“Muchos gobiernos de América Latina criminalizan la protesta social y eso hace que defender el medio ambiente sea jugarse la vida”. Gustavo Castro Soto, defensor de la Tierra y del Medio Ambiente, testigo del asesinato de la ecologista hondureña Berta Cáceres, acogido en el programa de protección de Amnistía Internacional en España, ofreció ayer su testimonio sobre las dificultades que padecen las comunidades indígenas para defender su territorio de la especulación.
“Nos preguntamos por qué hay tantas muertes en América Latina, y la verdad es que la culpa de todo esto la tienen los gobiernos que venden los recursos a las grandes transnacionales”, indicó Castro. A su juicio, Berta Cáceres, a la que acompañó en su agonía, tenía muy claro que la iban a asesinar, “ella siempre decía que se acababa el tiempo para defendernos”. Gustavo Castro estima que el proceso de empobrecimiento de las poblaciones indígenas se irá agudizando a medida que los gobiernos firmen tratados de libre comercio. “Y en esta lucha, la violencia es cada vez más fuerte contra las mujeres, que son un símbolo de resistencia”, añadió. Ignacio Bernardo, presidente de Amnistía Internacional en Asturias, destacó que no basta con defender los derechos humanos. “Hay que defender a sus defensores, que otros países se juegan la vida”. Celeste Intriago, de la Coordinadora de ONGD de Asturias, señaló que una parte de la lucha es “dar a conocer las situaciones injustas que se dan”. Castro fue uno de los fundadores del Movimiento Mexicano contra las Represas y en Defensa de los Ríos, la Red Mexicana de Afectados por la Minería y el Movimiento Mesoamericano contra el Modelo Extractivo Minero.
Fuente:http://www.remamx.org/2017/05/castro-defender-el-medio-ambiente-en-latinoamerica-es-jugarse-la-vida/