Una multitudinaria marcha denominada “Unidos por nuestros recursos naturales”, desarrollaron ayer unos 10 mil pobladores de este municipio, con el propósito de exigir un cese a la tala indiscriminada del bosque, así como un alto a la explotación minera, pues aseguran está contaminando las cuencas de los ríos que proveen del vital líquido a las más de 58 mil personas.
Unas diez mil personas salieron a las calles para exigir el cese a la explotación forestal y minera.
Los habitantes de esta zona madrugaron para comenzar las acciones de protesta desde el desvío a la Gran Vía hasta culminar en las cercanías del parque Central, donde los manifestantes entregaron un documento con un acto especial, en el cual los organizadores plasmaron una propuesta a la corporación municipal, solicitando una veda de protección a los recursos naturales, por un periodo de 10 años.