Al medio día de este domingo fue rescatado el cuerpo de una mujer en la mina ilegal de Santander de Quilichao, con la cual aumentan a 12 las víctimas mortales de la tragedia ocurrida el pasado miércoles. Se estiman que aún habrían cuatro personas desaparecidas.
Desde las 6:00 a.m. de este domingo se reactivaron los operativos de búsqueda de los cuerpos de los mineros que quedaron sepultados en un derrumbe en Santander de Quilichao, el miércoles pasado.
El pasado sábado, los organismos de socorro lograron el rescate de ocho cuerpos, que se suman a las tres víctimas mortales que fueron halladas el mismo día de la tragedia.
Los cuerpos han sido llevados a Medicina Legal en el casco urbano de Santander de Quilichao, donde profesionales de Cali y Popayán adelantan las respectivas necropsias. La identificación de las víctimas se ha dificultado por la descomposición en la que ya se encontraban.
Según lo confirmó el mayor Carlos Sandoval, comandante de la Defensa Civil seccional Cauca, se trata de cinco hombres y cuatro mujeres, quienes al parecer se encontraban junto a las demás personas que quedaron sepultadas por el deslizamiento.
Siete de las víctimas fueron halladas entre la mañana y la tarde, mientras que el cuerpo de un hombre fue encontrado pasadas las 8:30 p.m. del sábado.
«Vamos a focalizar la búsqueda en el sector donde se hallaron estos cadáveres. Ahí encontramos socavones y en ese mismo lugar los perros habían indicado que podía haber más cuerpos sin vida. Parece ser que el resto de desaparecidos están cerca, por lo que esperamos culminar las labores de rescate hoy mismo», indicó el jefe rescatista.
Sandoval no descartó la posibilidad de poder encontrar alguno de los desaparecidos con vida. «A los familiares les estamos brindando apoyo psicosocial para que guarden la esperanza y sean pacientes con las labores de búsqueda», puntualizó.
«Tenemos mucho dolor, mucha tristeza porque ver a nuestros seres queridos en esas condiciones como salen es demasiado duro. Esto es una tragedia anunciada y la comunidad está dolida con el estado por el abandono en que nos dejó aquí en manos de los mineros ilegales», Jaime Balanta, líder comunitario y familiar de los fallecidos.
«Es muy doloroso. Mi sobrina ni se despidió el día que salió para la mina. Dejó al esposo y un niño pequeño. No esperábamos que sucediera una tragedia como esta», Oliva Peña, tía de Diana Alexandra Peña que falleció en la mina.
El derrumbe registrado el pasado miércoles deja también tres personas lesionadas y seis desaparecidos, según estiman las autoridades.
Carlos Iván Márquez, director de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo (UNGRD), informó que en la zona en que fueron hallados los cuerpos sin vida este sábado se detuvieron las excavaciones con maquinaria y se procedió la labor con palas, lo que puede extender la labor de búsqueda por varias horas.
«Se continuarán operaciones hasta encontrar todos las personas. Estos hallazgos son un buen indicio para encontrar los otros cuerpos», afirmó Márquez.
De acuerdo con los cálculos de los organismos de socorro, se han removido hasta ahora 400.000 metros cúbicos de tierra.
Personal del CTI se encuentra haciendo el levantamiento de los cadáveres para llevarlos hasta Medicina Legal de Santander de Quilichao y hacer la identificación.
Algunos miembros de la comunidad, llevados por la angustia, aseguran que si no ven resultados pronto, entrarán a la zona para buscar por sus propios medios.
«Uno entiende el desespero de la comunidad y de los familiares, pero hay que pedirles paciencia y concientizarlos porque si no hemos encontrado nada con retroexcavadoras, mucho menos con pala, de forma artesanal», comentó el mayor Sandoval.
Actualmente hay alrededor de 150 personas de grupos de rescate, y junto al personal de Policía conforman un equipo de unas 450 personas que trabajan por encontrar a los mineros.
Investigan intervención en la zona
Miembros de la Fiscalía, la Policía Judicial Sijin y el Instituto Geográfico Agustín Codazzi intentan establecer las coordenadas terrestres donde ocurrió el derrumbe de la mina de oro ilegal que hasta el momento deja tres muertos, con el fin de establecer a quién le pertenecían las tierras.
Los operativos judiciales se empezaron a desarrollar desde el pasado viernes debido a que las autoridades lograron establecer que los predios donde ocurrió el alud, en la vereda el Palmar en el casco urbano de Santander de Quilichao (Cauca), se encuentran autorizados para la exploración por parte de la concesión Anglo Gold y no a la explotación ilegal que se refleja actualmente en la zona.