresar-a-una-exploracion-intensiva-de-minerales_178307

37 Cespad. Coyuntura desde los territorios | Honduras: Saqueo extractivista y defensa del territorio en tiempos de COVID-19. http://cespad.org.hn/2020/06/05/coyuntura-desde-los-honduras-saqueo-extractivista-y-defensa-del-territorio-en-tiempos-de-covid-19/

38 Priscila Alvarado. La Asamblea aprobó por unanimidad la Ley de la Palma Aceitera. https://www.elcomercio.com/actualidad/asamblea-aprobo-ley-palma-aceitera.html

39 José Carlos Solón y Guillermo Villalobos. Eucaliptos para matar la biodiversidad. https://fundacionsolon.org/2020/06/26/eucaliptos-para-matar-la-biodiversidad/

40 Karen Peña. Arauco aprueba millonario aumento de capital para financiar proyectos y fortalecer posición financiera. https://www.df.cl/noticias/empresas/industria/arauco-aprueba-millonario-aumento-de-capital-para-financiar-proyectos-y/2020-05-19/215132.html

41 Elam Náfate. Amparos detienen al Tren Maya. https://www.elsoldemexico.com.mx/mexico/sociedad/amparos-detienen-al-tren-maya-proceso-legal-demandas-fonatur-gobierno-covid-19-coronavirus-5506854.html

42 Antonio Paz. Parque Yasuní: estudio muestra nueva carretera que se dirige a territorio de indígenas aislados de Ecuador. https://es.mongabay.com/2020/06/carretera-parque-yasuni-ecuador-indigenas-aislados-y-petroleo/

43 Gonzalo Escribano. Energía y COVID-19 en América Latina: un impacto heterogéneo por sectores y países. http://www.realinstitutoelcano.org/wps/wcm/connect/5ac80f3d-042a-4043-b5aa-1e7202096445/ARI55-2020-Escribano-Energia-y-COVID-19-en-America-Latina-impacto-heterogeneo-por-sectores-paises.pdf?MOD=AJPERES&CACHEID=5ac80f3d-042a-4043-b5aa-1e7202096445

44 Europa Press. La pionera del ‘fracking’ Chesapeake Energy se declara en quiebra. https://m.europapress.es/economia/noticia-pionera-fracking-chesapeake-energy-declara-quiebra-20200629102223.html

45 Alfonso López Suarez. Exxon, socio de Ecopetrol para pilotos de ‘fracking’. https://www.portafolio.co/economia/exxon-socio-de-ecopetrol-para-pilotos-de-fracking-542331

46 Fridays for Future Italia. VIDEO:Ricardo Salles, ministro dell’Ambiente brasiliano e la Shock Doctrine durante la pandemia. https://www.youtube.com/watch?v=QIMS34-PTto

47 OLCA. Informe sobre ingreso abusivo de proyectos al SEIA en tiempos de Pandemia, http://olca.cl/oca/informes/Informe-sobre-ingreso-abusivo-de-proyectos-al-SEIA-en-tiempos-de-Pandemia.pdf

48 El Ciudadano. La letra chica del «acuerdo covid» que acelerará la depredación ambiental en Chile. https://consumidoresorganicos.org/2020/06/18/la-letra-chica-del-acuerdo-covid-que-acelerara-la-depredacion-ambiental-en-chile/

49 Voces desde el territorio. Op cit. @ComiteSanturban: https://twitter.com/ComiteSanturban/status/1252783250625499143

50 Cespad. Op cit.

51 Chaski Clandestina. Bolivia en la vorágine agroextractivista. Trangénicos y la nueva ofensiva del estado, las multinacionales y el agronegocio. https://chaskiclandestina.org/2020/05/11/bolivia-en-la-voragine-agroextractivista-trangenicos-y-la-nueva-ofensiva-del-estado-las-multinacionales-y-el-agronegocio/

52 Gerardo Saravia. A los transgénicos se les acaba el toque de queda. https://www.servindi.org/actualidad-opinion/15/07/2020/los-transgenicos-se-les-acaba-el-toque-de-queda

53 Pedro Grigori. Em meio à pandemia, governo Bolsonaro aprova 118 agrotóxicos em dois meses. https://apublica.org/2020/05/em-meio-a-pandemia-governo-bolsonaro-aprova-96-agrotoxicos-em-dois-meses/

54 Por el País. El Gobierno incentiva el uso de agrotóxicos con una baja de aranceles. http://porelpais.com.ar/el-gobierno-incentiva-el-uso-de-agrotoxicos-con-una-baja-de-aranceles/

55 Gretta Zegarra. Un protocolo acorde a los intereses de las grandes mineras. http://cooperaccion.org.pe/un-protocolo-acorde-a-los-intereses-de-las-grandes-empresas-mineras/

56 Asamblea por el Agua del Guasco Alto. Op cit.

57 Voces desde el territorio. Op cit.

58 Debora Cerutti. Chubut: no hay cuarentena para el extractivismo. https://latinta.com.ar/2020/06/chubut-no-hay-cuarentena-extractivismo/

59 Voces desde el territorio. Op cit.

60 Cespad. Op cit.

61 REMA. Comunicado de la Red Mexicana de Afectadas y Afectados por la Minería REMA – A 26 de abril de 2020. https://otrosmundoschiapas.org/que-gobiernos-detendra-el-saqueo-de-carlos-slim/

62 Lola Allen. El covid-19, el pretexto para la represión de opositores políticos al Gobierno de Áñez en Bolivia. https://www.elsaltodiario.com/mapas/regimen-bolivia-covid-19-reprimir-rivales-politicos

63 América Digital. Maduro sataniza a los «Trocheros» que les urge regresar a Venezuela por la pandemia. https://www.youtube.com/watch?v=dFzINFin5sg

64 @ceofanb. https://twitter.com/Libertad020/status/1283181119031173120

65 Radio Nacional de Colombia. ONU alerta por asesinatos de líderes y excombatientes durante la pandemia. https://www.radionacional.co/noticia/actualidad/onu-alerta-de-asesinatos-de-lideres-excombatientes-durante-la-pandemia

66 Voces desde el territorio. Op cit.

67 Anred. Bajo el lema “Nos deben una ley” Chubut lanzó la Segunda Iniciativa Popular contra la megaminería. https://www.anred.org/2020/06/30/bajo-el-lema-nos-deben-una-ley-chubut-lanzo-la-seguna-iniciativa-popular-contra-la-megamineria/. La Izquierda Diario. Chubut: el extractivismo no se toma cuarentena. http://www.laizquierdadiario.com/Chubut-el-extractivismo-no-se-toma-cuarentena

68 Diario UChile. Putaendo resiste ante la invasión minera en el valle de Aconcagua. https://radio.uchile.cl/2020/04/28/putaendo-resiste-ante-la-invasion-minera-en-el-valle-de-aconcagua/

69 Yvette Sierra. “Esta pandemia nos está quitando a nuestros sabios”: la tragedia del COVID 19 en los pueblos awajún y wampis. https://es.mongabay.com/2020/07/peru-santiago-manuin-lideres-indigenas-awajun-covid-19/

70 Elam Náfate. Op cit.

71 https://pactoecosocialdelsur.com/

72 https://asambleamundialamazonia.org/

https://www.alainet.org/es/articulo/208103

Colombia

Avanza protesta en redes sociales para impedir minería en el Páramo de Santurbán

28/07/2020
Páramo de Santurbán.
Foto: Colprensa – Vanguardia Liberal

Bajo el hasthtag #ConMinesaMásPobreza, usuarios en redes sociales se han manifestado este martes en contra de las intenciones de la empresa árabe de desarrollar extracción de oro en cercanías al Páramo de Santurbán, región de Soto Norte, en el departamento de Santander,

La protesta, que se adelanta desde las 8:00 de la mañana en Twitter, se desató tras las recientes declaraciones de la viceministra de Minas, Carolina Rojas, en las que comentó que el objetivo del Gobierno es duplicar la producción de oro en el país, a partir de la adjudicación de este y otros proyectos.

De esta forma, ambientalistas muestran su descontento ante el proceso de licenciamiento que adelanta Minesa ante la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales- ANLA- para extracción minera en las inmediaciones de dicha reserva natural

Lea también: Habla mujer víctima de robo en Barrancabermeja cuya defensa se hizo viral

Los defensores de los recursos naturales del páramo temen que se aproveche la crisis de la pandemia para avanzar este tipo de proyectos.

Mayerly López, miembro de la defensa del páramo de Santurbán, dijo que la ministra confundía minería artesanal con minería a gran escala, y rechazó las afirmaciones que dicen que el proyecto no se daría en áreas protegidas, sino por fuera del páramo. Según ella, las autoridades ambientales han sido enfáticas en que el proyecto sí comprendería áreas protegidas.

Según López, la preocupación aumenta porque la ministra dio por hecho el proyecto.
https://www.elpais.com.co/colombia/avanza-protesta-en-redes-sociales-para-impedir-mineria-en-el-paramo-de-santurban.html

Mexico

Minera canadiense contaminó capa freática en Magdalena Ocotlán, Oaxaca

Jorge A. Pérez Alfonso, corresponsal, 27/07/2020
Imagen tomada de la página de internet del Colectivo Oaxaqueño en Defensa de los Territorios.
Oaxaca. Integrantes del Frente No a la Minería por un Futuro de Todas y Todos denunciaron que la minera Cuzcatlán, operada por la empresa canadiense Fortuna Silver, ha contaminado la capa frieática del municipio de Magdalena Ocotlán.

El presidente municipal de Magdalena, Pedro Máximo Aquino, cuya localidad se ubica en el Valle de Ocotlán a 50 kilómetros de la ciudad de Oaxaca, dijo que lamentablemente hasta este lunes las autoridades estatales y federales no han intervenido.

Pese a esto la empresa ha solicitado, por segunda ocasión, un nuevo permiso de explotación para el proyecto «San José II», mismo que está en análisis por parte de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

El funcionario demandó, a nombre del frente y de sus ciudadanos, que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realice una investigación de la contaminación ocasionada por esta minera la cual, se ubica en San José del Progreso.

Lo más importante es que se repare el daño que se ha ocasionado, pero también que se les impongan sanciones ejemplares para que este tipo de situaciones no ocurran; pero además, que de ser posible se suspenda la concesión de dicha empresa, comentó

Esta es la segunda ocasión en que se contaminan la capa freática, lo que afecta a la comunidad que se dedica a la producción agrícola, explicó.

De igual manera, solicitaron la intervención de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) para que acudan a la comunidad y realicen un estudio de los mantos freáticos, para determinar en qué condición de encuentran luego de la contaminación.
https://www.jornada.com.mx/ultimas/economia/2020/07/27/minera-canadiense-contamino-capa-freatica-en-magdalena-ocotlan-oaxaca-5466.html

Perú

TANTAS VECES ESPINAR

EDITORIAL – TANTAS VECES ESPINAR (BOLETÍN AMP N°253, JULIO 2020 COOPERACCION)
Espinar es el primer gran estallido social en tiempos de pandemia que involucra a casi toda una provincia en una zona con presencia minera. Desde el pasado 15 de julio organizaciones sociales y comunidades campesinas de Espinar, agrupadas en el Comité de Lucha Provincial, iniciaron un paro luego de intentar llegar a un acuerdo en […]

Espinar es el primer gran estallido social en tiempos de pandemia que involucra a casi toda una provincia en una zona con presencia minera. Desde el pasado 15 de julio organizaciones sociales y comunidades campesinas de Espinar, agrupadas en el Comité de Lucha Provincial, iniciaron un paro luego de intentar llegar a un acuerdo en una mesa multisectorial, sobre todo con la empresa minera, para hacer frente a la difícil situación por la que atraviesa la población.

¿Cuáles son los significados de lo que ha estado pasando en Espinar en todos estos días? Para los que siempre intentan leer conflictos vinculados a la minería con códigos e indicadores construidos muy lejos de los territorios y sobre todo desde Lima, vamos a intentar descifrar lo ocurrido estas últimas semanas en esta provincia alto andina cusqueña, relacionando los hechos con la coyuntura pero también con los antecedentes, es decir los conflictos previos y una larga lista de temas pendientes.

En primer lugar y pensando en el actual contexto, Espinar es una clara muestra del enorme error cometido por el gobierno al inicio del estado de emergencia y haber optado por bonos focalizados que llegaron tarde mal y nunca a los supuestos beneficiarios. A la gran mayoría de la población de Espinar, como a muchas otras en todo el país, no les llegaron los distintos bonos focalizados y han tenido que enfrentar este difícil momento sin ningún tipo de respaldo.

Es en este contexto extremo que la población de Espinar volteó a mirar los fondos del convenio marco provincial, un acuerdo firmado el año 2003 entre la empresa minera de entonces y la provincia representada por el Municipio y las organizaciones sociales más representativas. El hoy en día tantas veces mencionado convenio marco, tiene 21 cláusulas y en una de ellas -la quinta-, la empresa se compromete a aportar cada año el 3% del total de sus utilidades antes de impuestos.

Se ha dicho que la población de Espinar quiere aprovecharse de la empresa y busca beneficiarse con un aporte sin hacer nada. Lo primero que hay que decir es que el convenio marco ya tiene 17 años de vigencia y en todo este tiempo en ningún momento se había demandado un bono de estas características. Siempre se entendió que los fondos del convenio estaban destinados para respaldar “proyectos de desarrollo” para toda la provincia. Por lo tanto, desde nuestro particular punto de vista está claro el carácter extraordinario del pedido en un contexto de emergencia nacional como el que vivimos.

Pero la otra mirada que hay que darle al conflicto de Espinar es la histórica y la de la enormes deudas pendientes que se tiene con esa zona del país. Desde que la minería se instaló hace aproximadamente 35 años, está claro que la población de Espinar más es lo que ha perdido que lo que ha ganado: la llegada de la minería significó el desmembramiento de comunidades madre, como la de Antaycama (una de las comunidades más extensas del sur andino del país) que fue dividiéndose en varias comunidades para facilitar la entrada de la minería. Divide y reinarás dirán algunos. Además, a una de esas comunidades que se crearon en la década del 80, la de Tintaya Marquiri, le expropiaron 2,368 hectáreas, dejándola prácticamente sin tierras, convirtiéndola en apenas un asentamiento humano. Todo esto ocurrió para que la minería y el proyecto Tintaya se pueda instalar y desarrolle su actividad.

Luego han venido los episodios de contaminación y los dramáticos efectos en la población de Espinar y en una de las principales actividades económicas de las comunidades, la ganadería. Todas las demandas y los momentos de movilización social, como las ocurridas el año 1990, 2005, 2012, entre varias otras, dieron lugar a varias mesas de diálogo y la firma de varios acuerdos que, lamentablemente, no han sido cumplidos.

Que quede claro, la minería, el Estado peruano y todos los que miramos desde lejos el conflicto en esta provincia cusqueña, tenemos una deuda pendiente con su población. No es al revés.

Argentina

Que el saqueo no pare…

25/07/2020
Para que el personal de las mineras pueda llegar a los proyectos en explotación en las distintas provincias en forma rápida y segura, la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), junto a la Secretaría de Minería de la Nación, trabajan en la puesta en marcha de un sistema denominado «Corredor Minero Federal» con Aerolíneas Argentinas.

Los trayectos que compondrían el corredor fueron diseñados a partir de un exhaustivo estudio de la cantidad de personal minero qué transita por el país, que se estima que son unas 4.000 personas, de las posibilidades de utilización de aeropuertos y las posibles frecuencias de traslado. En San Juan calculan que son unos 350 los profesionales, entre geólogos, ingenieros y técnicos que se desempeñan en otras provincias y que deben viajar periódicamente para que la actividad no se paralice

El «Corredor Minero Federal» se compone de una planificación nacional para que transite el personal técnico y profesional de las mineras desde sus lugares de origen y hacia su destino de trabajo y viceversa, buscando unificar y optimizar rutas aéreas y terrestres, para lograr un mayor control y eliminar -en la medida de lo posible- los transbordos y viajes adicionales, explicó Alberto Carlocchia, presidente de CAEM.

Las rutas aéreas que se están barajando son Salta-Jujuy, Jujuy-Catamarca, Catamarca-San Juan, San Juan-Santa Cruz y Santa Cruz-Salta.

El secretario Hensel sostuvo que «todo el plan en el que se está trabajando va a ser debidamente coordinado con las autoridades provinciales, tanto mineras como sanitarias. Para una observancia estricta de los aspectos sanitarios en virtud de la situación de pandemia».

Uno de los problemas que se presenta en esta actividad, en la que el personal suele estar 14 días en la mina y otros 14 en su casa, es el cumplimiento de la cuarentena obligatoria que disponen las autoridades sanitarias. Por eso el secretario explicó que «todo se va a coordinar». Y puntualizó que «las empresas son concientes de que nada se puede hacer sin un cumplimiento estricto de los protocolos sanitarios, nacional y provincial». (sic)

El plan en el que trabaja la CAEM, junto con Minería de la Nación, y el aporte de las cámaras mineras provinciales, también incluye el estudio de la logística para el traslado terrestre tanto desde los aeropuertos a los emprendimientos mineros, como así también al domicilio del personal.

Mientras tanto, en Jujuy, denuncian la falta de valor por la vida de los trabajadores puesta de manifiesto por parte de los empresarios de minera Exar (litio) y los malos tratos recibidos por exigir medidas básicas de sanidad ante el creciente foco infeccioso de Covid-19 entre los obreros de la multinacional. Evidentemente, el modelo chileno elogiado desde las políticas neoliberales sigue haciendo punta.

Como sabemos, en Chile, los contagios en la industria rondan los 5 mil y solo Codelco reporta 3.400 casos positivos confirmados, sostuvieron los parlamentarios en un comunicado. Hasta el momento, las regiones más afectadas son las de Antofagasta y O´Higgins, según informó el diario La Tercera. Tal es así que diversos parlamentarios de oposición presentaron un proyecto de ley para que la minería entre en cuarentena y funcione con servicios mínimos durante 14 días, para frenar los contagios de Covid-19 en la industria minera y resguardar a los trabajadores y a las comunas productoras. En la iniciativa se dispone la suspensión parcial de las faenas que funcionen con más de 100 trabajadores en el territorio nacional.
Fuentes: Diario de Cuyo – La izquierda diario – Diario El Zonda

Que el saqueo no pare…

Chile

Comienza procedimiento de Evaluación Ambiental Estratégica de la Política Nacional Minera

El subsecretario Ricardo Irarrázabal destacó la importancia que la PNM 2050 tenga como foco principal resguardar la sostenibilidad para la industria y desarrollo de Chile.
21/07/2020
Minería Chilena
Con la firma del Presidente Sebastián Piñera, el Diario Oficial comunicó el inicio del procedimiento de Evaluación Ambiental Estratégica (EAE) de la Política Nacional Minera 2050.

De esta manera, se busca asegurar que el diseño de la PNM 2050 considere adecuadamente los tres pilares de la sostenibilidad: ambiental, económico y social, de tal forma de hacer posible una industria minera cada vez más sostenible, para que siga siendo la plataforma de desarrollo para Chile. En este sentido, la EAE permitirá respaldar las decisiones político-técnicas de la PNM 2050, desde una óptica no solamente ambiental, sino también económica y social.

El subsecretario Ricardo Irarrázabal destacó la importancia que la PNM 2050 tenga como foco principal resguardar la sostenibilidad para la industria y desarrollo de Chile.

“Nuestro país es históricamente minero y es un sector fundamental para el desarrollo sostenible de Chile; por esto, celebramos esta decisión del Presidente, pues no solo da cuenta de que la clave para desarrollar políticas de largo plazo es poner la sostenibilidad como eje principal, sino que también refleja la voluntad y coordinación de los ministerios para desarrollar buenas iniciativas por el país”, expresó.

La autoridad aseguró que “la EAE como instrumento de gestión ambiental, permitirá orientar metodológicamente el proceso, evaluar las distintas opciones y directrices para formular indicadores de seguimiento a la política”.
https://www.mch.cl/2020/07/21/se-inicia-procedimiento-de-evaluacion-ambiental-estrategica-de-la-politica-nacional-minera/

Internacional, Litio

Alemania: nueva tecnología para la extracción sostenible de litio

El litio, mejor conocido como “oro blanco”, se utiliza en casi todas las baterías modernas. A pesar de que Alemania no es conocida por sus minerales, su tecnología podría ayudar a extraer litio.
28/07/2020
(Reportaje de Deutsche Welle) Investigadores del Instituto Tecnológico de Karlsruhe (KIT) encontraron litio en aguas termales. El “oro blanco” se utiliza básicamente en las baterías modernas, y los países en donde más abunda son: Chile, Argentina, Bolivia y Australia.

Los fabricantes de baterías necesitan millones de toneladas de litio y estos cuatro países representan más del 80 por ciento del suministro anual del mineral. Muchos países, incluida Alemania, dependen de los precios y los suministros de litio. Pero esto podría cambiar si se adopta la tecnología desarrollada por el KIT.

Litio sostenible

El “oro blanco” se encontró en Oberrheingraben, al suroeste de Alemania. En esta región se encuentran aguas termales, en ellas no solo se hallaron litio, sino también otros minerales. “Descubrimos cantidades de hasta 200 miligramos por litro”, indicó el KIT en un reciente comunicado. La explotación de este mineral podría representar una “cantidad significativa” del litio que necesita Alemania, dijo a DW Jens Grimmer, investigador del Instituto de Geociencias Aplicadas (AGW) del KIT.

Grimmer y Florencia Saravia, investigadora del Instituto Engler-Bunte del KIT, desarrollaron una tecnología para explotar el litio de forma sostenible, respetuosa con el medioambiente y rentable. Esto podría también ayudar a Alemania a cumplir sus objetivos climáticos.

Modificando la tecnología ya existente

La tecnología de Grimmer-Saravia tiene una ventaja frente a los métodos convencionales de extracción de litio utilizados en Australia y América del Sur, según el KIT. En Alemania, se utilizaría la infraestructura de la energía geotérmica, que ya bombea alrededor de 2.000 millones de litros de agua termal por año.

Esta nueva tecnología tendría como consecuencia una pérdida mínima del suelo, en comparación con la extracción convencional de litio. Además, el procedimiento alemán no emplearía productos químicos. Gracias al ciclo del agua termal, la extracción del mineral sería constante. Mientras que en los lagos salados de América del Sur el proceso dura meses y depende de las condiciones climáticas. Por último, el modelo alemán facilitaría la extracción de otros minerales como el rubidio y el cesio.

Reducir la huella de carbón

Al utilizar la infraestructura geotérmica ya existente en Alemania, las emisiones de dióxido de carbono, relacionadas a la extracción de litio, se reducirían considerablemente, explica Florencia Saravia. “Actualmente, para poder mantener nuestros estándares de vida estamos exportando muchos de nuestros problemas ambientales a otros países. Esta tecnología permitiría cumplir con nuestras responsabilidades de obtener minerales en nuestro país y de forma respetuosa con el medioambiente”, dijo Saravia a DW. De esta forma Alemania también reduciría su “dependencia geopolítica” para obtener el “oro blanco”.

En el comunicado recientemente publicado por el KIT se expone que Grimmer y Saravia están trabajando para lanzar un proyecto piloto para extraer litio de las aguas termales. Pronto se pondrá en marcha la construcción de una planta para extraer “unos pocos kilogramos de carbonato de litio e hidróxido de litio”. Si el proyecto tiene éxito, agrandarán la planta.

Según los investigadores, en Alemania se podrían producir cientos de toneladas de litio por año. Algunos expertos ya elogian los depósitos alemanes de litio. Pero el experto en minería Martin Wedig advierte que las importaciones de litio seguirán siendo necesarias. “Los depósitos de Alemania no serán suficientes para satisfacer las necesidades de Europa”, explica Wedig, de la Asociación de Minería VRB. También señala que la producción de litio en Alemania solo tendrá futuro bajo ciertas condiciones. Alemania tendrá que decidir entre los bajos costos y la reducción de la huella de carbono.

“La emisión de este instructivo promueve el mejoramiento del marco normativo para viabilizar el desarrollo de la industria minera, acorde con las nuevas exigencias del sector y que permita seguridad jurídica”, agregó en un comunicado.

La vigencia de las nuevas reglas técnicas coincide con el reciente colapso de una pequeña relavera en una planta de beneficio ubicada en la provincia andina del Azuay, cuyos sedimentos de minerales contaminaron un río cercano al complejo, lo que provocó su suspensión temporal y sanciones para el operador privado.

El Gobierno igualmente exige para la operación de los relaves un sistema de monitoreo para generar alertas tempranas y otro de gestión de calidad, así como un plan de preparación y respuestas ante emergencias, entre otros criterios técnicos.

A las empresas que iniciaron con la construcción o la operación de los depósitos de relaves, el Ministerio de Energía les otorga un plazo de 18 meses para ajustar la infraestructura a las nuevas reglas técnicas.

Ecuador proyecta que hasta enero de 2022 las inversiones en el sector minero sumen unos 1.300 millones de dólares, según los compromisos adquiridos por las empresas.

Ecuador

Ecuador emite nuevas reglas técnicas para relaves en mediana y gran minería

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La normativa prohíbe la aplicación del método “aguas arriba” y generaliza la construcción de diques hacia aguas abajo, considerados como más seguros para almacenar los desechos mineros, y prevé aplicar auditorías anuales para evaluar la estabilidad de los depósitos.
23/07/2020
(Reuters) Ecuador puso en vigencia nuevas reglas para el diseño y construcción de depósitos de relaves para mediana y gran minería, con lo que busca mayor seguridad en el desarrollo de su estratégico sector, dijo el miércoles el Ministerio de Energía de ese país.
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Ecuador incursionó en la minera a gran escala desde el año pasado con la producción de sus dos mayores yacimientos, Fruta del Norte y Mirador, y está desarrollando otros importantes proyectos con grandes mineras, en su mayoría australianas y canadienses.

El Ministerio de Energía dijo que la normativa prohíbe la aplicación del método “aguas arriba” y generaliza la construcción de diques hacia aguas abajo, considerados como más seguros para almacenar los desechos mineros, y prevé aplicar auditorías anuales para evaluar la estabilidad de los depósitos.
https://www.mch.cl/2020/07/23/ecuador-emite-nuevas-reglas-tecnicas-para-relaves-en-mediana-y-gran-mineria/

Perú

Terminal Portuario Paracas no podrá transportar minerales

28/07/2020
Foto: Imagen referencial
Desaprueban modificación del Estudio Ambiental del proyecto Terminal Portuario General San Martín-Pisco, presentada por la empresa Terminal Portuario Paracas S.A, que buscaba transportar concentrado de minerales. Actualmente, solo embarca y desembarca productos agrícolas y cemento.

El puerto cuya construcción aún no termina, pero que ya opera desde 2018 está ubicado en la zona de amortiguamiento de la Reserva Nacional de Paracas.

El Servicio Nacional de Certificación Ambiental para las inversiones sostenibles (Senace) desaprobó la modificación. Según la resolución 73-2020-Senace, se concluyó que no se absolvieron algunas observaciones por parte de dicha entidad, el ANA y Sernanp, por lo que se dio por concluido el proceso de modificación del Estudio de Impacto Ambiental.

De acuerdo al informe, varias observaciones no absueltas tienen que ver con el tránsito de vehículos por la Reserva Nacional de Paracas. El concentrado de mineral sería llevado al puerto para su embarque por la carretera que atraviesa la zona protegida, uno de los lugares más privilegiados en flora y fauna del mundo.

El consorcio, formado por la española Servinoga y las brasileñas Pattac y Tucuman, administra, a través del Terminal Portuario Paracas, dicho puerto desde el 2014. Así, en 2018, TPP decidió modificar su EIA para la exportación de minerales.

En 2019, el Senace rechazó dicha solicitud y la empresa apeló la decisión. En dicha ocasión, la autoridad indicó que la desaprobación fue a raíz de que 33 observaciones no fueron levantadas, de un total de 277. De estas, 16 correspondieron a dicha entidad y 17 al Sernanp.

La modificación suponía la ejecución de un almacén de concentrado de minerales, una planta de tratamiento de aguas residuales, una planta desalinizadora y un emisario submarino para vertimiento de salmuera.
Fuente: Gestión

Perú: Terminal Portuario Paracas no podrá transportar minerales

Mexico

Los territorios locales asumen las consecuencias negativas de la minería a cielo abierto: REMA

ALEJANDRO ORTEGA NERI
28/97/2020

En Zacatecas se practica la minería a cielo abierto ■ foto: la jornada zacatecas
El pasado 22 de julio, como se viene haciendo desde 2009, se conmemoró el Día Internacional de Acción en Contra de la Minería de Cielo Abierto, el cual tuvo su origen en México en el marco de la lucha contra el proyecto de extracción de oro por tajo impulsado por la Minera San Xavier en las proximidades al Cerro San Pedro, en San Luis Potosí y que hoy, a 11 años se conmemora como un manifestación de forma coordinada de los pueblos del mundo ante la devastación y desposesión provocadas por el extractivismo minero a lo largo y ancho de la tierra.

De acuerdo con la Red Mexicana de Afectados por la Minería (REMA), el proyecto Minero de Cerro San Pedro, el cual luego fue abandonado después de su devastación y el desplazamiento, es emblemático porque marcó la ruta del verdadero significado de la devastación de la minería a cielo abierto y que al día de hoy, el país se encuentra plagado de extremo a extremo con aproximadamente mil 500 proyectos mineros operando, sin que se vislumbre un alto, pues el gobierno de la Cuarta Transformación muestra, a decir de la Red, “salvaguarda la continuidad del modelo extractivo minero que ocasiona despojo y desplazamiento forzado, mata la vida y atenta de forma masiva contra los pueblos de México”.

Zacatecas, de acuerdo con el colectivo Geocomunes, es uno de los principales estados de México que sufre “la amenaza neoliberal de los bienes comunes”, pues tan sólo basta observar un mapa de las concesiones a empresa mineras en el estado para entender la situación, ya que en las regiones donde mayor extracción se registras, no ha significado riqueza alguna para la población local.

En Zacatecas, hablar de minería y extracción a cielo abierto, el primer referente son las compañías extranjeras y sobre todo Peñasquito, hoy propiedad de la compañía Newmont, sin embargo, de acuerdo con la cartografía realizada por el colectivo Geocomunes, la compañía que tiene más concesiones en el territorio local es Peñoles, propiedad del millonario mexicano Alberto Bailleres, por lo que no solamente las empresas extranjeras son las que amenazan los bienes comunes, sino también el capital privado mexicano que sigue enriqueciéndose a costa de casos como el Salaverna, en Mazapil, cuyo caso, según el colectivo, representa el único en el país de desplazamiento forzado de una población también provocada por una compañía mexicana, Minera Frisco Tayahua, de Carlos Slim, cuyo proyecto busca volverse también a cielo abierto, como se anunció en 2013.

Zacatecas, según REMA y Geocomunes, es el estado en el país con más minas de tajo a cielo abierto y hay proyectos que se están destinando también a esta modalidad. Por lo que la entidad puede que sea el estado que más plata extraiga en el mundo, pero el costo de tal logro serán los bienes comunes y el medio ambiente, y no beneficios traducidos en derrama económica y en un reparto de la riqueza de sus habitantes.

De acuerdo con el Servicio Geológico Mexicano (SGM) en los últimos años Zacatecas se ha mantenido como uno de los estados que mayor aportación genera al valor total de la extracción minera en México, tal es que en 2017 alcanzó una contribución del 20.7 por ciento, lo que equivale a 76.3 millones de pesos. No obstante, según Sergio Elías Uribe, colaborador del Observatorio de Conflictos Mineros de Zacatecas, esta situación no se refleja en una mejor calidad de vida de la población, sobre todo, aquella que se ubica en las inmediaciones de las operaciones extractivas, sino que por el contrario, lejos de generar progreso y desarrollo, la intensificación del extractivismo minero ha desencadenado múltiples conflictos laborales y ecoterritoriales, querellas que muestran que lo que está en disputa es el trabajo y el territorio.

“En el marco de la actual fase de acumulación –señala Elías Uribe-, Zacatecas sigue siendo, como en tiempos de la Colonia, una entidad con gran potencial, pues ahí se encuentran grandes yacimientos de oro, plata, cobre y zinc, que son de gran importancia para los empresarios mineros. Para abril de 2019, se tenía un registro de 2 mil 671 títulos y 2 millones 381 mil 859.57 hectáreas con actividades mineras, que equivalen al 31.64 por ciento del total del territorio estatal”.

Hasta el momento, hay 12 minas metálicas operando en Zacatecas. Destacan las actividades de Industrias Peñoles y las unidades El Saucito ubicada en Fresnillo, la cual, es considerada la mina más importante en la extracción de plata del país, ya que en 2018 participó con la tercera parte del total nacional y el 7 por ciento a nivel mundial, de acuerdo con el último reporte de la Cámara Minera de México (Camimex). A esta le sigue la Unidad Fresnillo, que ocupó el tercer lugar nacional con 15.1 millones de onzas de plata extraídas. Y en el sexto lugar está La Colorada, establecida en Chalchihuites, perteneciente a la empresa canadiense Pan American Silver, que en el mismo año extrajo 7.6 millones de onzas de plata según se registra en el Panorama Minero de Zacatecas en su edición 2019.

Del mismo, se ubican la Unidad El Coronel localizada entre los municipios de Luis Moya y Ojocaliente, que extrae diariamente 55 mil toneladas de material que contiene oro y plata; las minas Frisco-Tayahua, propiedad de Carlos Slim y Peñasquito que pertenece a la corporación estadounidense Newmont, calificada como la segunda mina más importante de plata y la tercera de oro a nivel nacional. Estas últimas, ubicadas en la región de Mazapil, que junto a la región de Fresnillo albergan las minas más importantes de Zacatecas.

Mientras las grandes beneficiadas de la extracción mineral en Zacatecas han sido las corporaciones mineras, ya sean canadienses, estadounidenses y mexicanas, los territorios locales son los que asumen las consecuencias negativas que genera este modelo extractivo, que han dejado entrever una sobreexplotación laboral, despojo de tierra y agua, devastación ambiental y múltiples conflictos laborales y ecoterritoriales.

Según el colectivo Geocomunes, aunque lo que deja la minería en impuestos es “insignificante” comparando con sus ganancias, en cuestión de impactos la lista es larga, pues deja daños sociales con la criminalización, hostigamiento y persecución de activistas y el desplazamiento forzoso de comunidades; mientras que en el rubro ambiental, hay una radical transformación del paisaje, tala excesiva de vegetación, agotamiento de mantos y manantiales y contaminación con químicos tóxicos por mencionar algunos efectos, que a su vez generan impactos en la salud y en el ámbito cultural, porque se modifican los modos de vida, debido entre otras cosas, a la desaparición del patrimonio y la alteración de la dinámica local.
https://ljz.mx/2020/07/28/los-territorios-locales-asumen-las-consecuencias-negativas-de-la-mineria-a-cielo-abierto-rema/