Argentina

El extractivismo en los medios: una censura diversa y sofisticada

01/11/2021
Mineras, petroleras y el agronegocio condicionan cada vez más la actividad periodística en todos sus formatos. Pautas millonarias, inversión en «acercamiento a la sociedad» para reemplazar al Estado y legitimarse en la población y un método aceitado para invisibilizar críticas y cuestionamientos. El verso del progreso, de Catamarca a Chubut con tres décadas de diferencia.

Fuente: Revista Cítrica – por Agustín Colombo
Fotos: Juan Pablo Barrientos

Durante los años anteriores al mayor derrame de cianuro de la historia, un hecho que la convirtió por primera vez en noticia nacional, el equipo de comunicación de Barrick Gold tenía una obsesión: que en los medios se dejara de anteponer el artículo “la” a Barrick. Sus voceros explicaban en almuerzos y off con periodistas que era una manera de estigmatizar a la compañía, porque nadie decía “La Bayer”, “La Chevron” o “La Panamerican Energy”.

Ese detalle semántico –ya sabemos quién está en los detalles– sirve también para entender hasta qué punto trabajan el discurso y la comunicación las multinacionales extractivas en el país y en el mundo.

Pero lejos de circunscribirse sólo a cuestiones del lenguaje, mineras, petroleras y agroindustriales condicionan cada vez más la actividad periodística en todos sus formatos y en todas sus organizaciones: medios locales, regionales y “nacionales” sufren un lobby que a veces es sigiloso y con buenos modales, y otras veces es bastante más burdo.

“Algunos medios directamente nos pidieron dinero para darnos cobertura. En otros los propietarios se sinceraron y nos dijeron que si nos daban espacio se quedaban sin pauta y sin contratos”, cuenta Domingo Jofré, de la Asamblea Jáchal no se Toca, que hace más de una década observa, denuncia y visibiliza los daños al agua y al medio ambiente en general que ocasionan proyectos como el de la Barrick Gold en mina Veladero, San Juan.

Lo de la pauta sucede en grandes, medianas y pequeñas empresas. Pero lo de los contratos es una particularidad que podríamos atribuir a la actividad extractiva: hay trabajadores o trabajadoras de medios locales o regionales que aparecen bajo la órbita de municipios, pero cuyo único trabajo es asegurar complicidad y silencio en portales, diarios o programas de radio y televisión.

No es la única relación que existe entre los distintos Estados y los medios, obviamente. Cuando ocurrió el segundo derrame de cianuro de la Barrick, a Veladero llegó Canal 13: por primera vez uno de los dos canales con más ráting del país ponía su atención ahí.

Parte de los informes del programa de Lanata se hicieron a bordo del helicóptero de la gobernación. “Ante lo explícito del desastre generado solo se ocuparon de salvar la imagen del gobernador –dice Domingo–. Ahí se les termina la grieta”.

La disputa por el sentido
La censura ya no se practica como en las dictaduras pasadas. Hay métodos que la sofisticaron. Y que también sirven para sembrar algo que en los medios tradicionales crece año a año: la autocensura. Suavizar coberturas o directamente no abordarlos por temor a hipotéticas represalias dentro de las mismas empresas periodísticas. En ese aspecto, las multinacionales extractivas y los gobiernos provinciales y municipales comparten un mecanismo aceitado.

En Chubut, en estos últimos dos años, quedó explicitado: la mayoría de los medios de la provincia tienen pauta de las mineras, que intentan voltear una ley que las prohíbe y relativizar el consenso que existe entre la sociedad, que hace 18 años, en una consulta popular histórica en Esquel, le dijo “No a la mina”.

En ese afán de consolidar a la minería, a veces aparecen en una publicidad tradicional; y otras veces en forma de PNT (Publicidad No Tradicional): publinotas que minimizan los impactos de la actividad y realzan sus pocas bondades. ¿La consecuencia? Falsa información, o información que va en detrimento de la verdad y la rigurosidad. Se evidencia en Chubut y Neuquén al leer las noticias de asesinatos laborales en los yacimientos de la región: despersonalización de la víctima, el carácter “accidental” del hecho y la vaguedad de la ubicación real. En ningún caso, los medios mencionan el nombre de las petroleras en cuestión.
El trabajo cultural de las empresas extractivas incluye a los medios, por supuesto, pero también los excede: es mucho más abarcativo. La docente Magalí Stoyanoff, de la Asociación de Trabajadores de la Educación de Chubut (Atech), lo describe: “Un fenómeno que se intensificó es el inmenso esfuerzo, en particular de la empresa Panamerican Energy y de sus fundaciones, ya no en plata contante y sonante por publicidad en distintos medios, sino una difusión muy dirigida a trabajar sobre la imagen de la empresa ante la sociedad. Esta orientación se lleva a cabo junto al Ministerio de Educación de Chubut”.

Eso, que sucede del lado cordillerano y petrolero de la provincia, puede unirse a una serie de situaciones que se tornaron habituales en toda la meseta chubutense, la nueva fruta codiciada por las multinacionales mineras. Con el Estado intencionalmente corrido en esa región, empieza a repetirse que pueblos enteros se queden sin luz y sin agua durante días.

¿Qué pasa entonces? Cada vez que aparecen esos problemas derivados de la falta de inversión pública, también aparecen las mineras para cumplir un rol propio del Estado. De esta manera, se legitiman socialmente y buscan el consenso y apoyo de las vecindades y comunidades.

Eso, que se observa en la calle, también se observa en los estados contables: solo en 2019, Pan American Silver invirtió seis millones de dólares en Chubut, una provincia que tiene prohibida la actividad minera. De acuerdo a los registros de la multinacional con sede en Canadá, responsable del Proyecto Navidad que busca extraer plata en una superficie de 10 mil hectáreas, esos seis millones figuraban bajo el rótulo de “acercamiento a la sociedad”, un eufemismo que se materializa en cada rincón de la provincia en forma de notas pagas, regalos, ropa y bolsones de comida en barrios populares.

Mejor no hablar de ciertas cosas
Como menciona uno de los textos del dossier Contaminación informativa. Medios, extractivismo y soberanía, en Catamarca existen en la actualidad 16 minas operativas, 34 proyectos en etapa avanzada y más de 250 en exploración. El primer megaemprendimiento extractivo fue el de Bajo Alumbrera, presentado en pleno menemismo por los dos principales diarios del país –Clarín y La Nación– como un salto hacia el progreso y el desarrollo del país.

Bajo Alumbrera había prometido por aquellos años puestos de trabajo, hospitales equipados, más escuelas y mejoras en la calidad de vida de los pobladores de Santa María, Belén y Andalgalá. En los casi 20 años que duró la explotación, esas promesas nunca se cumplieron.

El verso del progreso, soliviantado por medios y periodistas, sigue hasta hoy. Y decimos verso porque la realidad se impuso: 15 años después de esa presentación propia de la pizza y el champagne menemista, el municipio de Andalgalá declaró oficialmente la “emergencia económica” por la grave situación financiera que atravesaba: la minería había generado contaminación y cada vez más pobreza.

En los 90, Bajo Alumbrera había prometido puestos de trabajo, hospitales, más escuelas y mejoras en la calidad de vida. Nada se cumplió

La estrategia que se llevó a cabo en Andalgalá es la que se intenta instalar hoy en Chubut. De norte a sur, de este a oeste, el modus operandi es el mismo: no fue casualidad que en 2010, un año después de esa “emergencia económica” el Gobierno de Catamarca anunciara la concreción del proyecto Agua Rica, de la canadiense Yamana Gold. Casi en paralelo surgió la Asamblea El Algarrobo, que el 15 de febrero de 2010 realizó un corte de ruta selectivo –solo le obturaba el paso a los camiones y máquinas de la minera– que terminó en una brutal y recordada represión.

Ese día, entre el reclamo, los palos de la policía y las detenciones arbitrarias, había solo un medio que transmitía en vivo lo que ocurría: Radio La Perla. Durante los primeros años, esa radio era la única que difundía la problemática que generaba la minería y que amplificaba la voz de la comunidad. “Pero luego la compraron: el dueño se la alquiló a un representante minero y la Asamblea perdió ese espacio”, recuerda Ají Buttowski, uno de los referentes de El Algarrobo. No fue incidir en los contenidos ni comprar voluntades con pauta o regalos: la minera directamente compró la radio.

Con los medios tradicionales de la provincia como El Ancasti, El Esquiú y La Unión vedados y a disposición del lobby minero, la Asamblea El Algarrobo debió generar su propia radio y contó con el apoyo de medios autogestivos, que convirtieron a la población consciente de Andalgalá –como a Jáchal– en emblemas de lucha. Una lucha que se explica en una palabra y en cuatro letras: agua.

Porque si la bajante histórica del Río Paraná o los recientes incendios en Córdoba llenan de postales distópicas la crisis ambiental que sufre la Argentina, el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la ONU acaba de agregarle a esas postales algunas palabras de repercusión internacional: la situación ya es “irreversible”, la temperatura global seguirá aumentando, los hielos continuarán derritiéndose y el nivel del mar subirá inevitablemente.

El mundo debate sobre el futuro climático y Argentina se desangra por las venas abiertas de su extractivismo. El nuevo yacimiento de Agua Rica de Yamana Gold en Andalgalá tendría permiso para usar 390 litros de agua por segundo, casi 34 millones por día. Y en Chubut, donde los lagos se convierten en desiertos de arena como pasa más al norte en las provincias atravesadas por el Paraná, la falsa solución que promueven medios y gobiernos es el ingreso de la megaminería, con el Proyecto Navidad al frente.

Cuando los medios advierten este contexto y emergen críticas fundadas, las empresas mueven sus hilos para silenciar esas voces. “Cada vez que digo algo sobre el tema me llaman por teléfono para pegarme un tironcito en donde más duele. Nosotros no podemos hablar de megaminería en el programa”, le dijo Víctor Morales, conductor del programa “Miradas al Sur” del Canal 7 de Rawson, a FM Namuncurá, uno de los medios autogestivos chubutenses que creció en audiencia y suscripciones –como Radio Sudaka– por tener a la defensa del medio ambiente como bandera.

«Nosotros no podemos hablar de megaminería en el programa”, le dijo Víctor Morales, conductor del Canal 7 de Rawson a FM Namuncurá

Pero los autogestivos y comunitarios crecen, a lo largo y ancho del país, no solo por ese motivo. La hendija que abre la precarización del trabajo periodístico en medios comerciales fue cubierta en parte por esos espacios.

Ante la decisión (por falta de presupuesto o de interés) de medios tradicionales de no enviar a periodistas para producir información desde el lugar, los autogestivos y comunitarios intervienen en la agenda mediática porque son y están ahí, en los pueblos y pequeñas ciudades perjudicadas directamente por prácticas extractivas: el territorio de la noticia.

Lejos de romantizarlos, estos medios también están atravesados por una precarización que se refleja en los ingresos de quienes ejercen el oficio allí. Afectados por el discrecional reparto de la pauta estatal, muchas veces invisibilizados y con salarios (o retiros) incluso más bajos que en los medios tradicionales ya de por sí pulverizados, los y las periodistas de los medios autogestivos deben compartir ese trabajo con otras actividades para subsistir, lo que también va en detrimento de la calidad de la información. Una información que, pese a todo eso, no responde ni a los intereses ni a los proyectos de las multinacionales extractivas.

Esta nota forma parte del dossier Contaminación informativa. Medios, extractivismo y soberanía, realizado en conjunto entre la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (Fatpren), el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (Sipreba) y la Fundación Rosa Luxemburgo.

El extractivismo en los medios: una censura diversa y sofisticada

Argentina

Plan estratégico para el desarrollo minero argentino

29 octubre, 2021 | Argentina
Plan estratégico para el desarrollo minero argentino

El lanzamiento del Plan Estratégico para el Desarrollo Minero Argentino (PEDMA), que iba a ser antes de las elecciones generales del 14 de noviembre, finalmente se postergó para después de los comicios legislativos.

El Plan Minero
La Secretaría de Minería viene trabajando hace meses para concretar el PEDMA, una iniciativa que tiene la ambición de darle un marco al sector para los próximos 30 años. En las distintas instancias que tuvo participaron los gobiernos provinciales, empresarios mineros y más de 250 instituciones, desde religiosas a organizaciones ambientales.

El PEDMA está basado en el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) elaborados por las Naciones Unidas. Dentro de la Secretaría de Minería prefieren hablar de un “proceso” de debates y búsqueda de consensos con los distintos actores del sector.

Números
Según un resumen del plan al que accedió este medio, la intención del Ejecutivo es incrementar lo antes posible el peso de la minería en el PBI, ya que hoy es de tan sólo el 0,6%, cuando en Chile es 12%, en Perú el 10% y en Australia el 7%.

Para esto, el gobierno planea para los próximos 10 años poner en marcha 33 proyectos: siete de cobre, que podrían vender al exterior por US$ 5.420 millones. Luego, el plan estima que se concreten 15 proyectos de litio que podrían exportar US$ 2.100 millones; cinco desarrollos de oro con un potencial exportador calculado en US$ 1.752 millones; cuatro proyectos de plata que exportarían US$ 758 millones; y, por último, un proyecto de potasio y un proyecto de uranio que sumarían US$ 734 millones en exportaciones.

La Secretaría de Minería viene trabajando hace meses en este plan. Originalmente iba a ser presentado el día de la minería, que es el 7 de mayo, pero la cartera no llegó a definirlo por completo. Ahora falta terminar de pulir los detalles con el ministerio de Economía de Martín Guzmán y la Comisión Nacional de Valores para definir cómo serán los incentivos económicos, tributarios y la regulación para el acceso al mercado de capitales para las empresas mineras. En el marco de ese plan, el gobierno también planea una reducción a las retenciones a las exportaciones mineras. Según un resumen del plan al que accedió este medio, la intención del Ejecutivo es incrementar lo antes posible el peso de la minería en el PBI, ya que hoy es de tan sólo el 0,6%, cuando en Chile es 12%, en Perú el 10% y en Australia el 7%.

Triplicar las exportaciones
El plan del gobierno es incrementar en 3,4 veces las exportaciones de 2019, último año completo comparable sin pandemia, que fueron de US$ 3.200 millones. El objetivo del Ejecutivo es alcanzar exportaciones por US$ 10.765 millones en una década con una inversión (Capex total) de US$ 27.275 millones.

Para esto, planea poner en marcha 33 proyectos: siete de cobre, que podrían vender al exterior por US$ 5.420 millones, que representan el 61% de las exportaciones proyectadas. Luego, el plan estima que se concreten 15 proyectos de litio que podrían exportar US$ 2.100 millones (20% de las exportaciones); cinco proyectos de oro con un potencial exportador calculado en US$ 1.752 millones (6%); cuatro proyectos de plata que exportarían US$ 758 millones (5%); y, por último, un proyecto de potasio (7%) y un proyecto de uranio (1%) que sumarían US$ 734 millones en exportaciones.

Retenciones
El gobierno tiene en carpeta implementar un régimen de “retenciones progresivas”, que se aplicaría proyecto por proyecto. Se argumenta que el nuevo esquema ayudaría a aliviar el régimen de retenciones a las exportaciones para la fase de inversión de capital para que los proyectos puedan atravesar los primeros años y que la medida intenta otorgar previsibilidad a largo plazo a las compañías para que afronten el repago del capital. Luego, la alícuota se incrementaría en la fase de producción y podría contemplar que esté atada al precio de los commodities. Todavía no está definido cuál sería el tope. En los últimos años de vida útil de cada desarrollo las retenciones podrían volver a bajar.

En la Secretaría de Minería estiman que hay más de 300 proyectos en distintas etapas que permitirían captar inversiones por alrededor de 30.000 millones de dólares. Además, si avanzan proyectos de cobre, oro, plata y litio que hoy están en carpeta, la Argentina podría triplicar las exportaciones del sector y superar los 10.000 millones de dólares. En el primer cuatrimestre del año la minería representó el 4% del total de las exportaciones del país y casi la totalidad correspondieron a las provincias de San Juan, Santa Cruz, Catamarca, Salta y Jujuy.
Fuente: Ecojournal

Plan estratégico para el desarrollo minero argentino

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El extractivismo no es viable sin subsidio del estado

15/10/2021
Compartimos esta charla con Damián Verzeñassi publicada por Borrador definitivo. Para quien no lo conoce, Damián es titular de la Cátedra Socioambiental de la Facultad de Medicina de la UNR. Docente e investigador, desde hace años viene participando desde su espacio y se siente parte de la lucha de los miles de activistas anti extractivistas.

Como todos aquellos que siguen las enseñanzas de Andrés Carrasco por una “ciencia digna al servicio de los pueblos”, Damián Verzeñassi es, dentro del rígido ambiente académico, ninguneado, hostigado y perseguido. Pero esto se compensa con creces con el reconocimiento que recibe de parte de otros sectores. En lo que refiere a la salud de los cuerpos y su relación con la salud de los territorios que esos cuerpos habitan, es una autoridad indiscutible y así lo saben las organizaciones de pueblos fumigados y demás agrupamientos que pelean contra las consecuencias palpables del agronegocio sobre las poblaciones.

Con una experiencia tan rica como la de los Campamentos Sanitarios, Damián recorrió, junto con estudiantes de la Cátedra Socioambiental, las provincias de Córdoba, Entre Ríos, Santa Fe y Buenos Aires, el corazón de la patria sojera. Y pudieron documentar fehacientemente de qué manera la expansión de la frontera agrícola hace estragos en los cuerpos de los habitantes de estas zonas. Así es que, cuando Damián habla de los costos sanitarios del extractivismo, lo hace con pleno conocimiento de lo que está diciendo.

Y por ello, si uno le pregunta por sus títulos, él, como otros, prefiere definirse antes que nada como un militante:

«… esa básicamente es la mejor definición: un militante por la salud y por la vida de quienes transitamos estos territorios arrasados por el extractivismo, en una etapa de la historia del planeta donde si no somos conscientes de que no podemos pensar la salud de los seres humanos por fuera de la salud de los territorios estamos condenados a fracasar en los análisis, y por lo tanto en las soluciones que encontremos».

Quizás sea justamente por esta intensa actividad de militancia, que Damián resulta tan escurridizo, y que el mejor lugar para verlo es, precisamente, algún espacio de acción política. Así es que, después de mucho buscarlo, finalmente lo vimos en el «Panazo» en Rosario, actividad que formó parte de una acción a nivel nacional en contra de la aplicación del trigo transgénico HB4. Y allí, finalmente, pudimos concertar una cita, de la que resultó esta interesante charla, que dejó más de una riquísima definición sobre el mundo en que vivimos.

Áreas de sacrificio. La planificación de la enfermedad

BD: ¿Cómo debemos entender el concepto de Salud, en medio de la ofensiva del extractivismo sobre lugares como la Argentina que venimos viendo desde hace algunas décadas?

D.V. : Argentina es parte de un territorio que ha sido definido, desde la geopolítica a nivel mundial (que nosotros llamamos la geopolítica de la enfermedad) como uno de esos territorios arrasados, esas áreas de sacrificio que el poder económico del mundo ha definido que tienen que destruirse para darle tiempo a algunos otros lugares del planeta a recuperarse. Y cuando hablo de esos otros lugares del planeta hablo de algunos lugares de Europa, del Norte de nuestro continente y de China, básicamente.

Entonces en ese contexto, en el que nos han plateado que nosotros tenemos que ser un área de sacrificio, seguir creyendo que la salud debe limitarse a la eliminación de algún signo o síntoma de alguna enfermedad es no haber comprendido la gravedad de la situación y la integralidad que hace posible la vida.

«El problema real es que estamos viviendo en territorios arrasados, en territorios contaminados, en territorios que han sido planificadamente transformados en territorios enfermos».

Si nosotros seguimos creyendo que la salud se resuelve poniendo hospitales debajo del puente que se rompió, para atender a los politrumatizados que cayeron del puente, y no nos damos cuenta que lo que hay que hacer es reconstruir el puente para que no se caiga más gente, vamos a seguir trabajando permanentemente detrás del problema. Y lo que nosotros necesitamos en este momento, desde nuestro punto de vista, es avanzar en una solución del problema real. Y el problema real no es que falten hospitales. El problema real es que estamos viviendo en territorios arrasados, en territorios contaminados, en territorios que han sido planificadamente transformados en territorios enfermos. Y por lo tanto, los que vivimos y habitamos esos territorios también estamos enfermos.

Nuestros cuerpos son cuerpos-territorio, el primer territorio que habitamos es nuestro cuerpo. Entonces lo que hemos hecho a lo largo de la historia, desde hace más o menos 150 años, es artificializar nuestros cuerpos y naturalizar esa acción, con lo cual también construimos una idea de que el territorio puede ser artificializado en beneficio de lo que necesite el mercado.

Pasamos de un paradigma antropocéntrico, que tenía en el centro al hombre, macho, europeo, de 1,80 mt., 60 kg., de 18 a 60 años, económicamente activo… que es lo que necesitaba este sistema, a un paradigma que ni siquiera pone al hombre en el centro, sino que pone al mercado. Con lo cual, el hombre hoy es un recurso más que está a disposición de lo que necesita el mercado. Así como antes el hombre creía que la naturaleza era un recurso para su beneficio, hoy está demostrado que este sistema perverso, lo que ha construido es la idea de que el mercado es el que manda y el hombre es un recurso del mercado al servicio de los intereses del mercado. No ver eso como el principal problema de salud hoy que tiene nuestra sociedad, es desde nuestro punto de vista, estar condenados a fracasar en cualquier construcción, en cualquier idea que se tenga de avanzar para cuidar la salud de nuestros pueblos.

BD: ¿Qué tiene que ver esta perspectiva con lo que dice Cabandié, (Secretario de Medio Ambiente), que plantea que debemos contaminar para conseguir dólares para pagar la deuda externa?

D.V. : Lo que dice el Ministro es en realidad una explicitación de lo que es la lógica de pensamiento, el paradigma que ordena, en general, a la gran mayoría de los decisores de políticas de nuestro territorio. Si uno hoy hace una encuesta en la comunidad, es muy probable que la mayoría de las personas planteen que hay que tener dólares antes que cuidar el territorio.

Esos discursos no son inocuos y desde el punto de vista de la salud generan mucho daño. Y acá el principal daño es que construyen la idea de que uno puede prescindir de una parte del territorio, que uno puede escindirse del lugar en el que vive, y esto es compatible con la idea de que uno puede prescindir de una parte de su cuerpo, siempre y cuando después la pueda reemplazar por la biotecnología o la tecnología que le genere una parte mejor.

BD: Casi da miedo pensar hasta dónde pueda llevarnos esa mirada.

D.V. : Esa mirada fragmentada del ser humano, de nuestros cuerpos, se traduce en una mirada fragmentada de nuestros territorios, y por lo tanto naturaliza y justifica un avance sobre nuestros cuerpos y nuestros territorios que se alejan cada vez más de la posibilidad de construir relaciones saludables y nos transforma cada vez más en seres dominados, sometidos a lo que la lógica de la tecnología y el mercado necesitan.

Entonces cuando uno tiene un Secretario de Ambiente que dice que lo más importante no es garantizar la salud y la integridad del territorio en el que vivimos sino juntar dólares para poder pagar deuda a costa de enfermar nuestro territorio. Y por otro lado tenemos un Ministro de Salud que dice que lo más importante es seguir los pasos que nos indican las corporaciones farmacéuticas para el cuidado de nuestra salud, y no cuidar nuestro territorio porque de eso se encarga Ambiente, que en realidad no se está encargando porque está pensando en la economía. Y tenemos un Ministro de Economía que está pensando en cómo cierran o no los números de algún libro de balance sin tener en cuenta que esos balances son absolutamente efímeros si el territorio en el que se vive desaparece y la salud no nos acompaña…

Y bueno, el emergente de esa fragmentación en la mirada y en las decisiones políticas es lo que estamos teniendo hoy: perfiles epidemiológicos en nuestras comunidades, absolutamente alterados, donde las enfermedades crónicas y sobre todo la base de alteraciones endocrinas, desarrollo de neoplasias, malformaciones congénitas, problemas de la reproducción y de la fertilidad, están a la orden del día y van incrementándose año a año. Y donde las posibilidades de contar con elementos de los territorios para recuperar la salud son cada vez menos porque en este momento ni agua tenemos.

Río Paraná: ¿ecosistema vivo o autopista para mercancías?

BD: En este marco hay decenas de debates en curso. Desde el río y la Hidrovía, las políticas extractivistas de todo tipo, que son seguramente a lo que te referís. ¿Cómo está jugando esto en la vida de la gente?

D.V. : Que hoy estemos transitando, en una ciudad como Rosario, en una región como el litoral de la Argentina, por un momento en que el río Paraná, el segundo río más grande de Sudamérica, tercer río más caudaloso del mundo, está secándose, y nosotros sigamos creyendo que es un problema de los ciclos naturales y no reconozcamos que tiene que ver con que, desde el 2019, han desaparecido los ríos voladores a partir de los incendios en el Amazonas. Pero que desde antes venimos desapareciendo todo lo que son los bosques nativos y las selvas amazónicas, que son quienes garantizaban la regulación de los ciclos hídricos, a partir del avance de la agroindustria que es una industria extractiva que arrasa con los territorios. Y que no comprendamos que eso tiene que ver con el cuidado de la vida. Eso hace que nosotros sigamos cada vez más sometidos a los designios del mercado.

Si nosotros estamos hablando hoy del cuidado de la salud pero no estamos pensando en que no tenemos agua o que vamos camino a que en diciembre no tengamos posibilidad de darle agua potable a los que vivimos en las riberas. No estoy hablando de agua potable a los que se proveen de los acueductos a 200 o 300 kilómetros de los ríos, estoy hablando de agua potable para los que vivimos en las ciudades ribereñas. Y no estamos asumiendo eso como el principal problema, ya no de salud pública, sino el principal problema para la vida de nuestras sociedades. Claramente no hay forma de que resolvamos el problema. Tener más dólares no resuelve el problema de la baja del rio Paraná. Y los que creen que lo que hay que hacer es tener dólares primero para después ver los problemas ambientales, es porque no han entendido ni han estudiado nada de por qué tenemos los problemas ambientales que tenemos.

«Tener más dólares no resuelve el problema de la baja del rio Paraná. Y los que creen que lo que hay que hacer es tener dólares primero para después ver los problemas ambientales, es porque no han entendido ni han estudiado nada de por qué tenemos los problemas ambientales que tenemos».

BD: Algo de lo que vos decís está atravesando al problema de la hidrovía. Por ejemplo, algunos sectores promueven la estatización para, entre otras cosas, extraer arena barata para usarla en el fracking en Neuquén… Me refiero en particular a la circular impulsada por Mempo Giardinelli.

D.V. : Yo respeto mucho a algunos referentes, pero no puedo no decir que siguen atravesados por la misma lógica de pensamiento de la modernidad insustentable que nos llevó hasta acá. Pensar en el río Paraná como una hidrovía y no como un río, es para mí el primer problema. El problema es que el río no es una hidrovía, es un río, es un sistema vivo. Si nosotros pensamos en el río, sistema vivo, como hidrovía, claramente no estamos viendo la complejidad del tema.

Pensándolo como hidrovía, sin duda tiene que ser estatal. Es inadmisible desde cualquier punto de vista que sean capitales privados y extranjeros los que se encarguen de transformar al río en una autopista con peaje que se llevan para otros lados. De eso no hay dudas, para mí no hay discusión. Más aún, resulta curioso como mínimo que se plantee la estatización de la hidrovía en el año 2021, pero solo por un año. Cuando lo que se sabe y ya se había advertido, es que durante el 2021 no va a haber posibilidad de tráfico fluvial por la bajante del río. Lo que hace el estado es salir al salvataje de las empresas privadas. Pero solo por este año, porque el año que viene, cuando el río vuelva a recuperar un poco de caudal y vuelva a hacerse posible el tráfico fluvial, ahí se vuelve a privatizar. Es decir, las vaquitas siguen siendo ajenas y las penas siguen quedando para nosotros.

Ahora, esta es una discusión que es secundaria a la primer discusión que es: el río, ¿es un organismo vivo, o es un pedazo de terreno que tiene que transformarse en una autopista fluvial acuática? Nosotros entendemos que pensar al río como una hidrovía o como una vía de ingreso y egreso de mercancías es equivocar la mirada, sobre todo en un momento de la historia de la humanidad en que ya está demostrado que necesitamos recuperar un entendimiento integral de la realidad y del territorio con la vida. Quiero decir: sin río Paraná no habría vida posible en la zona del litoral.

Nos sorprendemos cuando hay un desmoronamiento en la barranca, nos sorprendemos cuando empieza a haber una imposibilidad de la fauna ictícola de reproducirse, ¡pero si les rompimos los mecanismos y los circuitos naturales y tradicionales para poder reproducirse! Y entonces, ahora aprovechamos la bajante del río para meter máquinas en territorios que eran inundables porque son humedales, para transformar esos humedales en parte del nuevo negocio inmobiliario de la venta de naturaleza que se hace al vender la isla o el humedal como un territorio para ir a instalarte a hacer negocios inmobiliarios y a vivir saludablemente, trasformando el humedal en una ciudad con otras dimensiones. Y después decimos: ¡qué barbaridad los carpinchos, que indisciplinados que son…!

En el proceso electoral en la Argentina, no hay un solo candidato de las fuerzas que tienen posibilidad de ganar espacios en la legislatura que asuma este tema como el principal problema del país. En el año 2005, el premio Nobel de Economía de ese año, advirtió que el principal problema de alimentación en el mundo iba a ser el calentamiento global y que iba a afectar fundamentalmente a los países que tenían sus economías atadas a los procesos de producción agroindustrial. Porque el calentamiento global, al afectar los ciclos hidrológicos y los ciclos de lluvias, genera una alteración en los procesos de producción agroindustrial. Pero esto se anunció a principios de este siglo.

Las formas de producción (de enfermedades pandémicas)

BD: Hay un marcado aceleramiento del proceso de calentamiento global, según señalan los especialistas. ¿Qué decisiones toman los líderes de los estados con respecto a esto?

D.V. : Pasaron 20 años y estamos peor de lo que se había anunciado a principios de siglo. Y encima acá salimos con un discurso de aumentar la frontera agropecuaria, aumentar los volúmenes de exportación de comodities agroindustriales, y transformar nuestros territorios en los chiqueros de China, que está necesitando limpiar sus territorios, porque ellos ya no pueden soportar más el volumen de contaminación que generan los criaderos de carne, pero no pueden permitirse disminuir la ingesta de proteínas cárnicas de su población que ha alterado su fisiología, sus modos de vida y de alimentación histórica. Entonces, necesitan un nuevo territorio al cual enfermar, al cual contaminar, al cual destruir para poder garantizar la producción de carne para su población. Y ha elegido a la Argentina como ese territorio. Y nosotros, en vez de decirles: ‘señores no queremos ser la próxima Wuhan’, le estamos diciendo: ‘vengan que nosotros no tenemos problemas de seguir contaminándonos’.

Se sigue sosteniendo la misma lógica que planteó Lawrence Summers (jefe del Banco Mundial entre 1991 y 1993) en el año 2001, cuando el Banco Mundial anunciaba que tenía que poner dinero para trasladar la infraestructura de las industrias contaminantes a los países del Tercer Mundo. Y ese dinero en infraestructura que venía como deuda eterna para los países que recibíamos ese dinero, tenía que ser usado en infraestructura para la energía, de telecomunicaciones, de almacenamiento y de caminos.

BD: Todo esto que marcás, tiene absoluta relación con la pandemia que estamos transitando.

D.V. : Aparece un situación sanitaria que se constituye en pandemia por la modificación genética de un virus que, obligado a salir de su territorio natural y salvaje y a encontrarse con poblaciones humanas, muta (en un laboratorio o de manera natural, pero muta) y se transforma en patógeno para los seres humanos por ese encuentro forzado que se hace. Y eso ocurre en un territorio donde el principal elemento que empujó a la mutación del virus fue el avance de la cría industrial de cerdos de las localidades de los alrededores de Wuhan, donde unos meses antes había habido una gripe porcina africana que los obligó a eliminar millones de cerdos y generar una crisis de provisión de carne de cerdo en China. En ese contexto donde aparece este nuevo virus, nosotros, planteamos, para resolver los problemas económicos que generó esta pandemia, que se origina, entre otras cosas, a partir de los modelos agroindustriales e intensivos de cría industrial de carne, vamos a transformarnos en un país de cría industrial de carne, aumentando el área de producción industrial de la Argentina. Desde nuestro punto de vista, eso es no haber entendido nada, y ni siquiera haber leído el diario para saber de dónde viene el problema.

El extractivismo es agua-dependiente

BD: Esto que planteas está trasladado a todo el territorio, porque en todos lados florecen distintas formas de extractivismo, mediante la explotación y contaminación y sobre todo de los cursos de agua.

D.V. : El extractivismo es agua-dependiente. No hay extractivismo posible, salvo el académico, si no hay agua. Ni el extractivismo urbano puede llevarse a cabo si no hay agua. Megamineria, hidrofracking, extracción convencional de gas y petróleo, agroindustria, salmonicultura, el extractivismo ictícola. Todos procesos que requieren agua. Por eso el Banco Mundial en el ’91, cuando anunciaba el traspaso de estas industrias a los países del Tercer Mundo, ya lo hacía entre otras cosas, basado en las lógicas económicas que establecían que generar los residuos tóxicos en una población cuyos habitantes mueren antes de otras enfermedades, y además tienen salarios muy bajos por lo cual mueven poco el aparato económico, responde a la lógica perfecta. Ese extractivismo se instala en nuestro territorio y que además, insisto en esto, lo hace, como dijo el Banco Mundial, a partir de que se pone dinero para generar obras de infraestructura en lo que tiene que ver con la provisión de agua y saneamiento. Entonces vemos todo lo que tiene que ver con los acueductos y las formas de modificar cursos de agua que se presentan como que ‘ahora viene el agua para nuestras comunidades’. Mentira: es el agua para llevarle a las producciones agroindustriales.

Pero este es un extractivismo que puede desarrollarse porque hay políticas públicas que niegan las demandas de agua que tienen estos modelos, externalizan su costo. Y después dicen: aumentamos la exportación de granos. ¡Mentira! Lo que se aumentó fue la exportación de «agua virtual», como dice Walter A. Pengue. Pero al mismo tiempo, las exportaciones de los resultados de la megaminería, de los resultados del hidrofracking o de la extracción convencional de gas y petróleo, las exportaciones del extractivismo ictícola y las exportaciones agroindustriales, no es cierto que le generen al país un incremento de su capacidad económica porque, además de que pagan muy pocos impuestos, externalizan los cosos de los impactos ambientales que generan, y por eso se permiten mostrar números positivos.

«Al extractivismo los números le dan, porque no cuentan las externalidades, que ellos saben que no son externalidades, son consecuencias de su forma de funcionamiento».

Si nosotros pusiéramos en una ecuación cuánto cuesta atender los problemas de salud que generan estos modelos extractivistas, cuánto cuestan los tratamientos de los linfomas, los tratamientos de las enfermedades endocrinas como el hipotiroidismo, o de las enfermedades de fertilidad, cuánto cuestan los tratamientos de las enfermedades de salud mental derivados del desarrollo de estos problemas y de las alteraciones familiares que genera al tener un miembro de nuestro núcleo familiar con alguna de estas enfermedades, cuánto cuesta la desocupación que genera y que impacto tiene en términos económicos el aumento de la fragmentación de la realidad social que generan estas agroindustrias, o lo que se llama los refugiados ambientales, que se generan a partir de todo esto, claramente no dan los números. Al extractivismo los números le dan, porque no cuentan las externalidades, que ellos saben que no son externalidades, son consecuencias de su forma de funcionamiento. Y porque no se cuenta cuál es el agua que consumen, porque no se les cobra.

Lo que no quiere decir que yo diga que hay que cobrarles el agua, porque entonces van a decir: si yo pago, la uso. Hay que decir que el agua tiene que ser para la vida, no para las industrias extractivas, no para las corporaciones. Y si el agua es para la vida y no para las corporaciones, el extractivismo es inviable.

BD: Pero hoy los gobiernos nos dicen que eso no se puede hacer, que eso atenta contra la economía y contra el progreso.

D.V. : Lo que es inviable es el extractivismo. Y es mentira que sin extractivismo se funde el país. El país lo que hace es construir nuevas formas de producción que reconozcan la importancia de cuidar y respetar los procesos metabólicos de la sociedad y la naturaleza, y desarrollar nuevos modos de producción, que no atenten contra la integridad de los territorios sino que se construyan en función del reconocimiento de la integridad de los territorios, que garanticen arraigo de las comunidades en los territorios que no son urbanos, garanticen cuidado de los ciclos vitales, garanticen la recuperación de las fuentes de los espacios donde los ciclos hidrológicos son necesarios y posibles, garanticen generar alimentos de verdad y no comida barata contaminada, sino alimentos de cercanía que no requieren transporte para poder llegar a nuestras mesas, y por lo tanto tienen menos carga en la huella de carbono. Pero al mismo tiempo menos demanda energética, por lo tanto disminuye el consumo de energía necesaria y disminuye la necesidad de extracción de gas y petróleo, y al mismo tiempo estimula la lógica de transformación de las matrices productivas, que no tienen que ser trasformación de las no renovables en renovables para sostener la misma demanda que hoy tenemos; porque también tenemos que disminuir la demanda energética. Porque si lo que vamos a hacer es poner renovables para producir el mismo volumen de energía que hoy estamos produciendo con las fósiles, en realidad vamos a cambiar de problemas pero vamos a seguir teniendo problemas.

BD: Hay algo muy perverso en este sistema asentado en las ganancias capitalistas. Donde se transforman las consecuencias negativas de las formas de producir, en fuente de nuevos negocios. La fusión Monsanto-Bayer creo que es un ejemplo claro de esto.

D.V. : La fusión Monsanto Bayer es algo así como el casamiento entre la Bruja de Blancanieves y el Príncipe de Blancanieves. La bruja que le dio la manzana envenenada y la enfermó y el príncipe que le dio el beso y la salvó, son Monsanto y Bayer fusionándose: hace negocio cuando le vende la manzana envenenada y hace negocio cuando le vende el beso. La única que pierde ahí es Blancanieves, que encima después cree que el Príncipe es quien la va a salvar y termina siendo el que profundiza las relaciones patriarcales de explotación y sometimiento de ella y su territorio y los enanitos que estaban con ella, en función de las necesidades del príncipe. Porque para pagarle el beso no le va a alcanzar lo que le queda de vida.

Esto es otra expresión del mismo modelo, este modelo de la externalización, de la fragmentación, de la expropiación de lo cuerpos y los territorios, se expresa en todos los ámbitos, inclusive en nuestros propios cuerpos y salud. Y es lo que estamos viendo hoy en la crisis pandemia que estamos viviendo. A partir del avance de los extractivismos como actividad esencial, esa misma actividad es la generadora de las condiciones para que la crisis pandemia pueda desarrollarse. Es una cosa demencial pero funciona así.

Y encima ahora nos dicen que los únicos que nos pueden salvar de esta situación son los mismos responsables de construir las tecnologías que nos llevaron hasta acá. Porque contaminaron nuestros territorios con venenos y con químicos, porque consumieron nuestras aguas contaminándolas con venenos y con químicos, porque además contaminaron nuestros alimentos con venenos y con químicos, porque nos hicieron perder la posibilidad de saber cómo se produce el alimento de verdad y nos hicieron depender de lo que ellos nos ofrecen en el supermercado, y porque además de haber alterado nuestros territorios y nuestras posibilidades de acceder a aire y agua de calidad, además de todo eso empujan a los microorganismos a situaciones de transformación o mutación a una velocidad tal que nuestros cuerpos no son capaces de construir procesos inmunológicos que nos defiendan. Entonces ante eso, ¿la solución cuál es?: tecnología de las mismas corporaciones que generaron todo esto otro para, artificialmente, fortalecer los sistemas inmunológicos. Y en realidad lo que ocurre es la situación de indefensión de una población, sometida a estas situaciones sin tener posibilidad de decir que no, en la que se le construye, en el caso de la pandemia, durante todo un año completo, la idea de que lo único que puede salvarnos de esta situación es una tecnología inyectable.

Y cuando aparece una posibilidad de tecnología inyectable lo que se plantea es: esto es la salvación. En vez de plantearse, desde el punto de vista científico: acá hay una posibilidad de construcción de una tecnología que puede servir como medicamento, tenemos que probarla, ¿quién quiere probarla? Porque además, si funciona, puede ser muy bueno, puede ayudarnos a resolver esta situación de coyuntura. Pero en vez de plantear con esa sinceridad la problemática que vivimos, se presenta a una tecnología en investigación, que no tiene resultados definitivos y que ha salteado las fases tradicionales y necesarias, establecidas por la bioética para el desarrollo de tecnologías medicas, como la salvación. Y se la presenta de una manera en que cualquier pensamiento, no critico sino desde la lógica de los principios de precaución, es tildado como un anti cientificismo, cuando en realidad lo anticientífico es no dudar, y lo anticientífico es transformar en dogma indiscutible una tecnología que está en experimentación todavía.

BD: ¿Hay una especie de Dios Vacuna?

D.V. : Hay una especie de Dios Tecnología. Y entonces nos llevan a tener que ponernos en una posición en que, cualquier pensamiento, ni siquiera critico sino de duda con respecto a lo que se está planteando, es un pensamiento terraplanista, anti-vacunas, que quiere que el mundo desaparezca cuando en realidad estamos planteando lo contrario.

Yo personalmente me vacuné, asumiendo el riesgo que implica, consciente del riesgo y consciente de que vacunarme no me trasforma en un héroe, así como no vacunarme no me transformaba en un demonio. Cuando yo decidí vacunarme fue una decisión personal e individual, porque las vacunas que hoy están en experimentación y que se están probando para el Covid-19, ninguna de ellas impide el contagio y no impiden que uno vacunado se contagie, ni impiden que uno vacunado contagie a otros, por lo que entonces es falso plantear que con la vacunación se obtiene inmunidad de rebaño. Con la vacunación lo que se obtiene, según los primero estudios y las investigaciones que se han hecho en este proceso acelerado de generar datos a corto plazo, no a mediano y largo plazo, aparentemente es una disminución en la gravedad de los cuadros de quienes se enferman estando vacunados. Y esto es, hasta ahora, aparentemente, una evidencia fuerte. Lo que quiere decir que vacunarse o no vacunarse es una medida de protección absolutamente individual y no colectiva como se está planteando.

En ese contexto, si tuviésemos la posibilidad de contar con organismos sanitarios y de control creíbles del trabajo de las corporaciones farmacéuticas, nosotros tendríamos hoy la posibilidad de estar definiendo si yo quiero o no ser parte de ese proceso de experimentación, reconociendo los riesgos individuales que trae esto, no poniendo como Dios, ni como salvación universal una tecnología, sino entendiendo que es una de las posibilidades de tecnologías que podrían resultar beneficiosas. Por eso la discusión vacuna sí, vacunas no, es una discusión absolutamente estéril, que lo único que hace es profundizar el negocio de quienes lucran con la enfermedad. Yo no digo vacunas sí, vacunas no. Me parece que discutir vacunas sí, vacunas no, es hacerle el juego a los que quieren que nosotros sigamos sin poner el eje en donde debemos ponerlo.

La discusión hoy sería que seguimos manteniendo las condiciones que hicieron posible la aparición de un virus como el Covid, ahora, pero antes fue la H1N1. De 50 tipos de virus de la familia de los coronavirus, solamente uno es dañino para la salud y todos ellos aparecieron en el siglo XXI. Entonces tenemos que tener en cuenta estas cosas. Y desde ahí yo digo: en vez de estar discutiendo vacunas sí, vacunas no, ¿por qué no dejamos que la ciencia investigue con las personas que quieran ser parte de ese proceso de investigación voluntariamente y ponemos los esfuerzos, la energía y el dinero en la construcción de nuevas condiciones objetivas de existencia? Y que nuestras comunidades tengan acceso a alimentos sanos que permitan construir sistemas inmunológicos fuertes, acceso al sol garantizado, no ciudades donde el sol no entra en ningún lado por estar todas rodeadas de edificios, porque si no accedo al sol para poder sintetizar la vitamina D estoy complicado, si no aseguro horas de ocio y horas de descanso para poder recuperar a partir del descanso, los circuitos neurológico y endocrinos o neuroendocrinos que permiten que nuestro organismo y nuestro sistema inmunológico pueda construirse y desarrollarse, horas de actividad física y de movimiento para que ese proceso del sistema inmunológico esté cuidado y esté desarrollándose saludablemente. Y en ese contexto que requiere claramente una inversión de dinero del Estado, mejorar las condiciones objetivas, para que cuando aparezca una tecnología que te permita fortalecer ese proceso ya construido socialmente, estemos en mejores condiciones.

Pero si en vez de hacer eso, lo que hacemos es que ponemos todo el dinero en la construcción de tecnologías que terminan después siendo usados por los laboratorios o por las corporaciones farmacéuticas, yo creo que lo que estamos haciendo es perdiendo de vista cuál es el verdadero problema. El problema no es el Covid, el problema hoy no es una familia de virus como la corona. El problema es un modelo de realización de la sociedad que, para beneficio de menos del 10% de la población del mundo, ha puesto en peligro al 100% del planeta.

«El problema no es el Covid, el problema hoy no es una familia de virus como la corona. El problema es un modelo de realización de la sociedad que, para beneficio de menos del 10% de la población del mundo, ha puesto en peligro al 100% del planeta».

BD: Ahora, vivimos en un sistema donde lo que prima es la explotación y la ganancia. Esta perspectiva que vos planteás, plantea otra perspectiva de vida.

D.V. : Yo creo que tenemos que ser claros en algunos aspectos. Hay que reconocer que el principal problema del planeta a nivel sanitario no es el Covid sino que es el calentamiento global, que es antropogénico. Si no reconocemos eso, bajemos la persiana. Porque si no reconocemos eso, nada de lo que hagamos va a ser realmente efectivo. El 1% del planeta más rico es responsable de la emisión de gases de efecto invernadero en volúmenes igual a lo que emite el 50% más pobre del planeta. O sea que, de 100 personas, hay 1 que genera la misma cantidad de gases de efecto invernadero que las 50 más pobres. Y los que pagan las consecuencias que implica el calentamiento global por la emisión de los gases de efecto invernadero son fundamentalmente los 50 más pobres, que son los que menos emiten. Esto no significa que empiecen a emitir mas los más pobres para poder democratizar la contaminación, todos tenemos que dejar de emitir. Pero la responsabilidad es común y diferenciada.

Ese concepto de la responsabilidad común y diferenciada es clave. Yo no puedo exigirles a las comunidades que hoy están destruidas, sin posibilidad de garantizar su existencia cotidiana que tengan en su agenda la disminución de los gases de efecto invernadero. Creo que el rol del estado y de la política pública es que se asuman esas responsabilidades comunes y diferenciadas.

BD: Pero venimos de décadas en donde las políticas públicas van en el sentido absolutamente contrario.

D.V. : Hace ya bastantes años que venimos en la dirección contraria de la que hay que ir. Y hace ya bastantes años que hay voces que se elevan contra la ciencia hegemónica que están planteando que este no es el rumbo. El problema es que se prefiere oír a otras voces, y se prefiere transformar todo este problema en una cuestión de dogmatismo, que termina en una situación de ‘yo creo’ o ‘yo no creo’.

Y la verdad que yo no creo en nada, yo dudo de todo. Y porque dudo de todo me permito decir que quizás no sea el camino adecuado el seguir negando la evidencia que nos da el planeta a partir de los signos y síntomas que ya están a nuestra vista y a nuestro alcance de ser analizados y comprendidos, como por ejemplo el aumento de la temperatura planetaria. O la disminución del caudal del rio Paraná… Todo eso no es un invento, eso está.

¿Qué va a pasar en diciembre cuando no tengamos agua para todos los que vivimos en Rosario? Ya hoy no tenemos agua para todos, pero en diciembre va a haber menos. Esto es como un cuerpo: el corazón no se va a quedar sin sangre, lo que se va a quedar sin sangre primero son las periferias: los que vivimos en el centro de la ciudad no nos vamos a quedar sin agua, porque la red está armada pensando en el centro, pero las periferias se van a aquedar sin agua para que puedan sostener el agua en el centro. ¿Y qué va a hacer la gente de las periferias cuando no tengan agua?

Acá creo que aplica muy bien la metáfora de la cocción de la rana: si esto se va haciendo gradualmente como aumentarle el calor de a poquito a la rana que está en la olla, la terminamos cocinando. Se termina aceptando como natural que esto es así. Si esto se hace bruscamente, la rana va a saltar de la olla y no la vamos a poder cocinar. Y en ese punto es donde estamos hoy parados. Nosotros tenemos que definir si vamos a aceptar ser ranas en primer lugar. Y en segundo lugar, si como ranas, sabiendo como viene la mano, vamos a seguir haciéndonos los distraídos cuando nos empiecen a aumentar la temperatura.

BD: Esto nos lleva a pensar en los mecanismos que tienen los espacios de poder para ir segregando a esas voces dentro de la ciencia que se levantan por una ciencia digna y en contra de la ciencia al servicio de las corporaciones.

D.V. : A marzo de 2021, a nivel mundial, se invirtieron para las vacunas del Covid, 13 mil millones de dólares, de los cuales las corporaciones, las industrias farmacéuticas, han invertido nada más que 2.700 millones. Del resto, 1.300 fueron aportados por organismos que hacen filantrocapitalismo, la fundación Bill y Melinda Gates básicamente. Y más de 8.000 de los 13.000, fueron aportados por los estados en todo el planeta. Sin embargo, la provisión de vacunas es definida por las corporaciones farmacéuticas, que son los que se llevan las ganancias. Al autorizarse la vacuna de Pfizer como vacuna para menores de 18 años, Pfizer y Moderna duplicaron, sin ninguna justificación, el costo de su vacuna para Europa. Si realmente estamos en una situación pandémica, una situación de crisis sanitaria tal como para frenar el mundo. Ese conocimiento, ¿no debería estar en función de toda la humanidad si ningún tipo de registro de propiedad intelectual?

Claramente el extractivismo, para que quede claro, funciona gracias al dinero del estado. Sin subsidios, sin políticas públicas al servicio del extractivismo, no sería viable. El extractivismo es viable porque los caminos los paga el estado, porque las vías navegables las sostiene el estado, porque los impuestos se los baja el estado, porque los costos en salud los paga el estado, porque los costos sociales los paga el estado. Quiero decir que el extractivismo no es viable sin subsidio del estado. Para todos los que dicen que el estado debe correrse, queda claro que, y los últimos años de nuestro país lo han evidenciado muy claramente, plantean esto solo a la hora de juntar las ganancias, pero quieren un estado presente a la hora de hacerse cargo de las pérdidas. Nosotros creemos que ahí debe estar la discusión, no en qué momento el estado tiene que estar presente sino en cómo debe cambiar la política del estado para dejar de fomentar el extractivismo, para dejar de fomentar estas lógicas destructoras del territorio y empezar a fomentar políticas que piensen en la salud. En la salud de los territorios para tener salud de los pueblos.

Fuente: Borrador definitivo

Entrevista de Luis Cuello

El extractivismo no es viable sin subsidio del estado

Argentina, Litio

SE CREA LA REGIÓN MINERA DEL LITIO

09/10/2021
Los gobernadores de Catamarca, Raúl Jalil, de Salta, Gustavo Sáenz y de Jujuy, Gerardo Morales, firmaron el acuerdo interprovincial por medio del cual se creó la Región Minera del Litio. En representación del Estado Nacional, estuvo presente el secretario de Minería del Ministerio de Desarrollo Productivo, Alberto Hensel, quien transmitió el apoyo absoluto a la iniciativa de las provincias.

Este Tratado establece que las provincias “trabajarán por el desarrollo económico y social mediante la investigación, extracción, producción, industrialización y comercialización del Litio, presente en salmueras, y sus productos y derivados”. Además, se crea el Comité Regional del Litio (CRL) que estará compuesto por las autoridades mineras de cada una de las provincias con el fin de coordinar la investigación, producción, industrialización y comercialización del Litio a lo largo de toda su cadena de valor.

Gerardo Morales resaltó la importancia de este acuerdo ya que deja en claro la soberanía provincial sobre este recurso tan valorado en el camino hacia la transformación energética mundial. “Me alegra la iniciativa de constituirnos como la región del litio autónomamente y que contemos con el acompañamiento del Gobierno nacional es una muy buena noticia”, aseguró el gobernador de Jujuy.

Por su parte, Sáenz afirmó: “Estamos convencidos de que los empresarios, los proveedores, las cámaras vienen con la esperanza de ver a trabajar tres provincias de manera conjunta. Y nosotros estamos acá diciéndoles esta es la región del litio, aquí vamos a trabajar de la misma manera si están en Catamarca, si están en Jujuy o si están en Salta”.

A su turno, el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil expresó su satisfacción por la realización de la Mesa del Litio en Catamarca, y sostuvo que “cada día la Mesa del Litio es más grande, se suman actores importantes que buscan trabajar para mejorar la vida de nuestras poblaciones a partir de la utilización de este mineral”.

Alberto Hensel aseguró el total apoyo de parte del Gobierno nacional a esta iniciativa y resaltó que la misma representa “un gesto muy fuerte de institucionalidad, de pensar en el futuro, de tener mirada estratégica y de pensar en la Argentina con políticas de estado independientemente de las convicciones políticas y el estado argentino va acompañar esta iniciativa”.
Fuente: El Agrario

Se crea la región minera del litio

Argentina

¿Gobernadores y empresas se disputan el control de la Secretaría de Minería?

09/10/2021
Laura Ropolo, Josefina Magary y Maira Marcos dejaronla Secretaría. Según La Política Online, los cambios en el gabinete de Hensel exponen los intereses en juego.
Por Luciana Glezer
Luego de reunirse con la cámara empresaria, el secretario de minería, Alberto Hensel, decidió modificar parte de su gabinete y comenzó la disputa por el control de la Secretaría.

Hensel es un delfín de Sergio Uñac con lo cual representa los intereses de los jugadores sanjuaninos, donde mella fuerte la Barrick Gold. La provincia viene de recibir más de 33.200.000 de pesos por parte del gobierno nacional. Allí el secretario de Minería se refirió a un plan de desarrollo para los próximos 50 años, puso en valor el Modelo San Juan e instó a que se desarrolle a nivel nacional.

En ese sentido explicó que la minería necesita previsibilidad, seguridad jurídica y largo plazo por los volúmenes de inversión que maneja el sector. Resaltó que desde el 2007 al 2016 la inversión extranjera fue de 16 mil millones de dólares y destacó a San Juan como “la provincia más elegida para la inversión minera, en exploración y operación y se debe fundamentalmente a la decisión política del gobernador y la continuidad de políticas públicas y una sociedad que acompaña”.

El primer cambio sobrevino con el nombramiento de Jorge Andres Vera como flamante subsecretario de desarrollo minero, tal como lo anticipo el portal especializado Enernews. Vera se pronunció públicamente y en varias oportunidades en contra de leyes ambientales que rigen la actividad en la provincia de Mendoza y de Chubut.

Vera es el reemplazante de Laura Ropolo, muy criticada por la empresas por su “exceso de ambientalismo y defensora de las regulaciones que traban inversiones” caracterizan desde la cámara. Con ella se fueron dos funcionarias del área, Josefina Magary y Maira Marcos, cuya trayectoria profesional acreditaban en ARBA, agencia de recaudación de la provincia, organismo al que regresaron.

Vera se pronunció en contra de leyes ambientales que rigen la actividad en la provincia de Mendoza y de Chubut.

El dato es que las exportaciones de minerales alcanzaron los 3200 millones de dólares en el 2020 y desde el gobierno apuntan a triplicar esa cifra con un plan de fomento a las inversiones amparados en la demanda de los empresarios esto es reducción impositiva y flexibilización de los controles incluido el acceso a las divisas para cumplir con los compromisos de deuda y reparto de dividendos.

¿Gobernadores y empresas se disputan el control de la Secretaría de Minería?

Argentina, Internacional, Litio

La china Zijin comprará minera canadiense centrada en el litio en Argentina

11/10/2021
Shanghái (China), 11 oct (EFE).- Zijin Mining, uno de los mayores productores de oro y cobre de China, anunció un acuerdo para adquirir la totalidad de la canadiense Neo Lithium, centrada en la explotación de su mina de litio de Tres Quebradas, en la provincia noroccidental argentina de Catamarca.

En un comunicado remitido anoche a la Bolsa de Hong Kong, donde cotiza, la compañía indica que comprará todas las acciones de Neo Lithium por unos 960 millones de dólares canadienses (770 millones de dólares, 666 millones de euros).

Zijin pagará 6,5 dólares canadienses (4,81 dólares, 4,16 euros) en efectivo por cada título, lo que supone un aumento del 18 % con respecto al último precio de cierre de Neo Lithium en la Bolsa de Toronto.

La operación todavía está pendiente de la aprobación por parte de los reguladores chinos y canadienses, así como de los accionistas de Neo Lithium, y Zijin advierte de que su consecución todavía «está sujeta a incertidumbres».

De cualquier forma, las acciones de Zijin en Hong Kong se dispararon hoy: pasadas las 14.30 hora local (06.30 GMT) la subida era del 8,4 %.

El principal activo de Neo Lithium es el citado proyecto de Tres Quebradas, que controla a través de su subsidiaria local Liex, cuyos equipos directivos y de trabajo se mantendrán igualmente en sus puestos tras la operación.

El proyecto se basa en la explotación de lagunas de salmuera ricas en litio situadas a unos 30 kilómetros de la frontera con Chile, a unos 4.100 metros sobre el nivel del mar.

«Creemos que ya es momento de que nuestro proyecto pase a la fase de construcción y producción de la mano de Zijin», apuntó recientemente el presidente y consejero delegado de Neo Lithium, Waldo Pérez.

Según los estudios preliminares, se espera que Tres Quebradas produzca unas 20.000 toneladas anuales de carbonato de litio apto para baterías -por ejemplo, de vehículos eléctricos- a lo largo de unos 35 años.

El potencial, apunta el comunicado, es incluso mayor: «A través de la adopción de la tecnología de evaporación, es posible que el lago de salmuera produzca entre 40.000 y 60.000 toneladas de carbonato de litio por año».

El pasado mes de junio, Neo Lithium fue capaz de producir carbonato de litio apto para baterías con una tasa de pureza del 99,891 % en una de las instalaciones piloto que ha construido en el área, que se componen de dos salinas donde se evapora el agua y una planta con una capacidad de producción anual de 40 toneladas.

Zijin espera efectuar una inversión inicial de unos 319 millones de dólares (276 millones de euros), con un período estimado para el retorno -sin contar lo pagado por la adquisición de la empresa ni el tiempo de construcción- de 1,7 años.

«El proyecto tiene un gran volumen de recursos, con el potencial para expandir su capacidad de producción y las condiciones para que se convierta en una base de producción de lago de salmuera (rica en litio) a gran escala y de nivel mundial», apunta la minera china.

Asimismo, según el comunicado, el desarrollo del proyecto de Tres Quebradas «hará contribuciones significativas al desarrollo económico y social de la comunidad y de la provincia de Catamarca».

Según la información que Zijin ofrece en su página web, la minera china tiene ya presencia en Sudamérica a través de las minas de oro de Buriticá (Colombia) y Aurora (Guyana) y de la de cobre de Río Blanco (Perú).
https://www.eldiario.es/economia/china-zijin-compra-minera-canadiense-centrada-litio-argentina_1_8385686.html

Argentina

Andalgalá: denuncian al extractivismo minero ante las Naciones Unidas

05/10/2021
El Servicio Paz y Justicia (Serpaj) aseguró que “esta actividad origina inmensos impactos ambientales negativos en el agua, aire, flora y fauna nativa, y afecta la salud y vida de las personas, incluidos los miembros de la comunidad indígena y local”.

En el marco del diálogo interactivo con el Mecanismo de Expertos sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas ante el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, el Servicio Paz y Justicia (Serpaj) denunció que la actividad minera en Andalgalá, Catamarca, afecta la calidad de vida de las comunidades que allí residen.

En el encuentro, creado para dar seguimiento al cumplimiento de la Declaración de Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, la abogada del organismo señaló que la exploración y explotación de los yacimientos mineros “origina inmensos impactos ambientales negativos en el agua, aire, flora y fauna nativa, y afecta la salud y vida de las personas, incluidos los miembros de la comunidad indígena y local”.

Según la letrada, la población de Andalgalá “vive en conflicto desde hace ya más de 20 años y sufriendo las violaciones a sus derechos fundamentales por parte del Estado Argentino”.

“La Ciudad de Andalgalá, en Catamarca, Argentina, está ubicada en el valle sur de las Sierras de Aconquija en la precordillera. Su población está conformada por integrantes del Pueblo Indígena Diaguita Calchaquí y ciudadanos no indígenas. Este cordón montañoso se encuentra cubierto de glaciares y ambiente periglaciar, y de él nace la cuenca del río Andalgalá que sustenta la vida en la zona”, relató.

Y continuó: “Sobre este ecosistema y a escasos 17 kilómetros de la plaza principal del pueblo, la empresa minera canadiense Yamana Gold, intenta explorar y explotar el yacimiento minero Agua Rica”.

En ese sentido, la abogada expresó la preocupación del colectivo ante “la falta de aplicación de los derechos humanos, incluidos los definidos en la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas”, ya que el Estado no escucha el reclamo de las comunidades y “se empecina en autorizar las actividades mineras, violando así sistemáticamente la normativa ambiental y particularmente la normativa nacional que prohíbe la exploración y explotación de la minería en ambiente glaciar y periglaciar”.


Una lucha criminalizada

Desde hace 4 años que la ciudadanía de Andalgalá se moviliza para exigir el fin proyecto MARA de la ex minera Agua Rica, que viola la ley de glaciares, ya que se establece en una zona periglaciar protegida por la norma. Este proyecto estará dirigido por tres empresas: Yamana, Glencore y Newmont.

En abril de este año, los vecinos y vecinas realizaron la marcha número 584 contra la megaminería contaminante. Ese día la represión fue brutal, y 12 asambleístas fueron detenidos. Al día de hoy, los vecinos implicados continúan judicializados.

En la última semana, cinco mujeres fueron llamadas a declarar por su imputación en el marco de la causa donde se las acusa de atentar contra la empresa Yamana. “La denuncia está basada en la acusación por pintadas a un establecimiento de la minera durante una protesta en junio de este año. No tienen pruebas solo testimonios de empleados de la empresa de seguridad”, explicó el abogado de las acusadas.

Desde la pueblada de abril, un total de 17 personas fueron judicializadas. “Es una maniobra de amedrentamiento para acallar la protesta social y avanzar contra nuestro territorio”, denunciaron los asambleístas.

Andalgalá: denuncian al extractivismo minero ante las Naciones Unidas

Argentina, Litio

Hensel descartó que el gobierno planee crear una empresa estatal o la nacionalización del litio

Por Roberto Bellato
28/09/2021
El secretario de Minería remarcó que el gobierno “no está pensando en una estatización (del litio) o creación de empresa minera estatal”. Lo dijo en el evento Lithium in South America 2021 organizado por Panorama Minero.

El secretario de Minería, Alberto Hensel, descartó la idea que tenía un sector del Frente de Todos vinculado a la vicepresidenta Cristina Fernández de crear una empresa pública de litio. También dejó a un lado el proyecto de los diputados Marcelo Koenig y Carlos Heller para nacionalizar la industria del litio. En concreto, Hensel señaló que el Poder Ejecutivo “no está pensado de ninguna manera en una estatización (del litio) o creación de empresa minera estatal. No es idea de Alberto Fernández, ni de (Matías) Kulfas ni la mía. Somos pragmáticos y realistas”. La declaración la realizó en el evento Lithium in South America 2021 organizado por Panorama Minero. “Creemos en la articulación público – privada”, añadió el titular de la cartera minera.

Así, Hensel negó que desde el Ministerio de Desarrollo Productivo o desde la Casa Rosada estén evaluado avanzar en una nacionalización de la industria del litio o de crear una empresa estatal para este sector minero, que es clave para otras industrias como la tecnológica y la de autos eléctricos.

Un sector del Frente de Todo referenciado en los diputados nacionales Koenig y Heller tenían en carpeta hace algunas semanas atrás un proyecto de Ley para nacionalizar la industrialización del litio que se produce en el norte del país. El proyecto de los diputados pretende declarar al litio de “interés estratégico” y que el Estado tenga un rol de control sobre las fases de exploración y producción. Hasta el momento nunca avanzó ni se conocieron más detalles, pero generó diferencias hacia el interior del Frente de Todos.

La Argentina forma parte junto a Chile y Bolivia del Triángulo del Litio, la reserva más grande de este mineral en el mundo. La iniciativa de estos diputados del Frente de Todos, también vinculados a Máximo Kirchner, también había generado rechazo por parte de las provincias que cuentan con recursos de litio como Jujuy, Salta y Catamarca.
YPF Litio

YPF, la compañía controlada por el Estado, creó a principios de septiembre la firma YPF Litio S.A., desde donde prevé avanzar en el desarrollo tecnológico para la fabricación de baterías de litio, por ahora de baja escala industrial. La nueva firma está asociada a Y-TEC, empresa de tecnología creada en 2013 con el 51% en manos de YPF y el 49% del Conicet.

YPF Litio está construyendo una planta industrial de baja escala que demandará US$ 5 millones y que podría comenzar a producir baterías en el segundo semestre de 2022. La etapa piloto a escala del laboratorio de YPF Litio permitirá una producción de 13 Mw/hora por año, que resulta el equivalente a equipar las baterías para unos 45 colectivos eléctricos.

Hensel descartó que el gobierno planee crear una empresa estatal o la nacionalización del litio

Argentina

CRISIS HÍDRICA Y ZONIFICACIÓN MINERA: ¿AGUA PARA LA VIDA O PARA LAS EMPRESAS EXTRACTIVISTAS?

24/09/2021
Las asambleas de toda la provincia nucleadas en la Unión de Asambleas de Comunidades de Chubut (UACCh) comunicamos que el gobierno de la provincia del Chubut, a través del Ministerio de Ambiente y el Instituto Provincial del Agua (IPA) continúa allanando el camino para el saqueo de nuestros bienes comunes.

El día de hoy, viernes 24 de septiembre, vence el plazo para manifestarse respecto de la obra del azud (dique de contención) en el lago Fontana, en la farsa de audiencia pública convocada por el Ministerio de Ambiente. Denunciamos este acto administrativo como farsa, puesto que han echado mano de la pandemia una vez más, para evitar la instancia de control ciudadano participativo que supone una verdadera Audiencia Pública. No se han tomado siquiera la molestia de presentar el proyecto en las comunidades que se verían afectadas por la merma de caudal del río, como Facundo o Senguer, o de publicar la convocatoria correspondiente a audiencia pública en los pueblos y paraje que atraviesa el río. Amparados en una resolución dictada en forma clandestina durante los meses más fuertes de la pandemia, reducen el mecanismo participativo a un período en el cual realizar observaciones en forma escrita, infringiendo en la práctica la normativa y los acuerdos vigentes sobre participación ciudadana en materia ambiental. La toma de decisiones sobre bienes comunes sin participación ni control de la ciudadanía soslaya la intención de entregar la bidiversidad de nuestros territorios a corporaciones multinacionales, a cambio de reducir la deuda externa. Esta intención se promueve en los acuerdos que pretende llevar a cabo el gobierno nacional con el Fondo Monetario Internacional.

Queremos compartir con la población de Chubut nuestra certeza de que el proyecto del azud en el nacimiento del Río Senguer es el paso previo a la construcción del ampliamente rechazado dique Los Monos aguas abajo. Rechazamos estos proyectos de intervención sobre una cuenca sumamente degradada por la extracción petrolera, testimonio de la asociación criminal entre los privados y el estado para el saqueo del agua y demás bienes comunes, dada la completa ausencia de controles por parte del estado provincial.

Con otros dos proyectos de megarepresas en carpeta (en Corcovado y en Gualjaina), y con una ley de emergencia hídrica aprobada por una de las legislaturas más entregadas a los poderes extractivistas de las que se tenga memoria, alertamos sobre la vigencia de un proyecto integral de intervención en nuestros territorios hidrosociales con fines de saqueo. Rechazamos la aprobación de la ley de emergencia que dota al IPA y al ministerio de Infraestructura de un presupuesto extraordinario para estos megaproyectos y debilita los mecanismos de transparencia establecidos en la normativa vigente, como venimos denunciando. Mientras el discurso público del presidente del IPA, Ing. Cittadini, nos responsabiliza a lxs vecinxs del cuidado del agua, en legislatura avanza un proyecto que propone la instalación de medidores en las casas como única medida para paliar la crisis hidrica, desconociendo la responsabilidad de controles del estado sobre los grandes consumidores, como ser la industria y las actividades extractivistas. Tampoco se proponen sanciones a quienes contaminen cursos y cuerpos de agua dejándolos inutilizables para otras actividades, como se ha puesto de relieve con la coloración rosa de las lagunas de contención en Trelew. Alertamos a las comunidades sobre la creación de Comités de Emergencia Hídrica (según lo establecido en el art. 9° de la ley aprobada recientemente), que tienen por función legitimar los fines extractivistas del IPA y los ministerios del gobierno provincial.

En estos días se dio difusión a un informe de la empresa Pan American Silver donde la transnacional minera reconoce que invierte millones de dólares en intentar quebrar la resistencia a la megaminería en la meseta central de Chubut. En la presentación del informe, funcionarias de la empresa ratificaron que realizaron “un relevamiento de Comunidades Originarias en la zona, con georeferenciación para conocer como están compuestas, quienes son los titulares de las tierras, el perfil socioeconómico de las personas, la edad, el nivel de formación e ingresos, los índices de masculinidad, si hay personas que han migrado y la infraestructura en que viven”. Denunciamos la ilegalidad de estas técnicas de investigación sobre nuestrxs vecinxs de la meseta y sobre las comunidades que han interpuesto una acción de amparo que mantiene frenado el tratamiento del proyecto de ley de zonificación minera dle ejecutivo provincial y nacional en la legislatura de Chubut, y exigimos una vez más el retiro de Pan American Silver del territorio chubutense.

Por una gestión del agua como bien común para la vida, y en repudio a quienes pretenden privatizarla para entregársela a los capitales transnacionales que queman nuestros bosques y codician nuestro subsuelo, EXIGIMOS LA DISOLUCIÓN DEL IPA y la puesta en marcha de una política de aguas acorde a los tiempos que atravesamos y las necesidades de los pueblos.

Seguimos acompañando el reclamo de la comunidad de YALALAUBAT por agua para la vida y la producción. Compartimos la indignación como vecines de a pie frente a la burocracia estatal y sus especulaciones electoralistas, que mantienen a la aldea sin una nueva perforación incluso cuando tienen ya la maquinaria para realizarla en el territorio. Abrazamos a nuestrxs vecinxs de la meseta central y de la zona sur de la provincia y les hacemos saber una vez más que ¡NO ESTÁN SOLXS!

Saludamos a las comunidades mapuche y mapuche tehuelche que han logrado un fallo favorable en su planteo de inconstitucionalidad del decreto gubernamental que intentó crear una Comisión de Tierras Indígenas sin consultarle a las comunidades, y reafirmamos en este saludo nuestra alianza fundamental en defensa de la vida, el agua y el territorio. ¡WEWAIÑ KOM PU CHE!

¡RETIRO INMEDIATO DEL PROYECTO DE ZONIFICACIÓN MINERA!

¡DISOLUCIÓN DEL IPA!

¡AGUA PARA YALA!

¡NO A LAS REPRESAS! ¡NO A LA ELENA! ¡NO AL DIQUE LOS MONOS! ¡EL RÍO LEPÁ CORRE LIBRE EN TERRITORIO ANCESTRAL RECUPERADO!

Crisis hídrica y zonificación minera: ¿agua para la vida o para las empresas extractivistas?

Argentina

Gerardo Morales: «El cannabis nos dejará más renta que el litio y la energía renovable juntos»

El gobernador de Jujuy habló sobre el desarrollo de la industria cannábica en su provincia y el futuro en este rubro.
Jorge Fontevecchia
25/09/2021
—Dijiste que “la planta del cannabis es virtuosa, fantástica y tremenda”. ¿Qué significa para la provincia?

—Autorizamos plantar 35 hectáreas. Tenemos un proyecto de ampliar a 600 más. Ya tenemos la planta de secado comprada en Europa. Está llegándonos un laboratorio de Estados Unidos. Tenemos un laboratorio piloto ya hace más de un año. Logramos una tonelada de flor. Vamos a producir en la primera parte de las 35 hectáreas otra tonelada más y después 15 toneladas. Ya el 29 de septiembre estamos proveyendo a los hospitales públicos aceite para aplicar a los casos de epilepsia refractaria. Después tenemos un convenio con la Universidad Austral para aplicar al dolor por cáncer.

—Son todos usos no psicotrópicos.

—Es con el CBD. El cannabis tiene THC, que es el componente cannabinoide psicotrópico, y CBD, que no lo es. Hace pocas semanas fue autorizado para venta libre en Europa. Así que con el CBD estamos fabricando ya aceite de cannabis.

—¿Es correcto compararlo con la soja?

—Son 600 hectáreas. Ocupará a cerca de 2 mil trabajadores. Con el proyecto para 2023, serán 8 mil trabajadores. Son más trabajadores que lo que tiene todo el complejo tabacalero. Espero que en los próximos cinco o siete años sea el sustituto, la alternativa al tabaco. Allí tenemos 15 mil trabajadores, pero dos o tres meses al año. Los 8 mil del cannabis trabajan todo el año. La empresa es pública, con 600 hectáreas. Nos dejará más renta que el litio y que la energía renovable juntas. Estimamos facturar 250/300 millones de dólares para 2023, una rentabilidad del orden de los 200 millones de dólares.

—¿Será la principal fuente de riqueza de Jujuy?

—Más que el litio y que cualquier producto agropecuario. Desde marzo/abril del año que viene estaremos convocando al sector privado para invertir. En cinco o siete años tiene que sustituir a la producción del tabaco, lo que es un desafío. A fin de año tendremos un proyecto de producción de bioplástico. Con las 35 hectáreas, tendremos 15 toneladas de masa de cáñamo. Para el aceite solo se usa la flor. El cáñamo que tenemos se puede usar para bioplástico, papel y para textiles. Imaginate lo que implica para nuestras artesanas de Purmamarca y de Tilcara.

—¿Habrá ponchos con cannabis?

—Un poncho con tela del cannabis. Nos abre a un desafío científico y tecnológico diferente. Fue lo que nos pasó con el litio.

—Hasta hace diez años la provincia vivía del tabaco. El litio y el cannabis cambiaron el paradigma.

—Y las energías renovables. Estamos con la planta de 300 megas.

—Energías renovables es una cuestión que está en todo el país.

—Tenemos una de las mayores radiaciones solares del mundo. El litio es un tema importante que trabajamos Salta y Catamarca también. Tenemos el compromiso de una empresa china como Gangfeng y una empresa italiana para fabricar baterías de litio cuando haya movilidad eléctrica.

—¿El litio sería la materia prima y la batería sería el producto elaborado?

—Producimos carbonato de litio. Para llegar a la batería de litio hay que convertir el carbonato de litio en material activo. Luego hay que fabricar, es otra etapa, la tercera, las celdas de litio de ánodo y cátodo, y el ensamble de baterías.

—¿Cuántos países del mundo hacen eso?

—La segunda etapa, activar el material activo, diez países.

—¿Tienen eso los otros dos países poderosos en litio, Bolivia y Chile?

—No. Chile siempre fue el más avanzado, pero no están fabricando aún. No tienen la tecnología. Bolivia está más atrasado que nosotros. Tendremos un desarrollo científico y tecnológico más importante que Chile. Estaremos dentro del grupo selecto de países que fabriquen la batería de litio en todas sus etapas.

—Matías Kulfas fue uno de los promotores del desarrollo de la industria cannábica y al mismo tiempo es uno de los ministros criticados por Cristina Kirchner. ¿Cómo fue tu propia experiencia con él?

—Muy buena. También impulsa la movilidad eléctrica. A eso va el mundo y debe ir Argentina. En 2050, si no hacemos nada, la temperatura en Jujuy aumentará entre 5 y 7 grados. La planta solar que tenemos de Cauchari es como sacar de circulación 200 mil autos que queman combustible y generan emisiones de carbono. Y el litio y las baterías del litio son el mejor acumulador de energía para la movilidad eléctrica. Argentina debe formar parte del cambio de la matriz energética en el mundo y del cambio en el transporte. Tenemos el proyecto Girsu financiado por el Banco Europeo de Inversiones. Recibimos un subsidio de 11 millones de euros de la Unión Europea y ya hemos eliminado 16 basurales a cielo abierto. En dos años eliminaremos los casi 70 basurales a cielo abierto de la provincia. El tercer factor de emisión de gases de efecto invernadero en la provincia de Jujuy es el mal tratamiento de los residuos sólidos. Es el camino, para la provincia y para Argentina. Lo hacemos con un plan de movilidad eléctrica, obligando a las automotrices a que tengan versiones de autos eléctricos, generando ese cambio para que en veinte años todos los autos sean eléctricos. Además, es más económico y crece el desarrollo científico y tecnológico de las baterías. La batería del celular que hoy dura 24 horas, el año que viene o de acá a dos años durará cinco días. De modo tal de que un Tesla que hoy tiene una autonomía de 300 kilómetros, con esa nueva versión de baterías tendrá 1.500. Es un cambio revolucionario. Es algo virtuoso y bueno para el planeta.

—Como sucede con el Plan Marshall verde de Joe Biden.

—La planta de cannabis es una de las que más elimina las emisiones de carbono. Por donde la veas es virtuosa.

—En lugar del yuyo que sería la soja, aquí estamos frente a la planta mágica.

—Tenemos un gran potencial. Además de medidas en términos impositivos, el país resolverá su economía desde la periferia al centro. Lo hará con un plan de aquí a diez o quince años

—Volvés al tema de la planificación.

—En el corazón de cada argentino debe haber un emprendedor y tiene que haber un Estado que tenga un plan y que desarrolle ese espíritu emprendedor con toda la energía. No lo hace solo el mercado; lo consigue un país con un plan.
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